lunes, 22 de octubre de 2012

DICHO POR UNO Y CONCLUSION DE OTRO

 

Este señor, ha escrito al quijote, cantidad de artículos que de algunos amigos y amigas he recibido críticas por algunos términos que creen pocos moderados. Tal vez lo sean, pero pareciera formar parte de la hipocrecía en que vivimos digo yo, cuando entro a sus casas y los encuentro generalmente con la televisión encendida, mirando a Tinelli, la Canosa o Rial etc. los veo sin ánimo ni voluntad a reprender posiciones siempre mas groseras que las de Pareja. En él, al menos, pese al "poco control" de términología usada, abunda el uso del sentido común. 

Dijo Timerman: “Si es necesario iremos ante la ONU”. Digo yo: “Si es por Timerman, iremos a la mierda”.



Porque si bien no resulta fácil distinguir al más nefasto, tampoco es tan difícil armar tres o cuatro selecciones de Corruptos Apátridas devenidos de partos semejantes al de Rosemary, ¿está de acuerdo? Y a éste, yo hasta me animaría a tirarle la cinta de capitán de una de esas selecciones, ¿qué quiere que le diga? Recuerdo que un gran periodista, ya fallecido, en vida lo recordaba siempre con elocuente cariño; “constituye en sí mismo, un claro atentado a la especie humana”, solía decirnos en aquellos desayunos. Sin embargo, a mi modesto entender, posee rasgos que lo presentan como un tipo particularmente transparente… Sin mayor esfuerzo, se lo puede adivinar como “taimado repugnante”. A ver, y como para terminar, ¿Ud. alguna vez vio una piraña?… Bueno, cuando sonríe es lo más parecido, con la diferencia que es capaz de sobrevivir fuera del Amazonas o del Orinoco, y hacer del prójimo, su mamífero preferido.
Observe el lector que, haciendo la salvedad del título, me he animado a definir a este aborrecible personaje, sin necesidad de recurrir a palabrotas o expresiones cargadas de mal gusto. ¿El mérito? Ninguno, absolutamente. Él mismo se encarga, cual tacho de basura imantado, de robarse todo aquello que sepa o huela a podrido.
En tanto, la Fragata Ara Libertad, y su tripulación, siguen varados en Ghana, para sorpresa y burla del resto de los países del mundo. En tanto, advertida de su condición de Comandante en Jefe de las FF.AA. de la Nación, la señora Presidente de la Nación dispuso la evacuación de la Fragata, manteniendo a bordo a su capitán y tripulación mínima. Es de esperar que la orden de la evacuación, el Canciller no la resuelva haciéndole aplicar a cada uno de los restantes, una enema. ¡Tá… sabía que a la larga iba a meter la pata! Perdone.

Ricardo Jorge Pareja