domingo, 17 de julio de 2016

ANÁLISIS Y PANORAMA INTERNACIONAL SOBRE EL INTENTO DE GOLPE EN TURQUÍA

ANÁLISIS Y PANORAMA INTERNACIONAL SOBRE EL INTENTO DE GOLPE EN TURQUÍA


Turquía: ¿El golpe de Recep Tayyip Erd
En la madrugada del sábado, el Gobierno turco informó haber sofocado la sublevación, que se cobró al menos 265 vidas y dejó 1440 heridos.
Precisamente, Rusia normalizó las relaciones con Turquía después de que ese país pidiera perdón por el derribo a finales del pasado año de un caza ruso en la frontera con Siria, incidente en el que murieron dos soldados rusos.
El presidente ruso, Vladimir Putin, acusó a su colega turco, Recep Tayyip Erdogan, de apoyar al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), beneficiarse del comercio de petróleo con los terroristas y de invadir territorio sirio con el fin de derrocar al presidente sirio, Bashar al-Asad.


El intento de golpe de Estado en Turquía ha sorprendido y generado preocupación en el mundo por la posición estratégica del país y su rol tanto en el ascenso del terrorismo en Medio Oriente como en la actual crisis de refugiados.
Cuando todavía no la calma no se ha restablecido completamente tras el levantamiento protagonizado por una parte de las Fuerzas Armadas, que por varias horas de la noche del viernes parecía haber “tomado el poder”, las dudas sobre el rol del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, comenzaron a aparecer.

¿Quién está detrás del golpe?

En su primer mensaje en cadena nacional a su regreso a Estambul, Erdogan acusó a uno de sus principales enemigos: el clérigo moderado Fetollah Gülen y su “Estado paralelo” como impulsores del golpe. Sin embargo, varias horas antes de la denuncia presidencial, desde el movimiento de seguidores del religioso llamado Alliance for Shared Values se había emitido un comunicado en el que se condenaba categóricamente “cualquier intervención militar en los asuntos internos de Turquía”.
No es la primera vez que Erdogan señala a Gülen de querer derrocarlo. En 2014 fue su respuesta ante una serie de acusaciones de corrupción presentada por grupos allegados, que lo colocaron como uno de los mayores y más poderosos adversarios del régimen. Gülen, figura del diálogo interreligioso y en el pasado uno de los mayores aliados del mandatario, permanece en su hogar en Pensilvania en tanto han fracasado los intentos de extraditarlo a su país por supuestamente manejar un “grupo terrorista armado”. 


Concentración del poder

La aspiración de Erdogan para concentrar todo el poder en Turquía es tema conocido. Su objetivo es conseguir pasar del tradicional régimen parlamentario hacia uno presidencialista. Es lo que ha venido haciendo desde que abandonó su puesto como Primer Ministro y se convirtió en presidente en 2014.
Lo cierto es que no son pocos los analistas que coinciden en que el levantamiento militar, que por estas horas parece haber sido sofocado, podría dejar al presidente fortalecido e incluso en condiciones de convocar a un referéndum para modificar la Constitución y seguir concentrado poder en su persona.
Para la mayoría de los observadores experimentados está bien claro que este levantamiento militar se pareció muy poco a la eficacia de los anteriores. La cadena de mando se quebró rápidamente. Los soldados cedieron terreno prontamente a los manifestantes civiles. Sólo partes de las fuerzas armadas participaron, mientras que otros se rebelaron contra los rebeldes.
Un gran número de turcos ven con recelo los acontecimientos por la incompetencia del golpe mismo. Se dice que fue un golpe de estado organizado o provocado, fácilmente sofocado, con el fin de reforzar la candidatura de Erdogan para aumentar su predominio. Ahora puede invocar un estado de emergencia y establecer efectivamente el gobierno de un solo hombre, el suyo propio. Otros argumentan que con las comunicaciones del siglo 21 antiguos levantamientos militares simplemente no son viables contra las democracias incluso uno tan comprometido como la Turquía de Erdogan.

Las Fuerzas Armadas

Las dudas aparecen a su vez por el lado de “los golpistas”. Pese a que las Fuerzas Armadas poseen una larga historia de golpes militares -han derrocado a cuatro gobiernos desde la década del ’60-, se han lanzado a la intentona sin lograr absolutamente ningún apoyo, ni dentro ni fuera del país.
Mientras todos los bloques políticos presentes en el Parlamento rechazaban la intervención militar, los líderes mundiales -muchas veces críticos con el presidente Erdogan por las persecuciones a la prensa y la violación de derechos humanos- rechazaron abiertamente el golpe y llamaron a apoyar al gobierno “democráticamente electo”.
Esa falta de apoyos resultó determinante en la rápida resolución del episodio de la larga noche del viernes, incluso a pesar del gran despliegue militar que implicó en las dos principales ciudades del país: Estambul y Ankara.

Panorama internacional

Aunque en horas de la madrugada del sábado Erdogan ya aseguraba haber retomado el poder y evitado el golpe, la preocupación internacional por lo que suceda de aquí en más en el país persiste.
Es que Turquía se ha convertido en una pieza clave en el tablero internacional. El gobierno ha sido acusado de funcionar como la “puerta de acceso” a Europa al grupo terrorista ISIS provenientes de Irak y Siria, además de ser denunciado por proporcionar armas y recursos al grupo que impone el “terror” en la región y atemoriza al mundo con sangrientos ataques.
Más tarde el país se sumó a la coalición internacional que bombardea posiciones de ISIS en Siria, aunque los detractores de Erdogan aseguran que “el combate al terrorismo” ha servido como excusa para atacar a la minoría kurda.
Además, actualmente juega un destacado papel en la crisis de refugiados en Europa, luego de firmar un acuerdo con Bruselas para recibirlos a cambio de recursos millonarios. La hospitalidad turca ha sido cuestionada sin embargo por organizaciones de Derechos Humanos que aseguran que el país no garantiza las condiciones mínimas para las personas que viven en sus campos de refugiados.
Desde el aeropuerto de Atatürk, con actitud triunfante, Erdogan pronunció una frase que sugiere de qué modo intentará aprovechar lo sucedido, y que deja abiertos los interrogantes sobre la trágica jornada: “Este levantamiento es una bendición de Alá, porque nos permitirá identificar a nuestros enemigos”.
El primer ministro de Turquía, Binali Yildirum ha anunciado la detención de unos 1.800 militares, incluyendo 29 coroneles y cinco generales. Las autoridades han publicado una lista de los autores que fueron dirigidos por un general turco alauita (no relacionados con alawitas de Siria) que habían sido dados de baja con anterioridad y exonerados.

Conflicto sirio y yihadismo

El gobierno turco ha sido ambiguo respecto a la lucha contra el yihadismo en Siria. Ha pasado de la permisividad y la permeabilidad en sus fronteras, por donde han entrado muchos yihadistas extranjeros, a luchar contra los terroristas con artillería y dejar sus bases a la coalición liderada por Estados Unidos.
Erdogan pasó de ir de vacaciones con Bashar el Asad, el presidente sirio, a intentar derrocarlo a toda costa. Ello también ha llevado a Turquía a apoyar a varios grupos rebeldes en Siria, como han hecho Arabia Saudí y otras monarquías del Golfo.

Recuperando viejas amistades

Turquía, miembro de la OTAN, ha reanudado sus relaciones con Rusia tras una disculpa de Erdogan. Se vieron enturbiadas por el derribo de un caza en la frontera siria. También con Israel y Egipto se han relanzado los lazos, y Turquía reconstruirá algunas áreas de Palestina tras llegar a acuerdos con Tel Aviv.

Israel "respeta la democracia en Turquía" y espera que siga la reconciliación


Israel expresó hoy su respeto a la democracia en Turquía y confió en que continúe el proceso de reconciliación emprendido entre los dos países el mes pasado tras seis años de interrupción de las relaciones diplomáticas.
"Israel respeta el proceso democrático en Turquía y espera que continúe el proceso de reconciliación entre Turquía e Israel", reza un escueto comunicado emitido hoy por un portavoz del ministerio de Exteriores.
Se trata de la primera referencia oficial al intento de golpe de estado que se produjo el viernes por la noche en Turquía, que se ha saldado con 161 muertos y 2.839 militares detenidos, según informó hoy el primer ministro turco, el islamista Benali Yildirim.
Israel y Turquía, antaño aliados estratégicos, suspendieron sus lazos diplomáticos en mayo de 2010 después de que comandos israelíes acabaran con la vida de diez activistas turcos que navegaban hacia Gaza para desafiar el bloqueo impuesto por Israel.
Seis años después, los Gobiernos de ambos países anunciaron el mes pasado la reanudación de sus relaciones tras alcanzar un acuerdo que, entre otras cosas, incluyó el pago de compensaciones a las familias de las víctimas del asalto israelí.

Con información de Político.eu- Alerta Digital- Hispan TV- La Vanguardia