viernes, 26 de agosto de 2016

DEPRAVADA EDUCACIÓN SEXUAL DE LA JUVENTUD AUSPICIADA POR EL VATICANO DE FRANCISCO

DEPRAVADA EDUCACIÓN SEXUAL DE LA JUVENTUD AUSPICIADA POR EL VATICANO DE FRANCISCO


Depravada educación sexual de la juventud en el Programa del Vaticano 
Phillip Mericle

¿Hasta donde llega la tragedia en la violación de la inocencia de un niño y de la castidad de los jóvenes? Estas pérdidas, que constituyen escándalos terribles en sí mismos, también pueden allanar el camino para que los jóvenes caigan en la enfermedad mental y en el vicio. Sin embargo, a este mismo delito se le ha dado el visto bueno, nada menos que por los propios funcionarios del propio Vaticano.
En julio de 2016, coincidiendo con el lanzamiento de un programa para que se difundiera  en el Día Mundial de la Juventud de 2016 en Cracovia, el Consejo Pontificio para la Familia puso en marcha un sitio web titulado “Educación afectiva sexual para jóvenes” orientado a exponer a  los adolescentes los hechos de la vida tradicionalmente enseñados por los padres. Este proyecto, también llamado “Punto de Encuentro”, fue compuesta en el transcurso de varios años por parejas casadas en España con la colaboración de la Universidad Católica de San Antonio.

Una atmósfera permisiva con imágenes inmorales, es el mensaje equivocado a los jóvenes
Los materiales son gratuitos – en Inglés, español, italiano, francés y portugués – e incluyen textos para estudiantes de secundaria y profesores, libros de actividades y recomendaciones de películas. Presentándose como un medio para  “complementar o ayudar en la tarea de los padres,” este programa patrocinado por el Vaticano es en realidad un movimiento radical que pisotea la función protectora de los padres, situando a los instructores de educación sexual en o por encima del nivel del padre y sacerdote. 
Está dirigido a los estudiantes de las escuelas secundarias católicas (13-18 años) en todo el mundo. Las lecciones van a ser presentadas  en lclases mixtas de hombres y mujeres jóvenes, en cursos dados en años sucesivos, adaptados a la edad de los chicos, correspondientes a las enseñanzas impartidas. Dividido en seis unidades, el plan de estudios proporciona material destinado a ofrecer un nuevo tipo de educación sexual que tenga en cuenta el desarrollo de la moderna psicología, la pedagogía y la enseñanza.
Como el lector puede ver en las imágenes de esta página, el programa presenta sin condenarlas,  costumbres libres y ropa inmoral de la “cultura juvenil”, presentadas en ejercicios, hojas de cálculo, imágenes y proyección de películas (a menudo de una clasificación R) para que los estudiantes las discutan entre ellos.


Antes de examinar los aspectos deplorables del programa, cabe señalar que hay algunos elementos buenos en este plan de estudios: La breve condena de la fertilización in vitro, la santidad de la vida desde la concepción hasta la muerte y la inexistencia de “opciones” de género fuera de las de varón  / hembra son posiciones que se ven reforzadas en algunas lecciones. Sin embargo, esta parte buena corrompida  por una gran presencia del mal, hace que estos pocos puntos positivos no valgan para justificar la enorme cantidad de suciedad que impregna el conjunto del plan de estudios
 En cuestiones de moral, hacemos bien en aplicar el dicho tradicional de la Iglesia: Bonum ex integra causa, malum ex quocunque defectu (Una acción es buena cuando es buena en todos los sentidos, pero es mala cuando es mala en algún aspecto).
La “tienda” personal  y las imágenes inmorales
El aspecto más inmediato discordante del programa es el uso que hace de las imágenes . En las unidades y video introductorio titulado ” Su historia, sus palabras ,” presentado en el sitio web del Vaticano, nos encontramos con imágenes de grupos de jóvenes, hombres y mujeres, vestidos libremente, colaborando en la construcción de tiendas de campaña en el desierto. Todas las unidades llevan a cabo la construcción de la “tienda” como metáfora de las relaciones del edificio de la persona humana.
Sin embargo, de la película, en la que aparecen pequeñas tiendas de campaña , puede fácilmente deducirse que 

Los jóvenes vestidos inmodestamente y adoptando posturas inmorales,  levantan las tiendas de campaña,  – lo que es una aprobación iimplícita parar dormir juntos; abajo, lo que cualquiera llamaría imágenes inmorales
Llegado un momento se separa a los chicos de las chicas y se les pide que definan lo que significa para ellos el sexo, después de  el grupo de estudiantes de ambos sexos- todos vestidos  con pantalones cortísimos- irán  a dormir juntos. Una imagen incluso muestra a un chico del grupo tocando inmodestamente la parte superior de la pierna de su chica.  A lo largo del programa se recuerda varias veces a los estudiantes que sus cuerpos son metafóricamente  estas tiendas que están construyendo con los demás en su continua maduración, extraña metáfora que evita referirse a reglas morales claras y a las prescripciones de la enseñanza de las pasadas épocas.
La lección final termina preguntando sugerentemente a los estudiantes que decidan a quién quieren invitar a su tienda de campaña -. sin hacer distinciones acerca de si es el joven el que
  
invita  a la chica o viceversa, o si invita a una persona de su mismo sexo 
Este programa bombardea a los jóvenes con imágenes que sólo pueden ser definidas como pornográficas . Los estudiantes son presentados medio desnudos o totalmente desnudos abrazándose en intercambios sensuales llenos de pasión. Se advierte al maestro que éstas imágenes se ponen con el propósito de “provocar” reacciones entre los estudiantes que puedan llevarles a discutir sobre ellas.  
A los estudiantes en las clases mixtas se les asignan tareas absurdas, como el análisis de las diferencias entre imágenes de desnudos femeninos y masculinos. 
lo cual los dos grupos se reúnen de nuevo para compartir sus ideas con los demás. Por si esto fuera poco, también se pide a los estudiantes que señalen donde se asienta la sexualidad en los cuerpos de los chicos y chicas,
Siguiendo lo pasos del programa del Vaticano II, este programa de educación sexual redefine la terminología para adaptarse a sus extremos. El curso define una relación sexual como cualquier relación en la que la persona se “da” a sí mismo a la otra. Se considera que el único pecado – que es una palabra que, por cierto, casi nunca se menciona,  – es la falta de “entrega recíproca”  “en el contexto de la educación para el amor”. 
 
Una fotografía de una pareja de ancianos sonriendo el uno al otro se compara con una imagen de jóvenes generalmente desnudos entrelazados en un abrazo apasionado. Ambas parejas se tienen igualmente como estando en una “relación sexual”, sin hablar si la cohabitación es antes de estar unidos en matrimonio, o sin estarlo, 
Se presentan como modelos a personajes de películas censurables con imágenes de famosos abiertamente promiscuos (como Michael Jackson) y súper estrellas inmorales. Muchos de los clips de las películas que se utilizan son de películas con calificación R obtenidas por su contenido sexual explícito. 

Moral moderna, no hay moral 

Los padres preocupados por la formación de sus hijos deben saber, que  la moral que se enseña en este programa, en el mejor de los casos, está ausente. Se les anima a que queden entre ellos, sin ser novios, y a que den muestras de un cálido afecto, lo cual está bien, siempre y cuando las parejas estén verdaderamente “en el amor”.
Se condena el entrometerse en otras parejas para que decidan tener hijos o no.  Sin embargo, no se

¿Esta es la enseñanza de un amor “sano” o promueve la actividad sexual?
aconseja a los estudiantes juzgar a otras parejas que deciden no tener hijos, lo que significa una aprobación indirecta y práctica de la anticoncepción.
 Tal vez lo más impactante para un curso que pretende enseñar la moral, es no hacer mención de los Diez Mandamientos (ni siquiera el 6º o el 9º), el infierno, o la pecaminosidad depravada de las conductas desviadas como la homosexualidad. 
En cambio, se instruye a los profesores para que inviten  a los estudiantes a “descubrir” su heterosexualidad. Dese cuenta cómo esta instrucción confusa, en realidad favorece  la homosexualidad: 
La educación sexual, segün el programa, debe tener en cuenta “las diferentes etapas en la construcción de la personalidad en relación con la configuración de la “identidad sexual ” de él o de ella, o con el reconocimiento maduro de la propia sexualidad, con momentos que se diferencian según los sexos. ” 
Muy poco se dice directamente acerca de los peligros de la pornografía o de los pecados solitarios que corrompen la vida de muchos de los jóvenes de hoy. Tales vicios sólo se condenan porque conduce a la soledad, a la distorsión del sentido de lo humano y a la reducción del cuerpo a un objeto de placer. 
Dormir con alguien fuera del matrimonio solamente estaría mal, porque reduce la persona a una “cosa”. El castigo por el vicio no es el sufrimiento eterno en el infierno y la separación de Dios, sino más bien la falta de realización espiritual. La principal lección del programa, es el respeto por el cuerpo humano de sí mismo y de los demás, no las leyes de Dios o de la naturaleza. 
La preocupación y el enfoque de este plan de estudios está tan fuertemente orientado hacia el amor conyugal que al estado de virginidad consagrada se le da sólo una atención superficial, es de una importancia secundaria en comparación con la grandeza del “darse” a sí mismo a un miembro del sexo opuesto. 

Una charca filosófica sucia 

La cuestionable ideología presentada en este programa es una consecuencia del personalismo de Juan Pablo II,  tal como se halla en su “Teología del Cuerpo”.  Según esta filosofía, una persona sólo cumple con el propósito y el sentido de su existencia, cuando se hace un don para el otro. La realización última del hombre se da cuando se entrega libremente, en cuerpo y alma, a una mujer y viceversa. La humanidad sólo está completa a los ojos de Dios cuando ambos sexos están unidos físicamente en la “auto donación” del acto sexual.
En el sentimentalismo almibarado de este programa, el término “amor” se usa con tanta frecuencia que casi pierde su significado. Se adoctrina a los estudiantes acerca de que  el

imágenes provocativas inadecuadas  para la juventud ilustrar el abuso de la publicidad del sexo
propósito de su vida, está únicamente en “hacer el amor.” La virtud se define en términos generales como una  “estrategia para conseguir el amor” y el pecado se define como una “herida del amor.” Los males más grandes, de acuerdo con este programa, son los que se manifiestan en la falta de amor en las relaciones y en el “vivir mal el amor.” La modestia es la que nos permite descubrir la “belleza del amor.”

Conclusión 
El material que se ofrece en este programa de educación sexual del Vaticano es un bizcocho azucarado mezclado con una suciedad venenosa. A pesar de los aspectos positivos hallados de vez en cuando, el material pernicioso es tan atroz y tan penetrante que paraliza todo intento de justificación. 
El programa, en su conjunto es, por lo tanto, malo, y el hecho de que “podría ser peor”, no sirve de consuelo en comparación con el precio a pagar respecto de la castidad de los jóvenes.
Uno se pregunta cómo el arzobispo italiano Vicenzo Paglia, que puso en marcha el programa a finales del mes de julio, pudo “aprobarlo” sin darse cuenta de sus consecuencias.  Desde el enrevesado personalismo de Juan Pablo II hasta la presentación del material
  
pornográfico en clases mixtas de niños y niñas con fines de análisis y discusión, podría deducirse que este plan de estudios se ha formulado específicamente para corromper lo que queda de inocencia y pureza en la juventud católica moderna, todo ello en un intento de ponerse en consonancia con la filosofía progresista de la iglesia del post-Vaticano II.
Este es el programa de educación sexual respaldado por el Vaticano: parece un programa de estudio para los confesores para ayudar a depravados adictos al sexo. 

Publicado el 24 de agosto de 2016 por TIA

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