domingo, 29 de septiembre de 2013

LOS MUERTOS QUE ELLOS MATARON Y "VOS PAGAIS"... GOZAN DE BUENA SALUD

LOS MUERTOS QUE VOS MATAIS GOZAN DE BUENA SALUD

Este viejo refrán, cuya autoría no ha sido debidamente demostrada, en suma hace referencia a toda afirmación exagerada que los hechos desmienten de manera terminante, dejando en ridículo a quién lo proclama.
No es la primera vez que nos referiremos al “negocio de los Derechos Humanos”, ya en varias oportunidades hemos denunciado que el gobierno y algunas organizaciones de los Derechos Humanos, sumados a siniestros personajes habían hecho de esa causa un pingüe negocio. No queremos hablar de la corrupción enquistada, solo la mencionamos como otra aberración que la sociedad no debe tolerar nunca más.
La investigación de Luis Gasulla, volcada en su libro “El Negocio de los Derechos Humanos”, revela el modo en que los Derechos Humanos pasaron del idealismo impoluto al barro de la corrupción y los negociados. Un tsunami desbocado de fondos públicos, tráfico de influencias, revisionismo histórico y tergiversaciones simbólicas e ideológicas: con todos esos elementos se condimentó el relato oficial, fuente del poder y los Derechos Humanos en la Argentina kirchnerista.
Varios ex militantes de las organizaciones terroristas de los ’60 y ’70, empezaron a hablar… a contar su verdad histórica, que contrasta con el “relato oficial” instalado por el poder de turno, quién ha cooptado el sentimiento que despiertan los Derechos Humanos en cualquier persona. Haciéndolo en beneficio propio desde el año 2003, desarrollando una política de un modelo de  negocios corruptos, que se cree dueño de la verdad y hasta del país. Entre ellos podemos citar a Pablo Giussani, Luis Labraña, Oscar del Barco, Martín Caparrós, Jorge Masetti, Héctor Leis, Federico Ramón Ibáñez, Elena Alfaro, etc.
Pero los errores de las Fuerzas Armadas no incluyen en absoluto la cifra imaginaria de 30.000 desaparecidos, ni un genocidio, ni terrorismo de Estado o plan sistemático de exterminio a muchachos altruistas. En su libro “Los Mitos Setentistas - Mentiras fundamentales sobre la década de los 70”, el joven investigador histórico cordobés Agustín Laje Arrigoni señala que, inspirada en los principios del propagandista nazi Joseph Goebbels, el marketing sesentista ha instalado conceptos, vocablos y banderas a los efectos de engañar, confundir y manipular a los argentinos. Desenmascara  las mentiras fundamentales sobre la década del 70,  las cuales no necesariamente fueron construidas sólo por partidarios del terrorismo por mera sed de venganza, sino también por notables  empresarios de los Derechos Humanos que han hecho del pasado un negocio de formidables dimensiones pecuniarias.
El día de ayer varios medios se hicieron eco de algunas denuncias o noticias que ponen en evidencia que se sigue usando la mentira para lucrar o al menos intentar lucrar con los Derechos Humanos: 
  • Hallan vivos a “fusilados” en la dictadura militar, noticia publicada en el Nuevo Diario Web de Santiago del Estero detalla el sorpresivo giro de una presentación efectuada por una mujer que se había presentado en un Juzgado Federal a denunciar que había sido secuestrada en 1980 y había visto fusilar a dos compañeros de estudios de la escuela secundaria. Todo mentira
Existen varios antecedentes de hechos similares, que han sido denunciados oportunamente ante los sordos oídos de la justicia, tales como:
  • 56 indemnizaciones a familiares de terroristas caídos en combate, Enrique Avogadro explica en el periódico digital El Informador Público, en una nota publicada el 21/10/2011, que a través de una investigación, se determinó que deudos de una serie de terroristas caídos en combate al intentar copar cuarteles militares fueron indemnizados por la Secretaría de Derechos Humanos. El número de indemnizaciones cobradas y denunciadas por Avogadro, el Dr. Oscar Vigliani de la prestigiosa Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia la eleva a sesenta y ocho personas que figuran como desaparecidas, cuyos causahabientes cobraron, por ese motivo, más de US$ 200.000  por cada uno, en realidad eran guerrilleros que participaron y fueron muertos en combate, La asociación mencionada efectúo la correspondiente denuncia ante la justicia y su presidente Dr. Alberto Solanet manifestó que ella es solamente la punta del iceberg, bajo el agua existe una enorme masa de corrupción inescrupulosa que lucra con el dolor ajeno. Más mentiras.
  • El escándalo –tapado y casi olvidado– pero cada vez mayor de la  Fundación de Madres de la  Plaza de Mayo y la construcción de viviendas del programa de $Sueños Compartidos$. Estafa.
Estamos hartos de tantas mentiras, discriminaciones y aberraciones jurídicas... señores jueces recuerden las declaraciones efectuadas el domingo 11 de abril de 2010 al diario La Nación por el propio presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional, Ricardo Recondo: "Los jueces no son independientes en la Argentina y serlo, tanto del poder político como del económico, como de sus propios prejuicios, es lo que le debe el Poder Judicial a la sociedad para que esta vuelva a confiar en las instituciones".
Hemos querido demostrar que la política de reparación de “derechos humanos” que lleva adelante el gobierno ya ni siquiera es una venganza, es una vulgar y asquerosa mentira que se cobra la vida de los Presos Políticos -doscientos dieciocho ya han muerto en condiciones de perverso abandono de persona en las cárceles- y la posibilidad de hacer negocios con los que algunos llenaron sus bolsillos, Hoy el gobierno y sus esbirros -jueces, fiscales, peritos, testigos falsos, médicos o simples militantes- están exterminando a los Soldados de la Patria que en los ’70 combatieron y vencieron al terrorismo.
Solo pedimos que se les garantice la igualdad ante la ley a todos los que están siendo juzgados por los mal citados delitos de lesa humanidad. No es admisible que la justicia sea tuerta y mire para un solo lado. Es hora de paz, concordia y justicia… la mayoría de la sociedad se ha dado cuenta de la mentira del relato oficial, desea terminar con estos temas del pasado y volcar todo su esfuerzo en una mirada hacia un futuro más optimista que el presente.
Sinceramente,
Pacificación Nacional Definitiva

por una Nueva Década en Paz y para Siempre