miércoles, 30 de abril de 2014

Rusia podría dejar de usar el dólar en contratos de exportación de petróleo y gas

Rusia podría dejar de usar el dólar en contratos de exportación de petróleo y gas

El gobierno y las empresas estatales rusos consideran posible el rechazo al dólar en contratos de exportación para evitar transacciones con redes bancarias occidentales.
Debido a las sanciones de EE.UU. y la UE, el gobierno ruso se está planteando usar como moneda el rublo en las transacciones de exportaciones rusas, las de petróleo y gas en particular.
Igor Shuválov, el primer viceprimer ministro del Gobierno de Rusia, convocó la reunión el 24 de abril para discutir las medidas del uso de rublo en operaciones de exportación. Como resultado se ha encargado al Ministerio del desarrollo economico y al de Finanzas que elaboren para el 14 de mayo un proyecto de aumento de los pagos por la exportación en rublos. A su vez el Banco de Rusia debe evaluar los riesgos de tal medida, informa el diario ruso ‘Kommersant’.
Además a la reunión asistieron los jefes de los departamentos financieros de Gazprom, Rosneft y otras empresas estatales rusas.
Según Alexéi Moiséev, un viceministro de Finanzas, “hay que aumentar el pago en rublos pero sin negarse totalmente a realizar cuentas en otras divisas. La pregunta es si nuestro sistema bancario está preparado para funcionar a nivel de exportación”.
Con respecto a este tema Yuri Trútnev, un viceprimer ministro y representante plenipotenciario del presidente de la Federación de Rusia en el Distrito Federal de Lejano Oriente, al finalizar el miércoles su visita a Corea del Norte, propuso realizar las cuentas mutuas de Rusia y Corea del Norte en rublos. Trútnev aseguró que “el uso del dólar y el euro está bloqueado y la colaboración económica con Corea del Norte no tendrá sentido si no funcionan transacciones bancarias”, informa Vzglyad.
Según kommersant.ru, la idea del aumento de pago en rublos es un tema actual pero después de la crisis surgió el problema de la devaluación del rublo y las empresas no quisieron cambiar sus redes interbancarias. Sin embargo, las recientes sanciones de Occidente han provocado que el proyecto de emplear un sistema bancario propio volviera a atraer partidarios.