domingo, 15 de enero de 2017

EL CANALLA- Capítulo 8º-La revolución traicionada-Terrorismo de Estado Castro-Guevarista

Capítulo VIII
 La revolución traicionada
La foto de la revolución
  Terrorismo de Estado Castro-Guevarista
Las purgas contra disidentes

Como flamante comandante a cargo del campo de exterminio de La Cabana, el Che inauguró una maquinaria fusiladora como nunca antes se tuvo memoria en Cuba. Relata O'Donell que "En La Cabaña se establecieron los Tribunales Revolucionarios.., como comandante de la guarnición (el Che) revisaba las apelaciones y tenía la palabra final... Ese hombre a quien horrorizaban las defecciones humanas, implacable con las debilidades, codicias y vulgaridades de sí mismo y de los demás, que fue un incapacitado para los tejes y manejes de la política por razones éticas, no tuvo inconveniente en convertirse en un ángel exterminador que disponía sobre vidas y muertes ajenas".1 
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  Los "juicios" eran una verdadera parodia, no más que un mero protocolo para maquillar de legalidad masivas ejecuciones a disidentes: "los juicios contra los colaboradores (o no) del régimen batistíano duraban 5 o 10 minutos y se enviaba gente al paredón de fusilamientos" 2 y el Che era "el presidente del tribunal, fiscal, presidente de la comisión depuradora, del tribunal de apelación y comandante en jefe del cuartera Vale decir, la única garantía de vida del acusado era la buena o mala gana del mismísimo Guevara. El citado periodista Agustín Alies Soberón (quien entrevistó al Che reiteradas veces) recuerda que la máxima que hizo correr en La Cabaña fue: "Ante la duda, mata, y dale aspirina (balas)".* Recordemos que el Che ya no estaba en guerra, entorno donde esta consigna podría ser cruenta pero entendióle, sino que estamos hablando de detenidos sin juicio y sin ninguna certeza ni indicio de culpabilidad alguna pero "ante la duda", había orden de Guevara de fusilar y así lo decretó en La Cabaña a los fusiladores que estaban bajo su mando: "No demoren ¡as causas, esta es una revolución, no usen métodos legales burgueses, .. Hay que proceder por convicción... Yo los pondría a todos en el paredón y con una cincuenta ratatata... a todos" ¿ Esta manía por matar indiscriminadamente, es coherente con lo que el propio Guevara confesó textualmente en 1959, reconociendo que los fusilamientos debían llevarse a cabo sin garantías y sin juicio previo a las víctimas: "Tenemos que crear la pedagogía de los paredones del fusilamiento y no necesitamos pruebas para matar a un hombre". Efectivamente, el Che fue designado por Fidel Castro en el lugar en donde mejor podría cumplir su papel: el de un fusilador irrefrenable constituyéndose en un verdadero icono del terrorismo de estado. Esos y no otros eran los principios del mítico ídolo que los sedicentes defensores de los "derechos humanos" contemporáneos nos quieren hacer pasar por un justiciero que luchaba por la paz en el mundo. Estos y no otros eran los pensamientos y acciones del Che, felonías silenciadas o ignoradas por el grueso de la progresía mundial, la cual le reza a "San Guevara" como si este fuese un amuleto de la suerte, o mejor dicho, de la muerte.
Este acentuado rol de homicida en masa, le valió a Guevara el legítimo apodo de "el carnicero de La Cabana". Allí pudo hacer catarsis desplegando su confesado "odio a la civilización", su rol de "máquina de matar" y su talante de "anticristo". tal como rezan sus autodefiniciones anotadas en sus cartas y cuadernillos. El Che Guevara (probablemente el más temible criminal argentino del Siglo XX), al menos solía manifestar lo que pensaba y actuaba en consecuencia. Tanto es así que sólo en los primeros días "de trabajo", los fusilamientos dirigidos por el homenajeado justiciero alcanzaría la friolera e incipiente cifra de 550 disidentes masacrados J Guevara se radicalizó imitando del aventurerismo al ideologismo, de éste al dogmatismo, de allí al fanatismo, luego a la guerrilla y finalmente al terrorismo de estado. ¿Cuál era el parámetro guevariano para decidir quien vive y quien no? Es difícil responder el enigma con precisión de centavo, pero vale la pena recordar el sincero fragmento de una de sus epístolas: "mis amigos son amigos mientras piensen politicamente como yo". Quizás ahí tengamos alguna pauta sobre el basamento criteriológico al que el Che acudía para disponer sobre la vida de los cubanos.
En tanto, con su habitual indulgencia, el propagandista oficial del castro-guevarismo en los Estados Unidos, Herbert Matthews, desde las páginas del New York Times reconoce la existencia de seiscientos fusilados, pero justificando la cifra, agrega "No conozco ningún ejemplo de un inocente ejecutado". ¿Cómo sabe Matthews que no eran inocentes ios ejecutados si el Che confesó de manera expresa que fusilaba sin pruebas? Mario Lazo descree que el desembozado apoyo de Matthews al castro-guevarismo obedezca a una grave desinformación profesional, puesto que "Matthews, que por entonces tenía 57 años de edad, llevaba 35 en la plantilla del Tunes. Sus ideas, simpatías y prejuicios eran marcadamente liberales... Obstinado hasta la arrogancia, políticamente ingenuo y presunto experto en Hispanoamérica, se hallaba perfectamente condicionado para desempeñar el desastroso papel que habría de representar" 9 Vale aclarar que la etiqueta "liberal" que Lazo endilga a Matthews, no tiene el mismo significado político e ideológico con el que la identificamos en la Argentina. El "liberalismo", según los cánones norteamericanos, se halla compuesto por el dúigismo económico, la complacencia para con el marxismo y el progresismo cultural. En Argentina, en cambio, históricamente, un liberal es io más parecido al conservador republicano americano. 10
Retomando a los fusilamientos a disidentes, estos se tornaron cuantitativamente tan escandalosos, que el entonces presidente Umitia "intenta poner fin a eso expeditivos procedimientos. Castro hace oídos sordos... Hace incluso publicar un decreto que modifica sin más la Constitución de 1940, que excluía la pena de muerte..."11 Guevara por su parte, defiende el exterminio que él dirige alegando "La justicia revolucionaria es de verdad justicia... Cuando aplicamos la pena de muerte lo hacemos correctamente"12 Agrega Kalfon que Guevara "exige que todos los oficiales, incluso los que se desempeñan en cuestiones de intendencia, se turnen para encargarse de las ejecuciones, con el fin de impedir la profesionalización, hacer que la responsabilidad sea colectiva"13 Según testimonia el sacerdote Bustos Argañaraz (quien se encargaba de brindar alivio espiritual a las víctimas antes del fusilamiento) la crueldad del Che "llega hasta el punto de obligar a los familiares que iban a recoger los cadáveres de los fusilados a pasar por el famoso paredón manchado con la sangre fresca de las víctimas"14
No sin justificación, Guevara se valió de numerosos apodos colocados por quienes lo conocieron bien de cerca: "Carnicero de La Cabana", "sadoroasoquista", "ángel exterminador", metaforizaba Régis Debray o "asesino serial" acusaba el ex guevarista Osear del Blanco.15
La enfermiza cerrazón de Guevara alcanzaba tan elevada magnitud, que él mismo afirmó que los padres, mujeres, hijos y amigos sólo deben ser tenidos en cuenta en tanto y en cuanto se hallen en el marco de la revolución: "no hay vida fuera de ella" escribió y definió al revolucionario como "verdadero sacerdote" y "asceta" en su librito Guerra de guerrillas. Poco se diferenciaba el Che de un terrorista religioso, siempre dispuesto a matar y matarse para imponer su arbitraria y maniquea visión del mundo. Aunque con una diferencia que no es menor: el terrorista religioso sostiene que con la inmolación se pasa a ia vida eterna, en cambio, Guevara, profundamente ateo, creía que con la muerte se terminaba todo, ¿Para qué inmolarse entonces (tal como lo hizo en Bolivia)? ¿Cuál era el rédito de asesinar tanta gente en pos de una superslición ideológica de suyo falible y con la cual el sólo había profundizado algo recientemente?
Es dable agregar lo siguiente: Guevara se volvió hacia la política siendo ya adulto y tras recibirse de médico, pues durante sus épocas de estudiante no tuvo participación alguna y tan sólo había recibido una vaga influencia familiar de niño. Y de las tres grandes corrientes del pensamiento político moderno: la marxista, la nacionalista y la liberal (con sus respectivos derivados y matices), sólo leyó presurosamente a los de tendencia marxista, de modo que jamás pudo confrontar ni contrastar sus lecturas con autores opuestos. Vale decir, se fanatizó, fusil en mano, con lo primero que encontró y lo incorporó como dogma exterminador dando sentido a su infeliz existencia.
Probablemente, su conducta homicida al servicio de ideologías comunizantes haya sido una forma de descargar el terrible tormento espiritual que lo azotaba. Una verdadera válvula de escape para anestesiar su odio interior. Una suerte de "catarsis" ante tanto desorden del alma.
Las víctimas de los fusilamientos guevarianos se cuentan por varias centenas (más adelante veremos los números totales más aproximados) y los testimonios también. Algunos de estos últimos nos pueden ilustrar el modas operandi del Che para con los desdichados que osaban no pensar como él. Recuerda el ex miembro del "Movimiento 26 de julio" Napoleón Vilaboa (quien trabajó en la "Comisión depuradora" en la fortaleza de La Cabaña): "estuve trabajando en la fortaleza de La Cabaña a las órdenes del Che Guevara que era el jefe militar de esa fortaleza... La Comisión depuradora es un organismo que crea el gobierno de Fidel Castro... el fin era implantar el terror revolucionario en Cuba mediante los fusilamientos. Esos fusilamientos eran arbitrarios, porque los infelices que llevaban ahí ya estaban previamente sentenciados a muerte, como es el caso por ejemplo del primer teniente José Castaño que había sido jefe del Brac y que fue asesinado personalmente por el Che Guevara en su propia oficina. Y contra el cual no había ningún tipo de pretexto legal para fusilarlo, porque este señor ni había matado, ni había torturado a nadie durante el régimen de Fulgencio Batista"16. Recuerda Rolando Castaño, hijo del citado teniente asesinado: "Mí padre fue asesinado por Ernesto Guevara el 7 de marzo de 1959... Y él en su despacho primeramente lo interrogó, lo maltrataron físicamente, y como no se ponían de acuerdo, el Che Guevara dándole una vuelta a su oficina con su pistola le dio dos balazos en la cabeza"17. Otro testimonio escalofriante brindado también por Vilaboa se refiere a otro preso pero de 15 años: "Lo habían atrapado mientras pintaba una pared con consignas contra Fidel. El ex asesor del Che recuerda que el comandante estaba muy preocupado porque la madre del menor seveía desesperada y asegura que cuando un soldado se acercó a informarle que el joven iba a ser fusilado en unos días, Guevara le ordenó que lo hiciera de inmediato para que la madre no pase por la angustia de una espera larga".18
La ligereza de los "juicios" era tal, que José Vilasuso, abogado que trabajó a partir de enero de 1959 bajo las ordenes del Che como instructor de expedientes de la "Comisión depuradora" en La Cabaña, explica cómo funcionaba el plan sistemático de exterminio a disidentes: "El Che tenía solamente una divisa: ustedes están aquí para pasar los expedientes rápidos, la comisión está trabajando muy lentamente y tenemos que juzgar a estos criminales lo más rápido posible ...me dice mira, este es un tribunal muy sencillo, todo lo que tienen que hacer es instruir los expedientes, el oficial investigador siempre tiene la razón, siempre dice la verdad. O sea no tenemos más que aceptar, acogernos a lo que él dice en el informe. Y tú tienes que instruir, organizar los expedientes y después los pasas al ministerio fiscal'... esas fueron más o menos sus palabras. Y me dice desde luego que vas a ver cosas muy sabrosas. Guardé silencio y al día siguiente comencé a trabajar... Yo preparando las sentencias y él pues, dirigiendo el paredón. Fui al paredón, me acerqué al lugar, me paré junto a los postes, me fijé bien el lugar donde se situaban a los reos, el paredón estaba a las espaldas, y más o menos lo que era la altura del pecho o la cabeza pues se veían los impactos de las balas. Era más o menos una línea recta. La sangre coagulada, porque se sacaba el cuerpo inmediatamente después de la ejecución pero la sangre quedaba. Ahí estuve mucho rato, imaginando qué es lo que es un hombre parado contra un poste y seis hombres que no lo conocen, a quienes nada le hizo...".19 Para más datos acerca de las "garantías" de los ejecutados, explica Eduardo Pérez (primer teniente del Ejército Rebelde) quien estuvo bajo las órdenes del Che "Estoy en el despacho del jefe de regimiento de Santa Clara, que era Ramiro. Pero Ramiro no estaba ahí... el que estaba era Olo Pantoja con quien tenia buena relación... entonces entra un soldado y le da un papel y le dice esos de las crucecitas son los que van afusilarse mañana y yo voy y me pongo detrás de él porque había amistad, y le digo ¿a esa gente ya la juzgaron? y me dice no a esa gente la van a juzgar esta noche. Pero cómo los van a juzgar si ya saben que los van a fusilar mañana?, bueno, eso es así".
Otro testimonio turbador, nos lo brinda Sergio García Muftiz, hermano de Rafael García, fusilado por el sacrosanto Che Guevara: "En las gestiones que estábamos haciendo para tratar de salvar a mi hermano, antes del juicio final, yo había ido a La Cabaña con el ingeniero Viamonte que trabajaba conmigo en la compañía de electricidad, a ver a Ernesto Guevara ya que él había estado alzado en la Sierra. Entonces Guevara nos recibió... sin zapatos, con las patas arriba del escritorio, rascándose los chicotes... A mí me causó muy mala impresión. Vi la cara de hipócrita, de sinvergüenza que tenía, entonces el ingeniero le empezó a explicar y él le dijo no, aquí no hay toalla para nadie "?"21
Amo y señor en su campo de concentración, sí el Che quería perdonar la vida de alguien por algún atenuante de amiguismo o cualquier elemento subjetivo, va de suyo que también lo hacía. Tal el caso de Roberto Martín Pérez, que en la infancia había sido amigo de Aleida March (la segunda esposa de Guevara) y quien nos cuenta: "Estando yo preso desde hacía unos quince días en La Cabaña, me llaman por los altavoces del penal a la oficina. Me encuentro ahí con Aleida March y con Ernesto Guevara. Ernesto Guevara caminando por todo aquel pasillo con las manos en la espalda y yo sentado con Aleida March. Y de buenas a primeras ese individuo se me para enfrente y me dice a ti hay que fusilarte. Yo tenía antecedentes de que en muchas ocasiones Ernesto Guevara había sacado hombres presos y los había fusilado sin un previo juicio. Así que no me extrañó nada esta bravuconada" 22 Finalmente, habiendo sido Roberto Pérez amigo de su esposa, Guevara, en gesto de reflexión y ternura dimitió de la decisión de asesinarlo, privilegiándolo con una "condena" a 28 años de cárcel.
Agrega Díaz Araujo que Guevara "lo mismo le metía un tiro a un barbudo rebeldón que a un campesino traidor... La simple sospecha, como durante el régimen jacobino de Robespierre, bastó para perder la vida... fueron el Che, junto con Raúl Castro y otros extremistas, los que ordenaron la sangrienta purga... Por si fuera poco, los juicios eran espectáculos públicos; recordaban a los antiguos circos romanos; les faltó incluso el aspecto de tribunal que tuvieron los juicios de Moscú de los años treinta. El más espectacular de ellos fue el del mayor Jesús Sosa Blanco, que fue juzgado en el lujosísimo Palacio de los Deportes construido por Batista, ante una chusma de 17.000 personas. Llegaron a tanto, que una testigo presencial de esos asesinatos, la periodista norteamericana Han Phillips, fiel partidaria de Castro hasta ese momento, escribió: "Todo procedimiento daba asco"..23
Sin embargo, Guevara defendía metódicamente su depuración en conferencias de prensa (tal la brindada el 27 de enero de 1959 en la sociedad Nuestro Tiempo) en donde textualmente argumentó: "esta liquidación no se hace por venganza ni sólo por espíritu de justicia, sino por necesidad de asegurar que todas esas conquistas del pueblo puedan lograrse en un plazo mínimo".24
 Las purgas contra coincidentes
Las purgas no terminan con ios disidentes. Aunque parezca un contrasentido (y este es otro de los elementos "impuros" y por ende silenciados por la historieta castrista), muchos ex batístianos se sumaron a las nuevas autoridades y a contrario sensu, muchos miembros del Ejército Rebelde, ante el sorpresivo y jamás anunciado giro comunista del nuevo gobierno que ellos ayudaron a crear, comenzaron a tomar distancia y por esta razón fueron agujerados por las balas o en el mejor de los casos encarcelados por décadas.
Con sólo repasar a los castro-guevaristas más conspicuos de la primera hora que cayeron en desgracia precisamante por orden del castro-guevarismo, encontramos en orden cronológico los siguientes episodios: "renuncia de José Miró Cardona (13-11-1959) a la presidencia del Consejo de ministros (reemplazado por Fidel Castro); 17 de mayo, el ministro de Agricultura, Humberto Sorí Marín, autor de la ley de Reforma Agraria promulgada por Castro en la Sierra Maestra, renuncia... y fue al paredón en marzo de 1961 por anticomunista; 30 de junio, dimisión y huida del mayor Pedro Díaz Lanz, jefe de la Fuerza Aérea Cubana (reemplazado por J. Almeida); 17 de Julio, el presidente Manuel Urrútia Meó, que había denunciado el peligro comunista es obligado a renunciar y se refugia en la embajada de Venezuela (reemplazado por el antiguo secretario del ministro de Batista, jefe del PC, Juan Martinello, el Dr. Osvaldo Dorticós Torrado); Hubert Matos, comandante de la columna del 26 de Julio que tomó la provincia de Santiago, dimite en octubre por no aceptar la influencia comunista en el Ejército Rebelde y permanece encarcelado. Al mismo tiempo, el 28 de octubre desaparece el avión que conducía Camilo Cienfuegos, sin que nunca se encuentren sus restos. En noviembre... son eliminados los líderes antíbatistianos José Pellón, Octavio Louit y Reinal González. El secretario general, David Salvador, permanece en el cargo hasta el 5 de abril de 1960 en que es detenido y permanece encarcelado ...El 26 de noviembre se sustituye a Felipe Pazos en la presidencia del Banco Nacional de Cuba por el Che Guevara. 11 de marzo de 1961, el comandante William A. Morgan, que había dirigido la expedición castrista contra Santo Domingo... es ejecutado en La Cabaña, porque soy -dice en su carta de despedida- el último anticomunista con el grado de comandante del Ejército Rebelde"25 Sólo ese año (1961), las ejecuciones de "ex amigos" alcanzarían la cifra de 995. 26
Como ironía, nos encontramos con que una enorme cantidad de hombres que acompañaron arriesgando sus vidas a Fidel Castro y al Che Guevara en la aventura que los llevó a tomar el poder absoluto, fueron luego asesinados y/o encarcelados, mientras que, paradojalmente, colocaron en lugares importantes como funcionarios de la nueva tiranía a muchos de los enemigos de ayer, quienes tras la revolución adulaban y halagan a los hombres de la nueva conducción para gozar de algunas migajas de un poder que ellos no ayudaron a conquistar.
Pero el exterminio de guerrilleros del Ejército Rebelde no se produjo sólo al distandamiento tras advertir la estafa comunista de sus antiguos jefes, sino que el patrón utilizado por Guevara para asesinar a sus ex compañeros de lucha, también obedeció a la relación mantenida con ellos durante las andanzas guerrilleras. Es decir, con aquellos fumaradas det Ejército Rebelde con los cuales el Che había tenido algún roce verbal (algo absolutamente normal en medio de tanta tensión y la convivencia prolongada en los campamentos guerrilleros), Guevara en modo alguno olvidaba aquellos episodios que, aunque fueran domésticos, osaron disentir con él (aun teniendo el mismo rango militar que él). Ergo, el Che mandó a fusilar muchos de los guerrilleros que pelearon junto a él, pero eventualmente pudieron haber tenido diferencias de criterios. El caso más emblemático al respecto es el fusilamiento ordenado por el Che del comandan¬te rebelde Jesús Carreras. Cuenta el capitán del Ejército Rebelde Elias Nazario que en el fragor de la lucha por la revolución, en la provincia de las Villas se produjo una diferencia de razonamientos entre Guevara y el comandante Jesús Carreras: "al entrar el Che Guevara a la provincia de Las Villas nos encontramos con él allá, que estaba acampado con el Directorio Revolucionario con el comandante Cúbelas, ..él y el comandante tuvieron una buena discusión por la zona que se estaban disputando. ..Y la discusión fue fuerte... porque Jesús Carreras, le dijo tu zona es la tuya y la mía es la mía, y si brincas a mi zona vamos a tener problemas. Guevara nunca le contestó, agachó su cabeza..."27 La venganza no se hizo esperar, y Jesús Carreras, una vez producida la revolución y estando Guevara al frente de La Cabaña lo hizo fusilar.
En resumidas cuentas, la nueva oligarquía gobernante en Cuba quedó reducida a la pandilla conformada por Fidel, Raúl y el Che, secundados por arribistas de turno (mayormente ex batistianos) y los viejos líderes comunistas (del PSP) que no sólo no lucharon contra Batista, sino que lo llevaron en su boleta en las elecciones de 1940 ocupando secretarías y ministerios del demonizado gobierno depuesto.
A modo de muestra de lo afirmado más arriba, basta con mencionar que absolutamente todos los guerrilleros que se jugaron la vida viajando en el Granma apoyando a Castro y que lograron quedar en pie tras el combate inmediatamente posterior al desembarco (en el cual murieron 70 guerrilleros y sólo 12 sobrevivieron), de esa docena, descontando a Raúl, el Che, el domesticado Juan Almeida y obviamente Fidel, los ocho restantes fueron galardonados con los siguientes premios:
 "Chañes Mario. Guarda prisión desde 1965.
Díaz Torres, Raúl. Comandante del Ejército Revolucionario. Se asiló en la embajada de Ecuador en La Habana en marzo de 1962.
Gómez Calzadilla, Jesús. Comandante del Ejército Revolucionario. Se asiló en octubre de 1963.
Gómez Hernández, César. Subsecretario del Trabajo en el Gobierno Revolucionario. Se asiló en la embajada de Venezuela en La Habana en 1961.
Rodríguez Moya, Armando. Se asiló cuando se hallaba en México en una misión oficial.
Sánches Amaya, Fernando. Funcionario del ministerio del Trabajo del Gobierno Revolucionario. Delegado en 1959 a la Conferencia Internacional de la OIT. Guarda prisión desde fines de 1959.
Santaya Reyes, Rolando. Encargado de negocios del Gobierno Revolucionario en Varsovia en 1960 y en Montevideo en 1963. Se asiló en 1963".
Como vemos, en ese listado son siete y por ende nos falta uno. Claro, nos olvidábamos del sobreviviente del Granma Camilo Cienfuegos, asesinado por el castrismo en 1959 tras arrestar a Huber Matos.
Rezando a San Carlos
Los regímenes autoritarios se diferencian de los totalitarios (entre otras cosas) en que aquellos buscan de la comunidad la obediencia, mientras que estos últimos, además de la obediencia buscan de la masa su adhesión. Guevara manejaba el campo de exterminio de La Cabaña para reducir la cantidad de disidentes. Pero esta matanza no acabaría nunca si no se atacaba de lleno a la idiosincrasia cubana, cuya tradición cristiana y occidental estaba en las antípodas del marxismo que él y Castro pretendían imponer. Además, dentro de la civilización occidental, Cuba no era un país más. Su religiosidad estaba mucho más enraizada que en el grueso de los países de América Latina.
La fe católica o la adherencia a otras religiones de inspiración cristiana se constituían, según advertía Guevara, en obstáculos graves para poder fabricar su famoso "Hombre Nuevo". Los usos, costumbres y hábitos espirituales tan comunes en la isla, se tornaban insoportables para un hombre como el Che Guevara, quien creía que toda la energía del cubano medio debería estar direccionada a idolatrar a "San Carlos Marx", tal como él denominaba en sus cartas a su patriarca doctrinal.
Este grave problema, el de tener que domar a una sociedad cristiana e imponer dogmas antagónicos, ya había sido advertido por el propio Fidel a
Guevara el 8 de enero de 1959: "Créelo o no, el pueblo cubano es religioso. Ésta es una fuerza que no podemos destruir en veinticuatro horas".&
Pero la implacable persecución religiosa en ciernes no sólo obedeció a que los principios cristianos, por definición están en las antípodas del comunismo, sino a que la comunidad cristiana comenzaba a reaccionar ante el peligroso giro del régimen. Tanto es así que "El 9 de noviembre de aquel 1959 la Iglesia católica consigue reunir un millón de personas en La Habana -¡el equivalente a la población de la ciudad!- para pedir respeto a las libertades y a la propiedad".30  Asimismo, e! 7 de agosto de 1960, con la firma de todo el Episcopado se denunciaba "el creciente avance del comunismo en nuestra nación".31
En octubre de de ese año, señala Kalfon que "El régimen ha prohibido ya las procesiones y el uso de los campanarios de las iglesias. Meses más tarde, el periódico católico La Quincena es clausurado, las escuelas y universidades católicas nacionalizadas, y un centenar de sacerdotes expulsados".32  El 4 de diciembre se dio a conocer una "Carta Abierta del Episcopado Cubano al Primer Ministro Dr. Fidel Castro" la cual denunciaba que "El mismo día que fue publicada (la Circular Colectiva), se detuvo a varios sacerdotes, por el delito de haberle dado lectura en las iglesias, y se amenazó a otros con represalias populares si se atrevían a leerla... Han sido clausuradas casi todas las horas católicas de radio y televisión. ..Se ha injuriado y calumniado a los obispos y a prestigiosas instituciones católicas por medio de los periódicos y de las estaciones de radio, hoy casi totalmente bajo el control del gobierno, y al mismo tiempo se ha impedido la publicación o difusión de los documentos que en defensa de la Iglesia han suscrito las organizaciones seglares católicas"33    El conflicto levantaba temperatura a tal punto, que Carlos Franqui comenta que ya en 1961 "Fidel Castro expulsó de Cuba a la casi totalidad de los sacerdotes católicos, monjas, cerró la Universidad Católica y los colegios religiosos y la mayoría de las iglesias".34  Jean-Pierre Clerc, por su parte anota que en "Las visas de estadía de numerosos religiosos extranjeros no han sido renovadas en los últimos meses. El 12 de mayo, ciento treinta y uno serán expulsados; otros ciento cuarenta y siete, entre ellos el auxiliar monseñor Boza Masvidal, lo serán el 17 de septiembre... Cerca de seiscientos eclesiásticos sobre un total de ochocientos, dejaran la isla".35    Ya por 1970, señala Lazo que "La Universidad Católica de Santo Tomás de Villanueva, en Marianao, ha sido cerrada durante nueve años y actualmente se usa como almacén. La gran capilla del Colegio de Belén se emplea para actividades seculares, funcionando ocasionalmente como cabaret. .. Antes de Castro había en Cuba 1.000 sacerdotes y 2.700 monjas. Ahora hay menos de 125 sacerdotes y unas 100 monjas" 36
 La persecución religiosa del régimen fue coherente con la tradición castro-guevarista consistente en castigar á quienes los ayudaron a tomar el poder en 1959 (cuando nadie sospechaba que la dupla escondía un plan comunista). Recuerda Huber Matos que durante la lucha contra Batista, los sacerdotes eran "muy atentos con todos y, de manera especial, afectuosos con Fidel" 37   A punto tal, que el propio Castro reconoció que "Los católicos de Cuba han prestado la cooperación más decidida a la causa de la libertad".38  El historiador Thomas Hugs añade que "Los sacerdotes hacían de tesoreros del Movimiento 26 de Julio... Muchos hombres de Iglesia reaccionaron entusiastamente ante el triunfo de Castro".39   Efectivamente, la Iglesia no sospechaba que el líder rebelde, educado desde niño por los Padres Jesuítas y de cuyo cuello indefectiblemente colgaba una cadena con la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre (Patraña de Cuba), fuera marxista y ateo y que una vez en el poder, llevaría adelante una feroz represión religiosa fusilando católicos a raudales.
A partir de entonces, dentro de las masivas purgas a disidentes, el sector al que se impartiría mayor crueldad serían los católicos, quienes diariamente eran fusilados por su condición de tales. El desdichado comandante del Ejército Rebelde Huber Matos, durante sus interminables jornadas detenido en los campos de concentración recuerda: "Casi todas las noches, entre las nueve y las diez, nos toca vivir una experiencia difícil; es la hora de los fusilamientos... Es la mejor gente de nuestro país... En la lucha contra Batista nunca tuvimos tanta gente así... No podemos ver los fusilamientos desde nuestros calabozos, pero seguimos momento a momento el macabro ritual, a partir de los sonidos que lo acompañan. La cercanía nos obliga a escuchar las órdenes, los intentos que hacen los presos por decir algo, la descarga de los fusiles, el ruido de los cuerpos cuando los tiran sobre una gran bandeja de lata. Los envuelven en una bolsa plástica para que la sangre no se riegue en el camino y los meten en un carro, como si fueran mercancía... Fusilan a jóvenes cristianos que en el paredón antes de la descarga de los fusiles, gritan: ¡Viva Cristo Rey.40  Este testimonio es ratificado por el afamado poeta Armando Valladares (quien cumplió 22 años de prisión, 8 de los cuales estuvo en silla de ruedas con motivo de su ausencia total de asistencia médica) al narrar que cuando estuvo detenido en La Cabaña en 1961 "Todas las noches había fusilamientos. Los gritos de los patriotas de "Viva Cristo Rey!", "Abajo el comunismo" estremecían los fosos centenarios de aquella fortaleza,..41   y agrega: "Ya en 1963 los condenados a muerte bajaban al paredón amordazados. Los carceleros temían a esos gritos. No toleraban en los que iban a morir ni siquiera una última exclamación viril".42 Otro testimonio similar agrega que "La descarga mortal y el tiro o los tiros de gracia eran como un alivio para todos, posiblemente también para el condenado. Los gritos de 'Viva Cuba Libre' y "Viva Cristo Rey', que durante un tiempo pudieron gritar los condenados (a partir de 1963 los amordazaban) soltaban la tensión colectiva.,. ".43
Las purgas religiosas duraron varios años y finalizando los años 60 "a los niños se los coaccionaba para que no fueran católicos; los jóvenes creyentes no podían acceder ni a la universidad: se cerraban iglesias; los sacerdotes eran expulsadas del país, se habilitaban campos de concentración donde eran encerrados sacerdotes y laicos de Acción Católica juntos con drogadictos y homosexuales".44
El Hombre Nuevo guevarista: subterfugio de totalitarismo
Como vimos, si bien una de las obsesiones del régimen era acallar, tanto sea por medio del encarcelamiento o del fusilamiento toda manifestación escrita u oral que no fuera complaciente para con éste, también sabían los comandantes de que las balas y las torturas eran instrumentos necesarios pero no suficientes para disciplinar a la desdichada comunidad cubana. Se tornaba imprescindible llevar adelante una profusa tarea de lavado de cerebro vía estatal, a efectos de domesticar y amansar psicológicamente a los cubanos por medio de la persuasión propagandística con el consiguiente bombardeo de consignas y apotegmas.
 Una de las alternativas previstas para alcanzar tal homogeneidad, era estructurar ese gran mazazo unifícador graciosamente llamado "Partido Único" y de esta forma aplastar de cuajo cualquier pensamiento alternativo. Ya Guevara había advertido que el "Partido Único" se impondrá cuando "las masas hayan alcanzado el nivel de desarrollo de la vanguardia es decir cuando estén educados para el comunismo" 45
Es por ello que a modo de antesala, se crearon en 1961 las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORÍ) y seguidamente se impuso el "Partido Único" en la Constitución Nacional de Cuba. Vale decir que, como es propio en los regímenes totalitarios, se oficializó la fusión del partido con el estado y cualquier creación de un partido político distinto resulta inconstitucional e ilegal. Vale aclarar que la pena por tamaña herejía (la de incurrir en el disenso) prevé actualmente una sanción mínima de 20 años de cárcel. En conversación personal en La Habana con Laura Poyan Toledo, la presidente de Damas de Blanco (organización de esposas de presos cubanos por cometer el delito de opinión) relató que su esposo Héctor Maseda, ya llevaba en el año 2006 cinco años de prisión (sobre una condena de 20) en condiciones inhumanas por haber cometido el delito penal de fundar un partido político (el Partido Liberal de Cuba).46   Indudablemente una atroz medida, máxime teniendo en cuenta que los partidos políticos, en Cuba no cumplen ninguna función electoral, sino que, en la hipótesis de máxima solo pueden hacer las veces de ateneo o foro de ideas, puesto que las elecciones están prohibidas y el último comicio presidencial de que se tenga memoria en Cuba lo celebró Batista en noviembre de 1958 (hace más de medio siglo).
Combinando la propaganda por un lado y el terror represivo por el otro, Guevara pensaba que aplicando sendos mecanismos a modo de tenazas sostenidamente en el tiempo, iba a poder lograr un perfecto contralor y disciplinamiento social que, a la postre iría transformando la naturaleza humana y por fin fabricar, cual Dr. Frankestein. esa alucinógena criatura que Guevara llamaba el "Hombre Nuevo". El combinado funcionaría de esta manera: al aplicar medidas represivas brutales se iría forjando un temperamento sumiso en la población. Como remate, se le sumaría el bombardeo doctrina) para la imposición masiva de una estructura mental uniforme. Si bien el emprendimiento parecía por demás difícil, el Che lo daba por descontado puesto que su fe en la superstición marxista era tan intensa, que en 1960 publicó "Notas para el Estudio de la Ideología de la Revolución Cubana ", en cuyos fragmentos además de precisar detalladamente el modo a través del cual se instituirían los mecanismos totalitarios, se pueden apreciar afirmaciones disparatadas que comparan al marxismo con las ciencias físicas: "Cuando se nos pregunta si somos marxistas o no, nuestra posición es la que tendría un físico al que se le preguntara si es newtoniano, o a un biólogo si es pasteuriana. Hay verdades tan evidentes, tan incorporadas al conocimiento de los pueblos, que ya es inútil discutirlas. Se debe ser marxista con la misma naturalidad con que se es newtoniano en física, o pasteuriano en biología, considerando que si nuevos hechos determinan nuevos conceptos, no se quitará nunca su parte de verdad a aquellos otros que hayan pasado. Tal es el caso, por ejemplo, de la relatividad einsteniana o de la teoría de los quanta de Plank... Nosotros, revolucionarios prácticos, iniciando nuestra lucha, simplemente cumplíamos leyes previstas por Marx el científico y... al tener como base de nuestra lucha la felicidad de ese pueblo, estamos simplemente ajusfándonos a las predicciones del científico Marx... las leyes del marxismo están presentes en los acontecimientos de la Revolución Cubana, independientemente de que sus líderes profesen o conozcan cabalmente, desde un punto de vista teórico, esas leyes".47  Analizando estos y otros dislates, con acierto Díaz Araujo sostiene que el Che "creía, literalmente en las bondades de la 'ciencia' marxista y por eso fue de traspiés en traspiés... decía que una revolución se puede hacer aun sin conocer la teoría marxista; pero 'es claro -añadía- que el conocimiento adecuado de ésta simplifica la tarea e impide caer en peligrosos errores, siempre que esa teoría enunciada corresponda a la verdad.' ¿Ahí estaba el problema!  Siempre que corresponda a la verdad!'... Como esto era algo que él daba por sentado, por haberlo aprendido de su madre, y por haberse movido toda su vida dentro de la órbita intelectual del marxismo, no se le ocurrió nunca pensar que esa teoría podía no corresponderse con la realidad. Por eso confió en los rusos, en los chinos, en los africanos, en Castro... Por eso creyó que los campesinos bolivianos se iban a plegar a su empresa al primer llamado. Por olvidarse de la naturaleza humana, por querer ver las cosas a través del deformado prisma del marxismo, las cosas se vengaron de él y, como decía Pascal, le saltaron al cuello".48  Lapidario y a la vez certero el juicio de Díaz Araujo, quien remata sosteniendo que el Che "no era, en manera alguna, un gran pensador; era sólo un lector apurado por hacer realidad sus teorías. Pero, como es sabido, ése es un problema del marxismo. A partir de la Tesis XI sobre Feuerbach de Marx, todos los marxistas que se sienten filósofos quieren transformar al mundo. Y, normalmente, no tienen tiempo ni para filosofar ni para transformar nada. Pero, y esto es más grave, se quedan siempre con la obsesión por teorizar todos sus actos y, viceversa, por llevar a la práctica sus semielaborados pensamientos.. .".49   En el mismo sentido, señala Juan José Sebreli (hombre sólidamente formado en el marxismo) que Guevara no sólo no conocía en profundidad el pensamiento de Marx sino que en vida hizo todo lo contrario: "fue lo opuesto al pensamiento de Marx y del socialismo clásico: sustituía la autoemancipación por la vanguardia iluminada y el jefe carismático, la movilización de masas por el foco, la democracia social por la dictadura política, el partido por la guerrilla, la lucha de clases por la lucha entre naciones ricas y pobres, la clase trabajadora por el campesinado, las condiciones objetivas por el voluntarismo, el socialismo, sólo posible en las sociedades avanzadas, por el de los pueblos más pobres".50
Aquí nos vemos obligados a efectuar una aclaración respecto a la última afirmación de Sebreli. El socialismo, en cuanto ideología intrínsecamente perversa (tanto sea en el plano teórico como en el práctico -sus resultados empíricos nos eximen de abundar en comentarios-), no resulta provechoso ni en países avanzados (tal como sugiere Sebreli) ni mucho menos en los subdesarrollados. En todo caso, aquellos países que tienen gobiernos nominalmente llamados "socialistas" (tal el caso de España o Chile por ejemplo), en materia económica hoy aceptan el mercado, la propiedad privada y la libre iniciativa. De modo que si sus gestiones no fracasan, no es porque en países desarrollados el socialismo "sirva", sino precisamente porque estas administraciones tiraron a la basura sus inútiles recetas de estatización y adoptaron el capitalismo como forma de organización social. En todo caso, la diferencia de estos partidos con los partidos conservadores o de derecha, radica en que el socialismo meramente nominal, al resignar sus teorías primigenias, copió de la derecha la organización económica, aunque en el plano cultural haya adoptado un libreto progresista (promotor de la transgresión, de la sexualidad desde la "perspectiva del género", el crimen del aborto, la despenalización de la venta y consumo de drogas, etc.). Vale decir: el llamado socialismo de los países desarrollados es capitalista en lo económico y antiguevarista en lo cultural. Eso sí, en sus actos partidarios, la banderita del Che es agitada y flameada inefablemente como estandarte, para ganar la simpatía electoral tanto sea de la juventud desinformada como de los comunistas nostálgicos.
Pero al margen de estos últimos comentarios, prosigamos analizando estos apuntes de Guevara, en las que pergreñó las instituciones y mecanismos totalitarios que oficiarían de maquinarias constructoras del alucinado "hombre nuevo". Pues anota Guevara en el citado cuadernillo que el cubano común, de ahora en adelante tenía que dejar de ser un ciudadano con vida propia y pasar a transformarse en una simple marioneta estatal: "En nuestro caso, la educación directa adquiere una importancia mucho mayor. La explicación es convincente porque es verdadera" (nótese el fundamentalismo) y agrega "no precisa subterfugios. Se ejerce a través del aparato educativo del estado... La educación prende en las masas y la nueva actitud preconizada tiende a convertirse en hábito; la masa la va haciendo suya y presiona a quienes no se han educado todavía. Esta es la forma indirecta de educar a las masas, tan poderosa como aquella otra... el individuo recibe continuamente el impacto del nuevo poder social y percibe que no está completamente adecuado a él. Bajo el influjo de la presión que supone la educación indirecta, trata de acomodarse a una situación. .. se autoeduca. En este período de construcción del socialismo podemos ver el hombre nuevo que va naciendo". Prosigue Guevara sentenciando que a partir de ahora los hombres "Ya no marchan completamente solos por veredas extraviadas" (es decir, por veredas no sometidas a la voluntad guevarista) "... Siguen a su vanguardia, constituida por el Partido... El grupo de vanguardia (los conductores del proceso de ideolagización) es ideológicamente más avanzado que la masa; ésta conoce los valores nuevos, pero insuficientemente: Mientras en los primeros se produce un cambio cualitativo...; los segundos sólo ven a medias y deben ser sometidos a estímulos y presiones de cierta intensidad; es la dictadura del proletariado ejerciéndose no sólo sobre la clase derrotada sino también, individualmente, sobre la clase vencedora".51   Como si esto fuera poco, "El Hombre Nuevo" tiene que brindar un devoto culto a la personalidad de Fidel Castro, a quien Guevara pareciera adjudicarle una serie de poderes telepáticos capaces de saber, por obra y gracia de la magia, el sentir de la voluntad popular (aunque tal voluntad jamás haya emitido un solo voto desde la Revolución de 1959). Prestemos atención a la siguiente estulticia del Che: "La iniciativa parte en general de Fidel o del alto mando de la Revolución y es explicada al pueblo, que la toma como suya" (y sino "la toma como suya" tiene como alternativa la cárcel le faltó agregar) y prosigue: "Utilizamos por el momento el método casi intuitivo de auscultar las reacciones generales frente a los problemas planteados. Maestro en ello es Fidel... Fidel y el pueblo comienzan a vibrar en un diálogo de intensidad creciente hasta alcanzar el climax" .52   O sea que los extensos monólogos de no menos de cuatro horas con los que Fidel Castro atormenta a la organizada muchedumbre que debía escucharlo, eran para el Che "un diálogo de intensidad" en donde el bueno de San Fidel "adivina" el sentir de la multitud con un método "casi intuitivo". Este disparate, el de suponer la existencia de un "diálogo entre Fidel y las masas", según Sebreli obedeció a que el Che "No advertía que las preguntas retóricas que hacia el orador al público eran un recurso usado por los grandes demagogos como Mussolini y el propio Perón, y que esos rituales multitudinarios fueron característicos de todo régimen totalitario cualquiera que Juera su signo".53  Como si las mencionadas tonterías guevaristas no bastaran, el etiquetado "justiciero de los pobres" prosigue su divague apelando, como siempre, al fundamentalísimo, a la violencia y como no podía ser de otro modo, a la muerte: "en un final abrupto coronado por nuestro grito de lucha y victoria... Nosotros, socialistas, somos más libres porque somos más plenos, somos más plenos por ser más libres... Nuestra libertad y nuestro sostén cotidiano tienen color de sangre y están henchidos de sacrificio. .."y con fanatismo propio de todo terrorista prohibe tener vida de familia, amistades o cualquier actividad ajena a la revolución: "Los dirigentes de la revolución tienen hijos, que en sus primeros balbuceos, no aprenden a nombrar al padre, mujeres que deben ser parte del sacrificio general de su vida para llevar la revolución a su destino; el marco de los amigos responde estrictamente al marco de los compañeros de revolución. No hay vida Fuera de ella... El revolucionario... se consume en esta tarea ininterrumpida que no tiene más fin que la muerte"54 ¿No tiene más fin que la muerte?, ¿acaso la finalidad de todo hombre de acción política (revolucionario o no) no debiera ser mejorar la calidad de vida de las personas?
Para alcanzar tamaño despropósito, Guevara propone una serie de mecanismos llamados "instituciones revolucionarias", que no son ni más ni menos que brutales maquinarias disciplinarias tal como él mismo lo expone: "En la imagen de las multitudes marchando hacia el futuro, encaja el concepto de institucionalización como el de un conjunio armónico de canales... de aparatos bien aceitados que permitan esa marcha, que permitan la selección natural de los destinados a caminar en la vanguardia y adjudiquen el premio y el castigo a los que cumplan o atenten contra la sociedad en construcción".55   Luego, "el tolerante" San Ernesto, con lenguaje stalinista, haciendo la apología del verticalismo social (que dicho sea de paso es contraria al divulgado igualitarismo marxista) alega: "Así vamos marchando. A la cabeza de la inmensa columna -no nos avergüenza ni nos intimida decirlo va Fidel, después, los mejores cuadros del Partido e, inmediatamente, tan cerca que se siente su enorme fuerza, va el pueblo en su conjunto".56   Y todos felices y comeremos perdices.
He aquí algunos fragmentos del aceitado aparato que el fusilador argentino tenía pensado y escrito para armar una sociedad según su enfermiza psiquis y su prepotente voluntad. Incluso, era tal el efecto sobrenatural que le adjudicaba a la revolución para fabricar "el hombre nuevo", que el propio Guevara creía que con el socialismo "Las nuevas generaciones vendrán libres del pecado original 57 y sostenía desatinos tales como que la revolución era capaz de corregir las debilidades humanas llegando a confesar la siguiente estupidez: "Tengo el carácter explosivo, y eso es un defecto que se va corrigiendo con la Revolución".58
Para tamaño sometimiento intelectual, era imprescindible intervenir la Universidad, ámbito naturalmente enemigo del guevarismo. Luego, los docentes acusados de no ser comunistas fueron expulsados y confinados. Anota Kalfon que "Unas comisiones mixtas estudiantes-profesores organizan una depuración política sistemática que empuja al exilio a excelentes cerebros. Mientras el rector es sustituido por Juan Marinello, presidente del partido comunista, una nueva asignatura, el estudio del materialismo histórico, se introduce en todas las especialidades"59.  Agrega Castañeda que "La Universidad se ve presionada para alinearse con el gobierno; los profesores de abolengo y de criterio independiente abandonan el país".60   El descontento entre los estudiantes universitarios no se hizo esperar, puesto que no sólo se prohibió la libertad de cátedra sino también la libertad de estudio y cada cubano sólo podía estudiar la carrera que el estado le ordenaba. Por ejemplo, quien tenía grandes habilidades y pasiones por la poesía o la literatura, sin más trámite podía ser designado a estudiar física nuclear (porque "la revolución así to exige"). Este disparate obviamente generaba un profuso malestar en la Universidad y derivó en un masivo clima de descontento. Tanto es así que Guevara se apersonó a la Universidad de Santiago de Cuba donde brindó un patético discurso a raíz del cual el enojo del auditorio se hizo presente (la revolución apenas tenía meses y todavía estaba permitido enojarse). El Che. entonces, salió al cruce arengando: "¿Acaso no tenemos el derecho de decir que sólo diez abogados se deben graduar por año y que en cambio deben hacerlo cien químicos industriales?... Algunos dirán que eso es dictadura, y si ustedes están de acuerdo, yo también lo estaré: es una dictadura. Pero eso es lo que es bueno para Cuba... Si yo que soy médico pude convertirme en guerrillero y después ocuparme de la industria porque asilo exige la revolución, ¿por qué ustedes no van a poder? 61
Este egocentrismo de Guevara consistente en autoerigirse ante los alumnos como ejemplo del superhombre multifacético, es analizado por Sebreli quien ironiza: "Guerrillero, arqueólogo, médico, economista, planteador de industria, embajador itinerante, trabajador voluntario, poeta, cuentista, la megalomanía del Che no tenía límites, y en 1965, en tanto se preparaba para la aventura boliviana, decidió de la noche a la mañana hacerse filósofo; más aún, emprendió la ardua tarea de escribir un manual de filosofía, con escasos conocimientos de la materia" 62  Eso sí: al Che le faltó aclarar a los estudiantes que él se hizo médico, guerrillero, banquero, ministro y cualquier etcétera posible por su propio gusto y voluntad. La misma voluntad que él le cercenaba al estudiantado cubano. De más está decir que en las cuatro "profesiones" principales de Guevara (la de médico, guerrillero, banquero y ministro) obtuvo un desempeño notoriamente desastroso. Era un improvisado que encaraba cualquier aventura, y por ende, en casi todo fracasaba. Excepto como padre de familia, ámbito en el que cometía muy pocos errores porque nunca estaba en su casa y jamás veía a sus hijos. Se comunicaba con ellos cuando deambulaba por el mundo a través de esporádicas cartas. El mismo reconocía su total ausencia como marido y padre al confesar: "No tengo casa, ni mujer, ni hijos".63
Su ausentismo como esposo, en todo caso formaba parte de la vida de adultos y obviamente puede traer problemas conyugales que afectan a la pareja y serán los mayores entonces los responsables de manejar o resolver el conflicto. Empero, en el caso de los hijos (a la sazón todos muy pequeños e inocentes) la ausencia paterna, puede ocasionar trastornos psicoafectívos irreparables. Hilda Guevara, primera hija que el Che tuvo con la menospreciada peruana "terminó alcohólica y deprimida por la marginación a la que la sometió...y un hijo natural no reconocido estuvo prisionero en un campo de concentración castrista".64
Retomando el natural conflicto de Guevara con los estudiantes universitarios, cabe reflexionar que paradojalmente, en el mundo contemporáneo son éstos mismos quienes, engañados por la propaganda, lo levantan como estandarte. ¡Qué fácil es ser guevarista en las universidades argentinas en donde cada uno estudia gratuitamente lo que le viene en gana y encima milita en las agrupaciones políticas que se les antoja! ¿Cabe imaginarse a Guevara aprobando este sistema? Obvio que no. Es lamentable que el grueso del estudiantado universitario se encuentre tan embrutecido como para
 que sus militantes, con total desconocimiento, levanten la banderola de quien censuraba y pensaba todo lo contrarío de lo que hoy sus desinformados acólitos disfrutan. La ignorancia acerca de quién fue el Che Guevara, en Argentina (país natal del personaje en cuestión) es casi absoluta. Creemos que en el resto del mundo también. Probablemente el lugar del planeta en dónde menos se sepa sobre el Che, sea precisamente en Cuba, puesto que la propaganda estatal ha construido una sacrosanta imagen cuyo cuestionamiento es motivo de represión. Incluso, autorizados biógrafos sostienen que tanto su cuaderno en el Congo como sus cartas en Praga o sus apuntes en Bolivia han sido modificados y dulcificados a efectos de almibarar párrafos, pasajes y palabras, a fin de no desnudar las numerosas miserias de su defectuoso procer.
Pero más allá del deformado prisma con que los adolescentes miran al Che Guevara, vale destacar que el polifacético personaje brindó diferentes consejos a los jóvenes, tal su pedagógico discurso ofrecido en el "Primer Congreso Latinoamericano de Juventudes" (28 de julio de 1960) en donde brindó el siguiente mensaje de amor y paz enseñando que "mucho más fuerte y positivo que la más fuerte y positiva de las manifestaciones pacíficas, es un tiro bien dado a quien se le debe dar"65.  Notable apotegma de la pedagogía guevarista que sus tiernos acólitos probablemente desconozcan.
Asimismo, el propagandeado "sistema educativo" de la revolución cubana, no sólo "educa" conforme a los principios marxistas sino que fomentando el cuito a la personalidad de un modo rayano en lo bizarro, "les enseñan que R se escribe como Revolución, F como Fidel y que la CH se pronuncia Che como el comandante".66  En los textos escolares de los últimos tiempos, las enseñanzas no han cambiado demasiado. Veamos el siguiente texto de ¡segundo grado!: "Mi CDR... El Comité de Defensa de ¡a Revolución de mi cuadra lleva el nombre de Camilo Cienfuegos, y a él pertenecen todos en mi casa. Yo, aunque soy pequeño, coopero también en muchas tareas del CDR".67 ¿Qué son a todo esto los "Comité de Defensa de la Revolución"?, pues primeramente dejemos que nos lo deñna Manuel Sánchez Pérez, ex viceministro de Fidel Castro: "Existen formas de represión en Cuba que son mucho más crueles y eficientes que la típicamente policial. Es el caso de las funciones cumplidas por los Comités de Defensa de la Revolución"68, los cuales son organismos de espionaje, en donde el agente del régimen controla la vida de los vecinos y cuya jurisdicción de control se halla divida por barrios o manzanas. Entre otras actividades, el espía casuista de cada "CDR" obliga a los vecinos a completar la siguiente planilla de delación: "Planilla de Comprobación. Informante:
¿Mantiene relaciones con personas desafectadas a la revolución? Explique:
¿Sabe usted si tiene creencias religiosas? Explique ¿Mantiene relaciones con personas en el extranjero? ¿De qué país? ¿Tiene familiares presos o sancionados? Tipo de delito, parentesco. ¿Cómo son sus relaciones con los vecinos de la cuadra? Explique ¿Mantiene relaciones con elementos antisociales? Explique El espacio final del formulario está reservado para dejar constancia de los nombres de CDR, del informante y del verificador".*®
El citado texto infantil invitando simpáticamente ai niño de siete años a colaborar con un órgano del espionaje comunista, sirve de antesala para que al llegar al cuarto grado, la criatura lea y estudie lo siguiente: "Yo quiero ser militar... Yo quiero ser militar como mi papá... Mi papá peleó en el Ejército Rebelde cuando era muy joven. Quería ser barbudo, pero como era tan joven, todavía no tenía barba. Sus compañeros le decían: ¡Qué importa, chico! ¡Lo importante es que sepas pelear!... Cuando triunfó la Revolución, papá siguió de militar... Una vez, papá se fue a otro país que luchaba contra el imperialismo. Cuando regresó se veía muy contento... Yo quiero ser militar como mi papá. Tendré un traje verde olivo y unfusir.™ Ya con estos cariñosos antecedentes didácticos, estamos listos para cursar el quinto grado y aprender en el texto escolar estatal que "Vladimir llich Lenin siempre dedicaba a los niños una especial atención. Conversaba con ellos con gran cariño. Así se ganaba la confianza de los pequeños".71  Pero el castro-guevarismo no detuvo su afán estatista en cuanto a la propiedad de bienes muebles e inmuebles, sino que estatizó los cerebros humanos. Efectivamente, conversando con la conocida médico-cirujana Hilda Molina en su paupérrima choza en La Habana, me manifestó el desopilante argumento que el régimen le dio al impedirle viajar a la Argentina a conocer a sus nietos: "que su cerebro fue adoctrinado por la revolución y entonces el mismo es patrimonio del Estado y que la revolución determina tanto su uso, como su utilización y su destino profesional o geográfico".72 No se equivoca el pensador cubano-argentino Armando Ribas cuando sostiene que "educar en el marxismo es como amamantar con alcohol".
Pero con imponer el Partido Único, controlar la educación y estatizar los cerebros no bastaba. Como frutilla del postre había que direccionar la más estricta vigilancia a la prensa libre, que dejó de ser libre enseguida. A los pocos meses de la revolución, bajo la consigna pronunciada por Guevara "Nosotros, los miembros de la Revolución Cubana, que somos el pueblo de Cuba, no admitimos términos medios: o se es amigo, o se es enemigo"73 se
 identificó que dentro del "bando enemigo" se encontraba la prensa no complaciente: "Quevedo, amigo de Castro y director de Bohemia, el más impor¬tante semanario de Cuba, se ve obligado a refugiarse en una embajada, lo que ilustra un proceso de control de la prensa que va endureciéndose a medida que aumentan las tensiones políticas... Los directores que intentan resistir deben emprender el camino del exilio. Desaparecen así Prensa Libre, El País, la revista popular Carteles, etc.".74  En cuanto al Diario de la Marina, de tendencia conservadora (vaya herejía) la represalia vendrá dada por e! sindicato de artes gráficas el cual "manda entonces a sus sicarios para que tomen por asalto el periódico. El Che designa como interventor, es decir, como nuevo director a Rene Depestre... de las prensas del Diario de la Marina saldrán gigantescas ediciones de Marx, Engels, Lenin, Mao y Kim II Sung 75.
Una vez cerrados todos los diarios de Cuba, se creó la agencia "Prensa Latina", órgano castro-guevarista primigeniamente capitaneado por el castrista Gabriel García Márquez y el escritor Punió Aputeyo Mendoza. Conversando con este último (quien actualmente reside en Madrid), me comentó que renunció a poco de formada la agencia porque activistas del Partido Comunista de inmediato la coparon imponiendo punto y coma de cada nota o información que se debía publicar.
Se llevó entonces una drástica razzia contra los intelectuales que no adulaban lo suficiente a quienes detentaban el poder y un caso paradigmático de ello, lo constituye el director de fotografía cinematográfica Néstor Almendros, destacado cubano galardonado con el Osear en 1978, quien fuera autor del filme "Lunes" el cual "ha sido prohibido por tener el mal gusto de mostrar la vida nocturna en los bares populares de La Habana y hacer cine-verdad en vez de exaltar los-auténticos-valores-revolucionarios"76
Entre 1959 y 1960 el totalitarismo estaba recién en marcha y aun existían algunos focos más o menos tolerados de disenso relativamente permitido. Es por ello que la reacción del ambiente intelectual cubano ante la censura de "Lunes" se hizo notar. No obstante . el filme fue prohibido y para fundamentar la persecución a los intelectuales, Castro acudió a un argumento propio de su personalidad: "La culpabilidad de muchos de nuestros intelectuales y artistas reside en su pecado original; no son auténticamente revolucionarios. . . Nuestra tarea consiste en impedir que la generación actual, dislocada por sus conflictos, se pervierta y pervierta a las nuevas".77  Vale decir, el intelectual no adicto al comunismo es un perverso y sus obras pueden pervertir a las generaciones venideras. Para determinar entonces los parámetros de la libertad de expresión, Castro pronunció un extenso discurso dirigido a los intelectuales en el que impuso el siguiente criterio: "Dentro de la revolución, todo; contra la revolución, nada"78 Resulta tragicómico que el grueso de los intelectuales contemporáneos de América latina o Europa suelan ser los férreos defensores de la revolución en Cuba (país en dónde jamás vivirían).
Otro problema que había que erradicar era la falta de inquietudes revolucionarias en los ambientes obreros y campesinos donde naturalmente imperaba un clima anticomunista. Relata Kalfon: "La Confederación de los Trabajadores Cubanos (CTC), reacia también a la dialéctica comunista, tuvo que aceptar a su cabeza a un hombre de Castro, David Salvador, más bien moderado. Al año siguiente, su moderación parece ya excesiva. Sobre todo cuando las nacionalizaciones producen un alineamiento salarial a la baja, en especial en la electricidad, donde tradicionalmente las compañías norteamericanas pagaban una generosidad a sus obreros. Éstos -¡oh, escándalo!- llegan a desfilar coreando: '¡Cuba si, Rusia no!79
En cuanto a los usos y costumbres, para purificar la "moral revolucionaria", en 1961 se hicieron célebres las razzias conocidas como "Las Noches de las tres P" (pederastas, prostitutas, proxenetas), en donde se detenía y posteriormente trasladaba a campos de concentración a los acusados.80  El Che aprueba y defiende estas y otras notables prácticas alegando "Cualquier revolución comporta, lo quiera o no, guste o no, una inevitable porción de estalinismo".81 Joseph Stalin, tirano de la Unión Soviética que promediando los años 20 se constituyó en sucesor de Lenin, fue el criminal más grande del siglo XX (después del líder comunista chino Mao Tse Tung) en cuyo curriculum ostenta la cucarda de haber masacrado 25 millones de campesinos. Guevara, ídolo de grandes y chicos, adulado por la prensa y por toda la caterva de comerciantes que se dedica el rentable negocio de los DD.HH., solicitaba jubiloso "una porción de estalínismo". Y no sólo lo solicitaba sino que lo practicaba, pues predicaba con el ejemplo personal, indecoroso mérito que le tenemos que reconocer.
En la sociedad planificada por Guevara no cabía margen para la menor discrepancia, los disidentes eran exterminados y los "desviados" tendrían la chance de "rehabilitarse" a través de largas estadas en los campos de concentración de trabajo forzado. Agrega Castañeda que "es el Che quien crea el primer 'campo de trabajo' en Cuba... en Guanahacabibes... sienta asi uno de los más odiosos precedentes de la revolución cubana: la internación de disidentes, homosexuales, y más tarde de enfermos de sida".82
Guevara justificaba la creación de su "campo de trabajo" en los términos siguientes "a Guanahacabibes no se envía sino en casos dudosos a la gente que debiera ir a la cárcel. Yo creo que la gente que debe ir a la cárcel debe ir de todas maneras. Asi sea un militante viejo, así sea quien sea, debe ir a la cárcel. A Guanahacabibes se manda a la gente que no debe ir a la. cárcel, la gente que ha cometido faltas a la moral revolucionaria de mayor o menor grado de sanciones simultáneas... como un tipo de reeducación mediante el trabajo".83
El castigo guevarista a los homosexuales no ha de sorprender: según Jon Lee Anderson, tanto Castro como Guevara "estaban imbuidos del machismo latino: la creencia en la debilidad innata de las mujeres, el desprecio por los homosexuales, la admiración por los hombres valientes y arrojados".84 Desde su juventud, Guevara sentía rechazo visceral contra la homosexualidad, animadversión manifestada incluso en los detalles más domésticos. Anota Díaz Araujo que el Che "no era ni quería pasar por homosexual, ni por asomo. El siguiente dato, proveniente de la pensión en que vivió en Guayaquil con otros argentinos, entre ellos Eduardo Gualo García, es bien demostrativo de lo que enunciamos. Reza así: En el cocktail lingüístico de los muchos castellanos que se hablan en el exilio, Ernesto se ve obligado a defenderse de los argentinismos, su amigo Gualo lo llama 'querido' en una conversación con Hilda y el doctor Guevara respinga: ¿Por qué me decís querido, Gualo? Sabes que no me gusta; da que pensar cosas extrañas a la gente que no conoce nuestro modo de hablar. Querido es un porteñismo, más que un argentinismo. En Buenos Aires, es un trato solo amistoso, sin connotaciones amatorias. Y Guevara no deseaba ofrecer dudas en materia tan delicada".85
Sonaba ciertamente extraño, pero los cubanos comenzaron a añorar a Batista y no era para menos. Además del confort económico del que hasta hacía poco se gozaba y que ahora se había desplomado, en los tiempos de Batista algunas libertades se hallaban restringidas, lo cual es grave, pero en los tiempos de Castro todas las libertades directamente fueron anuladas. En sólo un año de régimen castro-guevarista "se dio muerte a más del doble de personas que durante los diecisiete que Batista estuvo en el poder, y millares de gentes fueron encarceladas".86
Ocurre que el mito del "oligarca" Batista desplazado por el "proletariado triunfante" forma parte del sinfín de quimeras vendidas por el castrismo. Agrega Sebreli: "Fidel era hijo de un rico terrateniente, educado por los jesuítas, y llevaba al cuello una medalla de la Virgen del Cobre. Contrastaba con Fulgencio Batista, un mulato descendiente de humildes campesinos que permitía a los comunistas controlar algunos sindicatos. Esta complejidad de la sociedad cubana vuelve impropia la explicación de la revolución castrista desde el punto de vista estrictamente clasista del marxismo leninismo como se pretendería hacer años después".87
En voz baja y temblorosa, la comunidad cubana comenzaba a repetir el slogan "qué bien que estábamos cuando estábamos mal". Efectivamente, los
desatinos de Batista quedaron reducidos a la categoría de pecados veniales si los parangonamos con el empobrecido estado-gendarme impuesto por Castro y Guevara a partir de 1959. Un botón de muestra nos dice que Castro y los suyos, al ser encarcelados tras intentar tomar un cuartel en 1953 con el fin de derrocar al gobierno, fueron indultados por Batista y estuvieron encarcelados apenas unos meses. Castro en el poder, al contrario, no sólo fusiló miles de campesinos, simples disidentes, balseros desnutridos o imaginarios "enemigos", sino que encarceló y ejecutó a sus propios enmaradas del Movimiento 26 de Julio o del Ejército Rebelde tal como lo hemos visto y más adelante ampliaremos.
Si Batista, hubiese tenido una mínima cuota de la perversidad de Castro, o bien este último hubiese sido fusilado en 1953, o como mínimo se le hubiese hecho cumplir su condena de 15 anos, hoy los hermanitos Castro no serían amos y señores de la vida de 12 millones de cubanos, sino apenas un par de sufridos abuelitos con anécdotas para contar.
La guerrilla anticastrista de los ex castristas
A modo de enérgica respuesta, por motivos a veces políticos, en parte religiosos y en muchos otros casos por rebelarse ante la pérdida de los derechos fundamentales, se generó en Cuba un notable fenómeno obrante a partir de 1960, el cual fue una brava guerrilla anticastrista compuesta por cubanos que, tras haber apoyado a Castro y a Guevara en sus inicios, reaccionó luego con virulencia ante la estafa marxista presentando batalla y enarbolando los mismos ideales por los cuales habían peleado junto a Castro y Guevara contra Batista.
Despechados por la estafa comunista, a partir de marzo de 1960 aparecen en escena numerosos campesinos y ciudadanos cubanos de todas las clases sociales que se nuclearon en organizaciones anticomunistas. Las mismas, aunque sin coordinación, actuaron en diversos frentes tomando como refugio la Sierra del Escambray. Anota Kalfon que según Fidel Castro "existen 179 de esos grupos en Cuba... Su hermano Raúl concreta que el número de esos bandidos -así los llama- se eleva por lo menos a tres mil quinientos... Serán necesarios, meses, años para que las operaciones de limpieza, difíciles y costosas en vidas humanas, acaben con esa resistencia".88
Además de grupos rebeldes como el "30 de Noviembre", el "Directorio Estudiantil Revolucionario", "Alpha 66", "Agrupación Montecristo" o "el Movimiento de Recuperación Revolucionaria"89, la insurrección contaba con un fuerte contenido religioso, ya que de las organizaciones anticastristas que operaban, dos de ellas tuvieron especial destaque y eran de raigambre Católica: el MRR (Movimiento de Recuperación Revolucionaria) y la ACU (Agrupación Católica Universitaria). La ACU, según cuenta el politólogo y escritor cubano Carlos Montaner estaba bajo la dirección del jesuíta Llórente y su "dirigente más audaz y persuasivo era Manuel Artime, y en los últimos meses de la dictadura de Batista, el propio Llórente (amigo de Fidel Castro y su consejero espiritual durante la etapa estudiantil de Fidel en el colegio Belén) logró incorporarlo"W En cuanto al MRR, añade Montaner que era un "organismo sin tradición histórica, sin vínculos eficaces con la facción no comunista de la vigente estructura de poder, se convirtió, no obstante, en el centro de la lucha anticastrista".91 Agrega el autor que este impulso insurgente "viene dado por el carácter apostólico que ciertos grupos orientados por los jesuítas quisieron darle a la conspiración... en las luchas internas cubanas, se moría al grito un tanto exótico de 'Viva Cristo Rey'... aquellos jóvenes católicos dieron muestras de un enorme valor, enfrentándose con total integridad a la muerte o a la cárcel" 92 El biógrafo californiano Jon Lee Anderson, devoto de Guevara, agrega que "Dentro de Cuba la oposición se endurecía. Ya se conformaba un movimiento clandestino dirigido por Manuel Ray, profesor de la Universidad de La Habana desde su expulsión del gobierno, y otro grupo indisimuladamente disidente era la combativa Juventud Católica... En las zonas rurales radicalizadas se producían hechos de violencia provocados por las expropiaciones de tierra sin compensación y el caos generalizado. Pequeños grupos contrarrevolucionarios, muchos de ellos integrados por ex soldados del Ejército Rebelde, entraban en actividad. ..En la Sierra Cristal. ..el ex combatiente Higinio Díaz había vuelto a la guerra en alianza con Jorge Sotús, un veterano del 26 de Julio que había conducido los primeros refuerzos rebeldes de Santiago a la sierra en mano de 1957 y ahora se hallaba distanciado del movimiento. Ambos habían fundado el MRR con Manuel Artime 93, prosigue Anderson explicando que "Aumentaban las actividades de la oposición, y la represión del gobierno se hacía a la par. Los miembros de un grupo rebelde en el Escambray integrado principalmente por estudiantes de la Universidad de Las Villas cayeron presos y fueron al paredón. El ex dirigente de la CTC, David Salvador, pasó a la clandestinidad y poco después unió sus fuerzas a las del MRP, creado por Manuel Ray. El arzobispo de Santiago, Enrique Pérez Serantes, antes partidario de Fidel, denunció en una carta pastoral los nuevos vínculos comunistas y aparentemente bendijo la creciente violencia contra el gobierno: 'Es mejor verter sangre que perder la libertad'... En Miami, la CÍA forjó la unidad de los exiliados anticastristas al unificar el MRR de Artime y Justo Carrillo con el grupo encabezado por Tony Varona, el ex primer ministro de Prío. De allí surgió el Frente Democrático Revolucionario (FDR)"94 al que se sumaron otras organizaciones más. El periodista de Le Monde de París, Jean Fierre Clerk, resume esta alianza anotando que: "Afines del verano de 1960, cinco organizaciones de exiliados habían anunciado a los Estados Unidos la creación de un 'Frente Revolucionario Democrático' (FRD). Sus personalidades dominantes son Tony Varona, ex primer ministro de Prío; Manuel Artíme, líder del grupo de sabotaje MRR, católico integrísta; y Justo Carrillo, primer presidente del Banco de Desarrollo bajo Fidel. A ellos se une en noviembre Manuel Ray, antiguo líder de la resistencia urbana contra Batista".95  Como vemos, el grueso de la reacción anticomunista fue liderada por los casuistas estafados. Esta reacción de lucha contira el despotismo naciente, tuvo por contrapartida una feroz represión estatal, ejecutada a través de grupos de tareas que se encargaban de secuestrar y exterminar disidentes, los cuales fueron conocidos como la "LCB" (Lucha Contra Bandidos), que operó brutalmente durante cinco años. Para tener éxito, la consolidación del marxismo precisaba de ejecuciones a todo propósito. La categórica represalia marxista fue maquillada bajo la tachada jurídica sancionada en julio de 1959 con la ley 425 (aún vigente), la cual condena de "contrarrevolucionario a todo aquel que combata al partido comunista o disienta con un acto de gobierno"96 y la ley 988 (también vigente) del 26 de noviembre de 1961 que impone la pena de muerte y cuya elástica penalidad, anota Díaz Araujo es "extendida a diversas situaciones. Por caso, la norma que se aplicó con el fusilamiento de 3 balseros que intentaron huir a fines de 2003, y fueron apresados. Legalidad castrista; es decir: Terrorismo de Estado"97 También se decretó (el 13 de marzo de 1963) una ley que "prescribe penas de prisión entre veinte a treinta años por robos de cien pesos... Los tribunales revolucionarios, compuestos por comunistas convictos y confesos, están obligados a dictar sentencia dentro de las setenta y dos horas del comienzo de la vista".98 Sería auspicioso que los simpatizantes del castro-guevarismo contemporáneo, siempre dispuestos en materia criminológica a adoptar posturas "garantistas" (consistentes en disminuir o abolir todo tipo de sanciones en los códigos penales) tomen nota de estos datos.
Carlos Franqui, director del diario oficial "Revolución" recuerda que en 1961: "Las montañas del Escambray estaban llenas de alzados... casi todos campesinos, obreros, rebeldes, gente del pueblo... Eran casi toda gente perseguida injustamente... La región de Trinidad, una de las más tradicionales y católicas de Cuba, había sido abandonada... Perseguidos de origen revolucionario, que escapan de las montañas. Obligados a combatir para escapar de las prisiones..."." Agrega Huber Matos que "los alzamientos de campesinos contra el comunismo, en los primeros años de la década, particularmente en el área montañosa de El Escambray, fueron persistentes y numerosos. El régimen los dominó de manera implacable, a base de operaciones en las que participaban miles de soldados, peinando metro a metro, montañas y bosques. Llevaban a cabo fusilamientos masivos. Aplicaron altas condenas de cárcel a los sospechosos y desalojaron a poblaciones enteras... Muy pocos guerrilleros pudieron escapar con vida de la persecución masiva en las montañas de El Escambray.
Miles de familias campesinas de la provincia central de Las Villas fueron desarraigadas y hasta disueltas, siguiendo los patrones de barbarie del estalinismo. En el extremo occidental de la isla surgió un pueblo llamado Sandino, con gentes obligadas por la fuerza a abandonar hogar, tierra y pertenencias, en una radical operación de desalojo... valientes guerrilleros se enfrentaron a un ejército fanatizado, con recursos y entrenamiento muy superiores a los del ejército de Batista... Ricardo Olmedo, quien, tras ser arrestado por sus actividades contra el régimen, fue amenazado de ser llevado al paredón a menos que compareciera ante las cámaras de televisión incitando a los cubanos a abandonar la resistencia contra el régimen. Él contestó: "No soy artista'. Prefirió la muerte a prestarse a un show televisivo. Olmedo era veterano del asalto al palacio presidencial durante la lucha contra Batista... ".100  Jorge Gutiérrez Izaguirre, integrante de los grupos anticastristas del MRR en Matanzas y que luego fuera confinado a 30 años de prisión cuenta que: "Las confrontaciones fueron marcadamente violentas y las tropas antiguerrilleras ejercieron una represión despiadada sobre los campesinos de la zona. Por una información valiosa asesinaban a toda una familia. Fue frecuente, dado que se alzaron muchas familias completas... los campesinos, como grupo, estaban opuestos a las medidas políticas y económicas que emitía el poder central".101 Armando Valladares por su parte recuerda que "A principios de 1961 comenzaron a afluir al presidio modelo (de la Isla de Pinos) prisioneros pertenecientes a los alzados que, en numerosos focos guerrilleros, operaban en el Escambray... conocimos detalles de la gigantesca operación que el Gobierno había desplegado: más de 60 mil efectivos, en su mayoría milicianos, participaron en lo que se llamó la 'limpia del Escambray 102 y aclara que lo que el régimen denominaba la "limpia de Escambray" fue una represión en la que el castrismo "Decidido a impedir a toda costa el asentamiento de los núcleos guerrilleros, y sabedor de las simpatías que suscitaban en el campesinado de la zona... hizo trasladar poblaciones completas... La táctica militar del castrismo era tan primitiva y costosa como efectiva: cadenas de soldados peinaban palmo a palmo la zona, fusilando en el acto a los alzados. Se utilizaron helicópteros traídos de Rusia y perros de Alemania Oriental. Los alzados capturados eran fusilados rápidamente, frecuentemente sin el trámite inútil del juicio sumario, y sus cadáveres, entregados sin pérdida de tiempo al forense... Procurando su exterminio fusilaban no sólo a los guerrilleros, sino también a los campesinos que servían como guías, correos y contactos. Los campesinos de la zona discrepaban ya en gran número del régimen de Castro, y los que no integraban las guerrillas cooperaban con ellas de muchas formas... Para quitarles este apoyo el gobierno ideó un plan de reconcentración. Todas las familias asentadas en el Escambray y sus estribaciones fueron desalojadas... Las mujeres y los niños fueron separados de los hombres y trasladados a La Habana... Esa situación duró años, y en todo ese tiempo jamás vieron a sus esposas, a sus hermanos. Los niños de edad escolar fueron separados de las madres y 'becados' en escuelas del Gobierno para 'reeducarlos' y anular asila influencia 'dañina' de los mayores... Los hombres fueron llevados hasta la península de Guanahacabibes... Estos campesinos no fueron nunca presentados ante un tribunal, no se les celebró juicio, pero estaban presos... obligados a trabajos forzados".103  El campo de concentración de la península de Guanahacabibes citado por Valladares, fue creado y comandado durante varios meses por un médico: el Dr. Ernesto Guevara de la Serna.
La represión castro-guevarista fue tan drástica que según Castañeda, en 1961 "Entre el 15 y 17 de abril más de cien mil personas fueron detenidas en La Habana: el Teatro Blanquita, La Cabaña, el parque de béisbol de Matanzas y el Castillo del Príncipe se colmaron de presuntos conspiradores contra el régimen. Sus principales dirigentes -unas decenas- fueron fusilados en esos días".104  Escalofriantes datos que ratifica Jean-Pierre Clerc: "A principios de 1961, el Líder se pone en campaña... Para mostrar su determinación, hace fusilar al comandante Wiiliam Morgan... Se anuncia la apertura, en Santa Clara, de un proceso monstruoso contra trescientos ochenta y un 'bandidos' capturados en el Escambray, entre ellos un cura... La primera acción del Líder es hacer arrestar por el jefe de policía a Amaijeiras, el antiguo campesino de la Maestra, y a todos los cubanos sospechosos de oposición, es decir, de tibieza ante la Revolución... Alrededor de cien mil personas son interrogadas durante el fin de semana: es la razzia más gigantesca de la historia de las Américas... Los católicos, y en especial el clero, son los primeros vigilados. Los propios obispos sufren arrestos domiciliarios. El cardenal Arteaga prefiere refugiarse en una embajada. El antiguo ministro de agricultura castrista, Sorí Marín, es fusilado el 18. Añade Valladares que en esas jomadas "los fusilados fueron tantos, que no alcanzaron los ataúdes, y se los enterró en sacos de nailon".106
A la par que esto sucedía, por su "labor humanitaria" la URSS le otorgaba a Fidel Castro el "Premio Lenin de la Paz". El socialismo no perdía ni la crueldad ni el humor.
 La numerosa guerrilla anticastrista hubiera tenido más éxito de no ser por el insistente rumor de que pronto vendrían contingentes armados de cubanos exiliados de Miami, el cual distendió o detuvo gran parte de las acciones previstas. Agrega Franqui que "La consigna era esperar. Que serían apoyados por una invasión. Que muy pronto llegaría el momento. Paralizaron así buena parte de las guerrillas. Y los llevaron a la derrota, prisión y muerte. Guerrilla que no se mueva, foguee, combata, adquiera experiencia y extienda su campo de acción, perece. Y eso fue lo que ocurrió... Esos hombres duraron años resistiendo en las montanas".107  La invasión de cubanos exiliados que esperaban los guerrilleros anticastristas a la que Franqui alude, fue la que posteriormente se conoció como "el combate de Bahía Cochinos", episodio al que más adelante nos referiremos.
La rebelión fue exterminada por el terrorismo de estado y duró hasta 1965. El periódico Granma (órgano oficial del Partido Comunista) publicó en el mes de mayo de 1970 un balance efectuado por Raúl Castro en torno a lo sucedido en aquellos años, en el cual admitió que "las pérdidas en vidas del ejército habían pasado de 500 y que costó unos 800 millones de pesos "108  y en cuanto a la cantidad de organizaciones guerrilleras existentes, ratificó que ascendían a 179.109
En cuanto a los autores intelectuales de la represión comunista, confirma Juan Vives que fueron los soviéticos quienes "diseñaron el plan de nuevas unidades carcelarias, entre otras el campo de concentración titulado 'Ciudad Sandino' de Pinar del Río, o las prisiones de El Condado, en Trinidad y El Serrucho, en Camagüey. Con las de Boniato, La Cabaña, El Príncipe y la ¡sla de Pinos, se forjó una red carcelaria que pudo alojar a más de 70.000 personas (exactamente 79.850)... El teniente coronel de la KGB Valentín Trujanov, el teniente coronel del Ejército Rojo Anastas Grigorich y el coronel comisario político de la KGB Mijail Furmanov dirigieron esta represión en masa. Colaboraron con ellos ciento cincuenta especialistas para las operaciones comunes, veinte para los interrogatorios (su jefe fue el psiquiatra militar Yuri Karinov) y decenas de técnicos encargados de controlar el funcionamiento de la base (de El Condado)" ,"110
No hay duda que, desde 1959, lo que más se ha desarrollado en Cuba no ha sido el sector industrial sino el sistema carcelario. En una comunidad muy pequeña como la cubana, en 1980 entre cárceles, campos de exterminio y trabajo forzado la cifra de establecimientos ascendía a 93, 111 y entre los organismos de espionaje y represión que coordinaban tareas de control, castigo y fusilamientos se sumaba un total de 17 instituciones estatales que operaban en red.112  Vale agregar que, dado el grandilocuente tenor de la razzia, estos numerosos establecimientos resultaron escasos. Por ejemplo, el Reclusorio Nacional de la Cárcel Modelo de la isla de Pino, que estaba previsto para alojar 2.000 personas, mantuvo en cautiverio de manera simultánea una cifra que oscilaba entre los 6.000 y los 8.000 disidentes.113  Agrega Díaz Araujo que "Con muy buen sentido del humor (negro), Fidel hizo bautizar 'América Libre' a una granja penitenciaria para mujeres. Lo que tal vez ignoraba Castro es que la prisión es: el único territorio libre en Cuba, el único lugar donde (los cubanos) podían decir lo que quisieran sin temer el arresto".114
La perfección del guevarismo
Bajo el inocente y desapercibido nombre "Unidades de Ayuda a la Producción", a partir de 1965 y merced a la exitosa experiencia de Guevara comandando el citado "campo de trabajo forzado" en Guanahacabibes, se forjaron de manera institucionalizada y organizada numerosos establecimientos afines, que tenían el propósito de encerrar y someter a extenuante trabajo por el lapso no menor de un año a "Todo el que se apartase de los estereotipos y las normas impuestas por la Revolución".115  Alvaro Vargas Llosa es conteste en sostener que el campo de concentración de Guanahacabibes creado por Guevara "fue el precursor del confinamiento sistemático, a partir de 1965 en la provincia de Camagüey, de disidentes, homosexuales, victimas del SIDA, católicos, Testigos de Jehová, sacerdotes afrocubanos, y otras escorias por el estilo, bajo la bandera de las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP). Hacinados en autobuses y camiones, los "desadaptados" serían transportados a punta de pistola a los campos de concentración organizados sobre la base del modelo de Guanahacabibes. Algunos nunca regresarían; otros serían violados, golpeados, o mutilados; y la mayoría quedarían traumatizados de por vida".116
Para tal fin, el régimen contó con el asesoramiento de especialistas soviéticos y se creó "junto al Departamento de Lacras Sociales del Ministerio del Interior (MININT), numerosos centros de concentración, la mayoría en la provincia de Camagüey".117  Esta necesidad de perfeccionar y agrandar la praxis creada por Guevara surgió cuando Raúl Castro, siendo ministro de las Fuerzas Armadas, se percató con suma preocupación de la presencia en las calles de jóvenes que por hábitos o apariencia no estaban "incorporados al proceso revolucionario". ¿Qué hacer con ellos?: la respuesta se la brindó Fidel: "Estos jóvenes. .. para que no se pierdan deben ingresar en una institución que además de instruirlos los fuerce a colaborar con la producción" 118
En los primeros días de 1965 "llegó a La Habana el primer grupo de especialistas soviéticos encargados de instruir a los cubanos las formas de controlar la creciente ola de prostitución y homosexualismo. Lo componían doce asesores encabezados por el Coronel Ivon Micharov y permanecieron más de 3 años en Cuba".119 El periódico Revolución, del jueves 11 de marzo de 1965, enaltecía el programa de la UMAP en los términos siguientes: "El plan de Reeducación, bautizado por el Ministerio del Interior y directamente orientado por Fidel, puede agregarse a los grandes logros humanos de la Revolución"120  Las bondades de esta nueva "entidad" revolucionaria también eran difundidas por medio del órgano oficial del castrismo, el diario Granma, el cual en su ejemplar del 14 de abril de 1966 (por señalar un caso) transcribió las siguientes declaraciones de Castro: "La misión fundamental de la UMAP es hacer que estos jóvenes cambien su actitud, educándose, formándose, salvándose".121  Los campos de trabajo forzado quedaron armados para la posteridad y trascendieron a Guevara. Ya en marzo de 1971 cuatrocientos mil jóvenes habían sido condenados a "internación en centros de rehabilitación".122  Varias decenas de ellos murieron con motivo del esfuerzo desmedido al que fueron sometidos, sin contar con atención médica alguna y 507 fueron hospitalizados para recibir tratamientos psiquiátricos.123
El primer llamado se produce el 19 de noviembre de 1965. Comenzaron las brutales razzias y el entonces joven Emilio Izquierdo (por arrojar un caso al azar), fue confinado al campo de concentración con los siguientes cargos transcriptos en su legajo: "Es católico activo, por consiguiente es negativo al proceso revolucionario... el mencionado sujeto se reúne con elementos negativos y de su misma clase, visitando con mucha frecuencia la iglesia después que termina su trabajo".124
Las detenciones se daban por escaladas cronológicas y eran manejadas por "el Departamento de Lacras Sociales del Ministerio del Interior (MININT)" 125 en donde los elementos que debían "rehabilitarse" eran sometidos a trabajo forzado cuyo lapso oscilaba entre las 12 y las 14 horas diarias.126 Dentro del grupo de "lacras sociales" (así calificadas oficialmente por el estado socialista), el sector que llevaba la delantera era el de los homosexuales, cuya conducta era una afrenta al "hombre nuevo" guevariano y tal como lo repetía Fidel Castro, "La Revolución no necesita peluqueros"127
Para algunos, la homosexualidad no es más que una actividad genital alternativa sin mayores connotaciones. Para otros, es un vicio especialmente repugnante contrario al orden natural y a los preceptos cristianos. Pero más allá de esta disparidad de criterios, lo que sí es de suyo inadmisible, es que una persona sea brutalmente castigada y confinada en campos de concentración socialistas durante años con el pretexto de la "reeducación" por el solo hecho de ser homosexual. Entre los miles de casos, basta citar el de Jorge Ronet, encarcelado el 29 de noviembre de 1965 en el Cinedromo de Marianao quien recuerda: "Una vez llenados unos cincuenta camiones, partimos rumbo a la Estación Central de Trenes de La Habana, cada camión escoltado por una perseguidora y algunos jeeps llenos de militares que portaban metralle¬tas rusas, en posición de tirar.., Nos bajaron a punta de metralletas de los vagones. De allí nos llevaron a un estadio deportivo cercano, perteneciente al central Lugareño. A esa hora, inmensos reflectores alumbraban la oscuridad, y las caras de cansancio y fatiga resaltaban monstruosamente al ser iluminadas por la intensa luz. Comienzan las ofensas, los insultos, los improperios: 'Maricones, se acabaron los paseítos y la mariconería por el Prado' .Comenzaron a pasar el reflector por las caras de todo el mundo: 'Este parece maricón, y es, y éste y aquél otro de más allá'. Decían los cabos y sargentos distribuidos por todo el estadio ".128 Un caso mundialmente conocido, fue el del escritor cubano Reinaldo Arenas, castro-guevarista de la primera hora, pero que una vez puesta la revolución en marcha, por su declarada condición de homosexual fue confinado y torturado por años en los campos de concentración, muriendo en el exilio en 1990.129
Los testimonios se recogen por millares pero más contundente es rescatar la argumentación brindada por el mismísimo Fidel Castro: "Cuba necesitaba la UMAP para absorber hombres en la edad militar que, políticamente, no encajaban en el servicio militar regular por un número apreciable de deficiencias políticas: falta de integración en la Revolución, antigua membresía en alguna religión, holgazanería, homosexualidad o mantenían o mantienen un record criminal" y el objetivo según Fidel no era castigo sino brindar "un proceso de rehabilitación ideológica".130 Complementando esto, en reportaje concedido al periodista Luis Báez, publicado en el periódico Granma el 14 de abril de 1966, Fidel enseña que "La Umap no es un lugar de castigo. Allí los jóvenes que ingresan no son mirados con desprecio; al contrario, son bien recibidos... se procura la manera de ayudarlos a que superen su actitud. A que cambien, a que aprendan; se trata de convertirlos en hombres útiles a la sociedad".131
Con narrativa grotesca, la revista Bohemia (ejemplar del 27 de noviembre de 1965) brinda un cuadro de situación tragicómico, al relatar de modo alegre el traslado en tren de cientos de confinados a los campos de concentración: "Los viajeros visten de uniforme gris y cargan pesadas mochilas... De pronto, algo así como una corriente eléctrica llegó a todos los vagones, despierta a los pasajeros y los hace vibrar en tensión emotiva: ¿Qué ocurre?
¡Fidel está en el tren! Montó en Santo Domingo. Viene de vagón en vagón... va regalando sonrisas, chistes, palabras de aliento, habla del viaje y se preocupa por el ánimo de todos. No repuesto aún de esta gran emoción, Miguel Martín, secretario general de la Unión de Jóvenes Comunistas, se alegra con la presencia de su dulce madre que había entrado a hurtadillas y le había traído una botella de café caliente, el cual distribuye, con bondad comunista, entre sus compañeros más inmediatos"132. Lo desopilante del relato adquiere una magnitud tan inverosímil, que pensamos que ni el cómico Diego Capusotto (y su personaje "Bombita Rodríguez") hubiese reparado en montar un sketch con semejante escena.
Acertadamente, Díaz Araujo explica que el dúo Castro/Guevara pretendió imponer al día de hoy "una sociedad perfecta construida a base de hombres imperfectos, reconstruidos por la maquinaría estatal totalitaria y reeducados en el trabajo forzado"'.133
El marketing guevarista no tiene límites a la hora de generar confusión. Cuando todos los años en la Argentina militantes homosexuales marchan hacia la Catedral de Buenos Aires para efectuar un "escrache" (protesta), los activistas exhiben con ahínco sus banderas multicolor (representativas de su comunidad) e infaltables carteles del Che Guevara. ¿Sabrán los sodomitas convocados a sus coloridas peregrinaciones que si Guevara viviera los hacinaría en gulags.
En el siglo XXI la elasticidad en cuanto al uso de la figura de Guevara da para todo, incluso para ser reivindicado por quienes serían asesinados o encarcelados por él. El absurdo equivaldría a ver una procesión sionista enarbolando la efigie del Ftihrer.
Cantidad de presos alojados en cárceles y campos de concentración del castro-guevarismo
Antes de entrar en materia (tanto del número de presos como de asesinados por el castro-guevarismo), vale aclarar que entre las diversas fuentes consultadas existen algunas diferencias numéricas. ¿A qué obedece esta leve disparidad? Precisamente a que por ser Cuba un estado totalitario (que impide la entrada de comisiones de DD.HH. o de la Cruz Roja para que lleven adelante informes pertinentes), los datos más próximos a la verdad los tienen precisamente los servicios de inteligencia del castrismo, cuyos ocultados guarismos quizás podamos conocer acabadamente el día en que la longeva tiranía caiga en Cuba (si es que los archivos no son destruidos previamente). Sin embargo, contamos con numerosos datos que nos pueden aportar una aproximación interesante.
En cuanto a encarcelamientos, según las aminoradas cifras oficialmente reconocidas por el gobierno castrista, hacia 1970 el número de presos políticos ascendía a 20 mil e iban en aumento 134. Como esta cifra pertenece oficialmente al castrismo es plausible suponerla falsa, y es por ello que el historiador Thomas Hug, rescatando datos obrantes de 1959 a 1970 afirma que "en 1965, el propio Castro reconoció la existencia de 20.000 presos políticos; un pesimista podría sospechar que la cifra se aproxima más a los 40.000",135  Sin embargo, hasta 1967, sí se tuvo acceso fehaciente a cifras oficiales y reservadas del gobierno castrista "la cual fue substraída de los archivos del ministerio de Gobernación y traída a los Estados Unidos. Este documento indica la presencia de 69.315 prisioneros políticos en más de 100 prisiones y campos de concentración"136  Pero como no faltarán simpatizantes de la tiranía caribeña que afirmen que esas cifras no son más que una "mentira de la CÍA" (exactamente el mismo argumento que se utilizaba para negar las matanzas de Stalin -luego reconocidas por el mandatario soviético Nikita Krushev-), tomemos el meticuloso informe que publicó la embajada de España en Cuba (cuyos datos abarcan hasta abril de 1969) a través de su consejero diplomático Jaime Caldevilla: "Presos políticos en Cuba: 45.350; Cubanos que han sufrido prisión preventiva: 630.000; Abandonaron la Isla: 774.300".137 Estas miles de víctimas, fueron categorizadas o clasificadas del siguiente modos: "24.000 cubanos en campos de concentración, 7000 en la cárcel, 7200 en granjas de castigo y 17.231 en manos de la policía de seguridad".138  Téngase en cuenta, que los alarmante datos citados datan de hace 40 años, con lo cual es más que obvio que las cifras sumadas a la actualidad arriban a números astronómicos.
Número total de asesinados por el Castrismo
Con respecto a los fusilamientos en el campo de concentración La Cabaña (el lugar favorito del Che), las cifras según el Boletín Internacional de Noticias, Vol. II, N° 754, del 27 de diciembre de 1967, señalan que la cantidad de muertes producidas hasta entonces fue de 17.121 personas (7876 por órdenes de los tribunales revolucionarios y 9245 ejecutados sin ninguna clase de juicio).139
Anótese que La Cabaña fue el campo de exterminio más famoso pero no el único. Hacia 1970, los números totales arrojados por la embajada española, que es la más confiable puesto que "tenía acceso a las estadísticas de los cementerios, calculó más tarde que 22.000 cubanos habían sido matados o habían muerto en la cárcel y 2000 se habían ahogado al intentar escapar".140   A medida que se avanza en el tiempo, los guarismos actualizados se incrementan y dentro de los datos más recientes, un profuso estudio publicado el 23 de abril del año 2006 en el diario Miami Herald, detalló un listado meticuloso, discriminado por categorías (fusilamientos con sentencia, fusilamientos sin sentencia, desaparecidos, etc.) cuya cifra de asesinatos políticos hechos efectivos por el terrorismo de estado castrista arriban a 31.173 muertos."141
Afortunadamente, en la actualidad podemos contar además con el riguroso informe que por años fue trabajando metódicamente el profesor Armando Lago, economista doctorado en la Universidad de Harvard y especialista en temas cubanos (internacionalmente reconocido por su libro The Politics of Psychiatry in Revolutionary Cuba -1991-), junto a la analista política María Werlau, -quienes en el marco del proyecto "Archivo Cubano", principal programa de Free Society Project (FSP) institución presidida por la mismísima Werlau- arroja los siguientes datos:
En cuanto a muertes documentadas e identificadas por causas políticas a partir de enero de 1959, la cifra asciende a 41.695 homicidios; sin embargo, el número se eleva drásticamente si se incluye a los balseros desaparecidos en el mar o asesinados por la represión castrista tanto en el marco del intento de fuga como de la travesía para escapar de la isla. Dentro de este último rubro de desgraciados, el número arriba a las 77.879 víctimas, las cuales sumadas a los muertos antedichos ascendería a la cifra total de 119.578. 142 Para confirmar todas y cada una de las muertes (con su respectivo nombre, apellido, fecha de muerte, lugar y circunstancias de la misma), el "Archivo Cubano" utiliza tres fuentes distintas por cada víctima. Si las tres fuentes arrojan datos idénticos, entonces se toma como muerte confirmada y se suma al catálogo.
Número total de asesinados por el Che Guevara
La revolución cubana lleva más de 50 años y el Che estuvo en Cuba desde 1956 y hasta 1959 en calidad de guerrillero, y desde 1959 hasta 1965 como funcionario público. Lo dos últimos años de vida (1966 y 1967) prácticamente repartió su tiempo entre el Congo, Praga y Bolivia (permaneciendo en Cuba sólo en breves y esporádicos intervalos). Asimismo, de los seis años en que se mantuvo en la isla de manera estable, cinco años obró como funcionario público y en este rol se la pasó viajando un año entero por el exterior (tal como luego veremos).
Luego, tenemos que hacer la siguiente disquisición: por un lado, están los asesinatos del Che Guevara de manera directa (autor material del crimen) y por otro, los asesinatos producidos por orden de Guevara (autor intelectual del crimen). Dentro de los primeros, tenemos el siguiente cúmulo de homicidios.
Ejecutados por el Che en la Sierra Maestra:
Ejecutados por el Che durante su breve comando en Santa Clara:
Aristidio    10-57
Manuel Capitán    1957
Juan Chang    9-57
Bisco Echevarría Martínez       8-57
Eutimio Guerra    2-18-57
Dionisio Lebrigio    9-57
Juan Lebrigio    9-57
El Negro Ñapóles    2-18-57
Ramón Alba    1-3-59
José Barroso    1-59
Joaquín Casillas Lumpuy    1-2-59
Félix Cruz    1-1-59
Alejandro García Olayón    1-31-59
Héctor Miraba!    1-59
J. Mirabal    1-59
Félix Montano    1-59
Cornelio Rojas    1-7-59
Vilalla    1-59
Domingo Álvarez Martínez   1-4-59
Cano del Prieto    1-7-59
Ejectados por el Che en La Cabana:
VüauAbrcu    7-3-59
Humberto Aguiar    1959
Garmán Aguirre    1959
Pelayo Alayón    2-59
José Luis Alfaro Sierra    7-1-59
Pedro Alfaro    7-25-59
Mariano Alonso    7-1 -59
José Alvaro    3-1-59
Alvaro Anguieira Suárez    1-4-59
Aniella    1959

Chicho Osario    1-17-57
Un maestro no
identificado ("El Maestro")     9-57
11-12. Dos hermanos, espías
del grupo de Masferrer    9-57
Dos campesinos no
identificados    4-57
José Fernández Martínez    1 -2-59
José Grizel Segura
(Manacas)    1-7-59
Arturo Pérez Pérez    1-24-59
Ricardo Rodríguez Pérez    1 -11-59
Francisco Rosell    1 -11 -59
Ignacio Rosell Leyva    1-11 -59
Antonio Ruíz Beltrán    1 -11 -59
Ramón Santos García    1-12-59
Pedro Socarras    1-12-59
Manuel Valdés    1-59
Tace José Veláquez    12-59
Mario Ares Polo    1 -2-59
José Ramón Bacallao    12-23-59
Severino Barrios    12-9-59
Eugenio Bécquer    9-29-59
Francisco Bécquer    7-2-59
Ramón Biscet    7-5-59
Roberto Calzadilla    1959
Eufemio Cano    4-59
Juan Capote Fiallo    5-1-59
Antonio Carralero    2-4-59

Gertrudis Castellanos    5-7-59
José Castaño Quevedo    3-6-59
Raúl Castaño    5-30-59
Eufemio Chala    12-16-59
JoséChamace    10-15-59
José Chamizo    3-59
Raúl Clausell    1-28-59
Ángel Clausell    1-18-59
Demetrio Clausell    1-2-59
JoséClauseH    1-29-59
Eloy Contreras    1-18-59
Alberto Corbo    12-7-59
Emilio Cruz Pérez    12-7-59
OrestesCruz    1959
Adalberto Cuevas    7-2-59
Cuni    1959
Antonio de Beche    1-5-59
Mateo Delgado    12-4-59
Armando Delgado    1 -29-59
Ramón Despaigne    1959
José Díaz Cabezas    7-30-59
Fidel Díaz Marquina    4-9-59
Antonio Duarte    7-2-59
Ramón Fernández Ojeda    5-29-59
Rudy Fernández    7-30-59
Ferrán Alfonso    1-12-59
Salvador Perrero    6-29-59
Víctor Fígueredo    1-59
Eduardo Forte    3-20-59
Ugarde Galán    1959
Rafael García Muñiz    1-20-59
Adalberto García    6-6-59
Alberto García    6-6-59
Jacinto García    9-8-59
Evelio Gaspar    12-4-59**
Armada Gil y Diez y
Diez Cabezas    12-4-59
José González Malagón    7-2-59
Evaristo Benerio González 11-14-59
Ezequiel González    59

Secundino González    1959
Ricardo Luis Grao    2-3-59
Ricardo José Grau    7-59
Osear Guerra    3-9-59
Julián Hernádez    2-9-59
Francisco Hernández Leyva4-15-59
Antonio Hernández    2-14-59
Gerardo Hernández    7-26-59
Olegario Hernández    4-23-59
Secundino Hernández    1-59
Rodolfo Hernández Falcón   1-9-59
Raúl Herrera    2-18-59
Jesús Insua    7-30-59
Enrique Izquierdo    7-3-59
Silvino Junco    11-15-59
Enrique La Rosa    1959
Bonifacio Lasaparla    1959
Jesús Lazo Otaño    1959
Ariel Lima Lago    8-1-59- (Menor)
Rene López Vidal    7-3-59
Armando Mas    2-17-59
OrnehoMata    1-30-59
Evelio Mata Rodríguez    2-8-59
Elpidio Mederos    1-9-59
José Medina    5-17-59
José Mesa    7-23-59
Fidel Mesquía Díaz    7-11-59
Juan Manuel Milián    1959
José Milián Pérez    4-3-59
Francisco Mirabal    5-29-59
Luis Mirabal    1959
Ernesto Morales    1959
Pedro Morejón    3-59
Carlos Muñoz M.D.    1959
César Nicolardes Rojas    1-7-59
Víctor Nicolardes Rojas    1-7-59
José Nuñez    3-59
Viterbo O'Reilly    2-27-59
Félix Oviedo    7-21-59
Manuel Paneque    8-16-59
Pedro Pedroso    12-1-59
Diego Pérez Cuesta    1959
Juan Pérez Hernández    5-29-59
Diego Pérez Creía    4-3-59
José Pozo    1-59
Emilio Puebla    4-30-59
Alfredo Pupo    5-29-59
Secundino Ramírez    4-2-59
Ramón Ramos    4-23-59
Pablo Ravelo Jr.    9-15-59
Rubén Rey Alberola    2-27-59
Mario Risquelme    1-29-59
Fernando Rivera    10-8-59
Pablo Rivero    5-59
Manuel Rodríguez    3-1-59
Marcos Rodríguez    7-31-59
Nemesio Rodríguez    7-30-59
Pablo Rodríguez    10-1-59
 Pedro Pedroso    12-1-59
Diego Pérez Cuesta    1959
Juan Pérez Hernández    5-29-59
Diego Pérez Creía    4-3-59
José Pozo    1-59
Emilio Puebla    4-30-59
Alfredo Pupo    5-29-59
Secundino Ramírez    4-2-59
Ramón Ramos    4-23-59
Pablo Ravelo Jr.    9-15-59
Rubén Rey Alberola    2-27-59
Mario Risquelme    1-29-59
Fernando Rivera    10-8-59
Pablo Rivero    5-59
Manuel Rodríguez    3-1-59
Marcos Rodríguez    7-31-59
Nemesio Rodríguez    7-30-59
Pablo Rodríguez    10-1-59

Ricardo Rodríguez    5-29-59
Olegario Rodríguez
Fernández    4-23-59
José Saldara    11-9-59
Pedro Santana    2-59
Sergio Sierra    1-9-59
Juan Silva    8-59
Fausto Suva    1-29-59
Elpidio Soler    11-8-59
Jesús Sosa Blanco    2-8-59
Renato Sosa    6-28-59
Sergio Sosa    8-20-59
Pedro Soto    3-20-59
Osear Suárez    4-30-59
Rafael Tarrago    2-18-59
Teodoro Tellez Cisneros      1-3-59
Francisco Tellez    1-3-59.

El New York Times reportó además 15 ejecuciones de Guevara (ejemplares del 2/6/59, 2/8/59,3/16/59 y 4/2/59).143
Sintetizando, encontramos 14 asesinatos del Che en Sierra Maestra (los cuales Guevara personalmente confiesa en sus diarios), 23 homicidios cometidos por el Che a traición en Santa Clara y 175 en el campo de concentración de La Cabaña. Estos crímenes de Guevara se cometieron en el lapso de dos años (entre 1957/1959) y la cifra final asciende a 216 homicidios efectuados por el Che. Vale destacar que ninguno de estos crímenes se produjo en el marco de enfrentarme en enfrentamientos armados, sino que estamos hablando de ejecuciones a sangre fría, la mayoría sin el trámite protocolar del "juicio sumarísimo" y muchos de ellos contra víctimas de su propia tropa tai como ya lo hemos visto. Los autores del listado advierten también que el mismo es incompleto y señalan que en cuanto a la nómina de fusilados en La Cabaña, hay algunos casos mencionados en donde no se tiene certeza plena acerca de si Guevara disparó en persona o si él dio la orden de que se disparara. No obstante, este formidable trabajo desnuda una vez más la enorme distorsión existente en torno al retorcido chacal argentino, hoy convertido en símbolo de paz y justiciero humanitario.
A estos datos, se deben agregar los fusilamientos llevados a cabo no por Guevara en persona sino por orden de él, los cuales ascenderían a 1500 fusilados bajo su "gestión" en La Cabaña, tal como el propio Che le reconoció al agente Félix Rodríguez en Bolivia.144
Jamás tuvo Guevara un acto de arrepentimiento ni de contrición. Poco antes de abandonar la función pública en Cuba y partir al Congo a seguir exportando violencia, el 11 de diciembre de 1964 ante la Asamblea de la ONU y siendo todavía ministro de Industrias confesó: "Fusilamietos, si, hemos fusilado, fusilamos y seguiremos fusilando"145
Téngase en cuenta que este cúmulo de homicidios se dio en un país que en 1959 tenía apenas seis y medio millones de habitantes y que en la actualidad llega aproximadamente a los 12 millones. Cabe sumar el agravante de que esos asesinatos no formaron parte del contexto naturalmente cruel de una guerra (no hay registro de que Guevara en combate haya matado a un enemigo) en cuyo caso obviamente cabría algún tipo de disculpa o atenuante. Pues no es el caso.
Notas
1    O'Donnell. Pacho, Che, la vida por un mundo mejor, Sudamericana, 2* ed., 2005, págs.
151,152.
2    Diario La Nación, Sección Enfoques, página 6, domingo 28 de diciembre de 2008,
"Contra el mito del noble guerrillero heroico", nota de Raúl Rivero.
3    Diario La Nación, Sección Enfoques, página 6, domingo 28 de diciembre de 2008,
"Contra el mito del noble guerrillero heroico", nota de Raúl Rivero.
4    Citado en Díaz Araujo. Enrique, Ernesto Guevara de la Serna, Aristócrata, aventurero y
comunista, Ediciones del Verbo Encarnado. San Rafael, Mendoza, 2008, pág. 230.
5    Díaz Araujo, Enrique, Ernesto Guevara de la Serna, Aristócrata, aventurero y comunis¬
ta. Ediciones de) Verbo Encarnado, San Rafael, Mendoza, 2008, pág. 232.
« Citado en Sebreli, Juan José. Comediantes y mártires. Debate, 2008, pág. 133.  Citado en O'Donnell. Pacho, Che, la vida por un mundo mejor, Sudamericana, 2º ed.. 2005, pág. 166.
8    Kalfon, Pierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 266.
9    Lazo, Mario. Daga en el corazón, Cuba traicionada, Minerva Books, 1972, págs. 117,118.
1° Aunque con intervalos o impurezas, el liberalismo "a la argentina" cercana al conservadorismo americano es la ideología que predominantemente gobernó nuestro país dorante la segunda mitad del siglo XIX y hasta 1943, pasando a ser tras 80 años de gestión, de un ignoto desierto a la sexta potencia mundial y la décima economía del mundo. Luego, el advenimiento del populismo y las ideologías estatizantes forjaron una tendencia decadente que al día de la fecha no se ha podido revertir. En términos partidocráticos desde el reinicio del sistema electoral en 1983 en Argentina, lo más parecidos a los republicanos americanos ha sido la ya virtualmenie extinta Unión del Centro Democrático, relativamente exitosa en la década del '80. En la actualidad, sólo existen fundaciones o ateneos afines a estos postulados. La institución más prestigiosa en la materia es la Fundación Atlas y luego también tienen un rol protagónico La Escuela Integral para la Libertad, el Grupo Progreso, el Foro Republicano, el Ateneo de la República y hasta existe un blogspot de adhcrentes republicanos en Argentina www.elespacio-republicano.blogspot.com, Estas y otras organizaciones mayormente se dedican a la actividad académica y la difusión de ideas, pero sin intervenir en la vida electoral del país.
11    Kalfon, fierre. Che. Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & lañes
Editores, 1997. pág. 266.
12    Ernesto Che Guevara, "Hasta la Victoria Siempre", Cuba, La Habana, número especial,
noviembre 1967, p. 44-, citado en Fierre Kalfon - Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro
sigfo - Plaza & Janes Editores, 1997, pág. 267.
13    Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 267.
14    del Barco, Osear. Carta a la intemperie, diciembre de 2004 y posterior polémica en
Sobre la responsabilidad. Cfclope, Córdoba, 2007. Citado en Sebrelí, Juan José. Comediantes
v mártires. Debate, 2008, pág, 133.
15    ver Osear del Barco, Carta a ¡a intemperie, diciembre de 2004 y posterior polémica en
Sobre ¡a responsabilidad. Cíclope, Córdoba, 2007. Citado en Sebreli, Juan José. Comediantes
y mártires, Debate, 2008, pág. 133.
16    Napoleón Vilaboa, ex miembro del movimiento "26 de julio". Comenzó a trabajar en
enero de 1959 en la llamada "Comisión depuradora", en la fortaleza de La Cabana, bajo las
órdenes del Che Guevara. Caimán Productíons, Instituto de la memoria histórica cubana con¬
tra el totalitarismo Guevara: Anatomía de un mito.
17    Rolando Castaño, hijo del teniente José de Jesús Castaño. Caimán Productions, Instituto
de la memoria histórica cubana contra el totalitarismo. Guevara: Anatomía de un mito.
18    Citado Díaz Araujo, Enrique, Ernesto Guevara de la Serna, Aristócrata, aventurero y
comunista. Ediciones del Verbo Encarnado, San Rafael, Mendoza, 2008, pág. 324.
>» José Vilasuso, abogado, Comenzó a trabajar en enero de 1959, bajo las órdenes de Ernesto Guevara como instructor de expedientes de la llamada Comisión depuradora, en la for¬taleza de La Cabana. Caimán Productions, Instituto de la memoria histórica cubana contra el totalitarismo. Guevara: Anatomía de un mito.
''» Orlando "Oto" Pantoja fue hombre de confianza de Ernesto Guevara, capitán del Ejército Rebelde. Murió en Solivia como miembro de la guerrilla guevarista. Testimonio de Eduardo Pérez, primer teniente del Ejército Rebelde, se incorporó en Las Villas a la columna 8 "Ciro Redondo", bajo las órdenes de Ernesto Guevara".. Caimán Productions, Instituto de la memo¬ria histórica cubana contra el totalitarismo. Guevara: Anatomía de un mito.
21    Sergio García Muñiz, hermano de Rafael García, fusilado por Ernesto Guevara. Caimán
Productions, Instituto de la memoria histórica cubana contra el totalitarismo. Guevara:
Anatomía de un mito.
22    Roberto Martín Pérez, Dirigente de la "Conspiración Trinidad". Ex prisionero político.
Cumplió 28 años de cárcel. Amigo de la infancia de Aleida March. esposa de Ernesto Guevara.
Caimán Productions, Instituto de la memoria histórica cubana contra el totalitarismo. Guevara:
Anatomía de un mito.
2J The Cuba Ditemma, Nueva York, 1962, págs 62,63, citado en Díaz Araujo, Enrique, La rebe¬lión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural, Cruz y Fierro Editores, 1983. págs. 303,306.
2* Proyecciones del Ejército Rebelde, cit. por Hugo Gambini, págs 217,218, reproducido en Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de ¡a nada, o ideólogos de la subversión cultural, Cruz y Fierro Editores, 1983, págs. 303.
25    Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural,
Cruz y Fierro Editores, 1983, pág. 307.
26    Ver Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, a ideólogos de la subversión cultural,
Cruz y Fierro Editores, 1983, pág. 307


27    EHas Nazario, Capitán del Ejército Rebelde, miembro del segundo frente Nacional del
Escambray. Escolta del Che Guevara. Caimán Productions, Instituto de la memoria histórica
cubana contra el totalitarismo. Guevara: Anatomía de un mito.
28    Lazo, Mario. Daga en el corazón, Cuba traicionada, Minerva Books, 1972, pág. 410.
29    Fidel Castro a Ernesto Guevara, 8 de enero de 1959, en James, Daniel, Cuba, el primer
satélite soviético en América, Libreros Mexicanos Unidos, México DF, 1962, pág. 127, citado
en Díaz Araujo, Enrique, Cuadernos rojos, revolución marxista en América. Los nuevos
Cristeros, Ediciones La Rosa Blanca, 2005, pág. 5.
30    Kalfon, Pierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 302.
31    Thomas Hug, Cuba. La lucha por la libertad 1762-1970,3, La República Socialista
1959/1970 , Barcelona, Grijalbo, 1974, p 1641. Citado en Enrique Díaz Araujo, Cuadernos
Rojos, Revolución Marxista en América. Los nuevos Cristeros, Ediciones La Rosa Blanca,
2005,pág.45.
32    Kalfon, Pierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 325.
33    Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos
Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 45,46.
34    Franqui, Carlos, Vida, e te, pág. 28, nota 2. Citado en Díaz Araujo, Enrique.
Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa
Blanca, 2005, pág. 41.
35    Clero, Jean Pierre. Las cuatro estaciones de Fidel Castro. Una biografía política,
Aguilar, Bs. As. 1997, pág. 213. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución
Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 41.
3* Lazo, Mario. Daga en el corazón. Cuba traicionada, Minerva Books, 1972, págs. 411,412.
37    Matos, Hnber. Cama llegó la noche (Fábula),Tusquets Editores, 5" ed., 2004, pág. 273.
38    Hug, Thomas. Cuba. La lucha por la libertad 1762-1970, 3, La República Socialista
1959/1970, Grijalbo, Barcelona, 1974, págs. 1449, 1450. 1451. Citado en Díaz Aranjo.
Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa
Blanca, 2005, pág. 42.
39 Hug, Thomas. Cuba. La lucha por la libertad 1762-1970, 3, La República Socialista 1959/1970 , Grijalbo, Barcelona, 1974, págs. 1449, 1450, 1451. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 42.
40    Cómo llegó la noche. Hnber Matos, (Fábula), 5" edición, 2004. págs. 435,436.
41    Valladares, Armando. Contra Toda Esperanza. 22 años en el "Gulag de las Américas",
Intermundo, 1985,págs, 18,41 Citado en Hug, Thomas. Cuba.Lalucha por la libertad 1762-
1970, 3, La República Socialista 1959/1970, Grijalbo, Barcelona, 1974, págs. 1449, 1450,
1451. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América.
"Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 64.
42    Valladares, Armando. Contra Toda Esperanza. 22 años en el "Gulag de las Américas",
Intermundo, Bs As., 1985, págs, 18, 19. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos,
Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 64.
43 El Presidio Político en Cuba Comunista. Testimonio, Caracas, ICOSOCV, 1982, pág. 278. Citado en Díaz Aranjo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 63.
44 Chimeno, Darío, 'Iglesia Reprimida en Cuba", en: Cristo Hoy, Tucumán, 6 al 12 de enero de 2005, p 14. Citado en Díaz Araujo. Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 55.
45 Cit por Rojo, Ricardo, op, cit, extraído de Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural. Cruz y Fierro Editores, 1983, pág. 350.
46 Ver conversación completa que fuera publicada en el diario La Nueva Provincia, bajo el título "Entrevista clandestina en Cuba con las* Damas de Blanco'", ejemplar 10 de diciembre del año 2006.
47 Gambini, Hugo. El Che Guevara. La biografía. Planeta, 19" ed., 2007, pág. 216.
48 Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural, Cruz y Reno Editores, 1983, págs. 334/335.
49 Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural, Cruz y Fierro Editores, 1983, págs. 333.
50 Sebreli, Joan José. Comediantes y mártires, Debate, 2008, pág. 145.
51    El Socialismo y el Hombre en Cuba, La educación directa, citado en Guevara, Ernesto.
Obras Completas, Andrómeda, 2002, págs. 189,190.
52    El Socialismo y el Hombre en Cuba, La educación directa, citado Guevara, Ernesto.
Obras Completas, Andrómeda, 2002, págs. 189, 190.
53    Sebreli, Juan José. Comediantes y mártires. Debate, 2008, pág. 137.
54 El Socialismo y el Hombre en Cuba, La educación directa, citado en Guevara, Ernesto. Obras Completas, Andrómeda, 2002, pág. 197.
55    El Socialismo y el Hombre en Cuba, Las intenciones revolucionarias, citado en Guevara,
56 Ernesto. Obras Completas, Andrómeda, 2002, págs. 190,191.
57    El Socialismo y el Hombre en Cuba, Las intenciones revolucionarias, citado en Guevara,
Ernesto. Obras Completas, Andrómeda, 2002, pág. 198.
58    Citado en Díaz Araujo, Enrique, Ernesto Guevara de la Serna, Aristócrata, aventurero
y comunista, Ediciones del Verbo Encarnado, San Rafael, Mendoza, 2008, pág. 405.
59 El Che en la Revolución Cubana, op. cit. T YI. 371, citado en Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & Janes Editores, 1997, pág. 391.
60 Kalfon, Fierre. Che. Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes Editores, 1997, págs. 325, 326. .„ *° Castañeda, Jorge G. La vida en rojo, una biografía del Che Guevara, Espasa, 1997, pág. 224.
61 O'Donnell. Pacho, Che, la vida por un mundo mejor, Sudamericana, 2° ed., 2005, pág. 174.
62 Sebreli, Juan José. Comediantes y mártires, Debate, 2008, pág. 137.
63 Sebreli, Juan José. Comediantes y mártires, Debate, 2008, pág. 138.
64 Sebreli, Juan José. Comediantes y mártires, Debate, 2008, pág. 138.
65    Discurso Ernesto Guevara. "Primer Congreso Latinoamericano de Juventudes"
"Compañeros de América y el Mundo", 28 de julio de 1960.
66    Kalfon, Pienre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 348.
67    "Mis lecturas de segundo grado" de M. Egurrola, Edil. Pueblo y Educación, 1984, págs.
220 y 229, citado en Torres Mega, Alexander, Pro!". En las puertas del infierno cubano. Flashes
Culturales, Uruguay. 1990, pág. 32.
68    Su declaración completa fue publicada, en exclusiva, por el escritor brasileño Luciano
Bivar, en su libro Cuba, un retrato sin retoques, pág. 107, citado en Torres Mega, Alexander,
Prof. En las puertas del infierno cubano. Flashes Culturales, Uruguay, 1990, pág. 45.
69    Montaner, Carlos Alberto. Fidel Castro y la Revolución Cubana, T ed. Playor, Madrid,
1983, pág. 240, Biblioteca cubana contemporánea citado en citado en Torres Mega, Alexander,
Prof. En las puertas del infierno cubano. Flashes Culturales. Uruguay, 1990, págs. 46,47.
70 Libro 4° de Lectura, Editorial Pueblo y Educación, 1984, pág. 154, citado  en Torres Mega, Alexander, Prof. En las puertas del infierno cubano. Flashes Culturales, Uruguay, 1990, pág. 29.

71 Lecturas para el quinto grado", Editorial Pueblo y Educación, 1987, pág 146,149, cita¬do en citado en Torres Mega, Alexander, Prof. En las puertas del infierno cubano. Flashes Culturales, Uruguay, 1990, pág. 33.
72    Conversaciones con el autor, La Habana, noviembre 2006.
73    Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 321.
74    Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 322.
75    Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 323.
76    Fidel Castro, "Adresse aux intellectuels", Partisans. París, Francois Maspero, noviem-
bre-diciembre de 1961, p 173, citado en Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de
nuestro siglo, Plaza & Janes Editores. 1997, págs. 350,351.
77    Ernesto Che Guevara, Obras 1957-1967, T 2, pág. 380, citado en Kalfon, Fierre. Che,
Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes Editores, 1997, pág. 351.
78    Fidel Castro, "Adresse aux intellectuels", Partisans, París, Francois Maspero, noviem-
bre-diciembre de 1961, p 173, citado en Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de
nuestro siglo, Plaza & Janes Editores, 1997, págs. 350,351.
79  Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & Janes Editores, 1997,págs. 325,326.
80 Ver a) respecto Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo, Plaza & Janes Editores, 1997, pág, 351.
81 Farol, K.S. Les guerrilleros au pouver, Op. cit. Págs. 55, 56, citado en Kalfon, Fierre. Che. Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & Janes Editores, 1997, pág. 353.
82 Castañeda, Jorge G. La vida en rojo, una biógrafo del Che Guevara, Espasa, 1997, pág. 224,
83 Ernesto Che Guevara, Actas del Ministerio, citado en Castañeda, Jorge G. La vida en rojo, una biografió del Che Guevara, Espasa, 1997, pág. 224.
84 Anderson, Jon Lee, Che, Una vida revolucionaría, Emecé, Bs. As., 1997, pág. 193.
85    La anécdota rescatada por Díaz Araujo es tomada de Paco Ignacio Taibo TI, Ernesto
Guevara también conocido como el Che, 4a ed, Planeta, Barcelona, 2003, pág. 64, y citada en
Díaz Araujo, Enrique, Ernesto Guevara de la Serna, Aristócrata, aventurero y comunista,
Ediciones del Verbo Encarnado, San Rafael, Mendoza, 2008, pág. 285.
86    Al referirse a los 17 anos de poder de Batista, el autor suma tanto el poder militar que este
tuvo como Jefe de las Fuerzas Armadas de Cuba a partir de 1933 y el poder político como presi¬
dente en dos ocasiones: 1940/44 y 1952/1958. Lazo, Mario. Daga en el corazón, Cuba traicio¬
nado. Minerva Books. 1972, pág. 210.
87 Sebreli, Juan José. Comediantes y mártires. Debate, 2008, pág. 135.
88    Kalfon, Fierre. Che, Ernesto Guevara, una leyenda de nuestro siglo. Plaza & Janes
Editores, 1997, pág. 324.
89    Ver Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural,
Cruz y Fierro Editores, 1983, pág. 307.
90 Montaner, Carlos Alberto, Víspera del final; Fidel Castro y la Revolución Cubana, Globos, Madrid, 1994, pág. 177, Enrique Díaz Araujo, Cuadernos Rajos, Revolución Monista en América. Los nuevos Crísteros, Ediciones La Rosa Blanca, 2005, pág. 8.
91 Montaner, Carlos Alberto, Víspera del final: Fidel Castro y la Revolución Cubana, Globos, Madrid, 1994, págs 177, citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Monista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 8.
92 Montaner, Carlos Alberto, Víspera del final: Fidel Castro y la Revolución Cubana, Globos, Madrid, 1994, págs 177, 178, citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos,

Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 9,10.
93 Anderson, Ion Lee, Una Vida Revolucionaria, Emecé, Bs. As., 1997, pág. 479.
94 Anderson, Ion Lee, Una Vida Revolucionaria, Bs. As. Emecé, 1997, pág. 481.
95    Clerc, Jean Fierre, Las cuatro estaciones de Fidel Castro. Una biografía política,
Aguilar, Bs. As., 1997, pág. 202, Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los
nuevos Cristeros",La Rosa Blanca, 2005, pág. 12.
96    Citado en Diaz Araujo. Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América.
"Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 14.
97    Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América.
"Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 14.
98 Lazo, Mario. Daga en el corazón. Cuba traicionada, Minerva Books. 1972, pág. 414.
99 Franqui. Carlos, Retrato de Familia con Fidel, Barcelona, Seix Barra!, 1981, págs. 223, 224, 225, 226. Citado en Dfaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 14,15,16.
106w Matos, Huber. Cómo llegó la noche (Fábula), Tusquets Editores, 5" ed., 2004, págs. 430, 431.
101    Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nue¬
vos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 19.
102    Valladares, Armando. Contra Toda Esperanza. 22 años en el "Gulag de las Américas",
Bs. As., Intermundo, 1985. págs. 67,68,69 citado en Dfaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos,
Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 17.
103    Valladares, Armando. Contra Toda Esperanza. 22 años en el "Gulag de las Américas",
Bs. As., Intermundo, 1985, págs. 67, 68, 69,152. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos
Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 19.
104 Castañeda, Jorge G. La vida en rojo, una biografía del Che Guevara, Espasa, 1997, pág. 250
105 Jean, Fierre Clerc. Las cuatro estaciones de Piel Castro. Una biografía política, Bs.As. Aguilar, 1997, 206, 208. citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 21.
106 Valladares, Armando. Contra Toda Esperanza. 22 años en el "Gulag de las Américas", Bs. As., Intermundo. 1985, pág. 80 citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 23,68.
107 Franqui, Carlos, Retrato de Familia con Fidel, Barcelona, Seix Banal, 1981, págs. 223, 224, 225, 226. Citado en Díaz Araujo. Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 14,15,16.
toa Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nue¬vos Cristeros". La Rosa Blanca, 2005, pág. 17.
109 Dfaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nue¬vos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 17.
no Vives, Juan, Los amos de Cuba. Bs. As., Emecé, 1982, págs. 99, 100. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 24.
111"El listado perfectamente detallado por provincia, nombre y función específica puede verse en el citado libro de Dfaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005. págs. 26,27.
112 El listado completo de cada organismo represivo con sus nombres y funciones específicas puede verse en Heinecke Scout, Luis, La guerra irregular, Santiago de Chile, Centro de Estudios Nacionales del Cono Sur, 1994, págs. 124-126 o Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 30,31,32.
 113 Ver Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 27,28.
114    Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nue¬
vos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, págs. 27,28.
115    Ros, Enrique. la. Umap: el gulag castrista, Miami. Florida, Ediciones Universal. 2004.
pág. 9.
116    "La máqnina de matar El Che Guevara, de agitador comunista a marca capitalista".
Alvaro "Vargas Llosa, The New Republic, 11/7/2005.
117    Ros, Enrique. La Umap: el gulag castrista, Miami. Florida, Ediciones Universal, 2004.
pág.10.
118 La Umap: El Guian Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 13.
119 La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal. 2004, pág. Pág. 33
120 Periódico Revolución, jueves, marzo 11,1965, citado en La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 28.
121 La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 14.
122 Harrington Michael: Socialism, N. Cork, Bantan Bokk, 1973, pág. 291, citado en Díaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural, Cruz y Fierro Editores, 1983, pág. 349.
123 Ver cifras en La Umap: El gulag castrista, Ediciones Universal, Miami, Florida, 2004, pág. 33.
124 Acta de la Sexta Jefatura Provincial, de Pinar del Río, Sub-unídad Bahía Honda del Ministerio del Interior, Departamento de Orden Público. Expediente de Emilio Izquierdo. La Umap: El gulag castrista, Ediciones Universal, Miami, Florida, 2004, pág. 15.
125 La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal. 2004, pág. 34.
126 La Umap; El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 34.
127 Gorbato, Viviana. Montoneros de Menem. Soldados de Duhalde?, pág. 300.
128 Jorge Ronet "La Mueca de la Paloma Negra", Biblioteca Cubana Contemporánea, España. La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 37.
129 En el año 2000 se filmó una película biográfica de la vida de Reinaldo Arenas titulada "Antes que anochezca".
130    Citado en La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004,
pág. 44.
131    Periódico Granma, jueves 14 de abril de 1966, citado en La Umap: El Gulag Castrista,
Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 45.
132 Revista Bohemia. Noviembre 27,1965 La Umap: El Gulag Castrista, Miami, Florida, Ediciones Universal, 2004, pág. 60.
133 Diaz Araujo, Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultural, Cruz y Fierro Editores, 1983, pág. 364.
134    Lazo, Mario. Daga en el corazón, Cuba traicionada. Minerva Books, 1972, pág. 414.
135    Thotnas Hug, Cuba. La lucha por la libertad 1762-1970,3, La República Socialista
1959/1970 , Grijalbo, Barcelona, 1974, págs. 1724, 1862. Citado en Díaz Araujo, Enrique.
Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca,
2005, pág. 30.
136    Daga en el corazón, Cuba traicionada. Mario Lazo. 1972. Minerva Books, pág. 414.
137 Daga en el corazón, Cuba traicionada. Mario Lazo. 1972. Minerva Books, pág. 415.
138 Thomas Hng, Cuba. La lucha por la libertad 1762-19703, La República Socialista
1959/1970, Barcelona, Grijalbo, 1974, pp 1724, 1862. Citado en Díaz Araujo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxista en América. "Los nuevos Cristeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 30.
139 Ver Díaz Antojo. Enrique, La rebelión de la nada, o ideólogos de la subversión cultu¬ral. Cruz y Reno Editores, 1983, págs. 258 y ver además Ernesto Guevara de la Serna, Aristócrata, aventurero y comunista, Ediciones del Verbo Encarnado, San Rafael, Mendoza, 2008, pág. 324.
140 Hug, Thomas. Cuba. La lucha por la libertad 1762-1970, 3, La República Socialista 1959/1970, Barcelona, Grijalbo, 1974, págs. 1724, 1862. Citado en Díaz Aranjo, Enrique. Cuadernos Rojos, Revolución Marxisia en América. "Los nuevos Costeros", La Rosa Blanca, 2005, pág. 30.
141 Ver detalles en nota publicada en Miami HeraU. edición del domingo 23 de abril de 2006.
142    www.cubaarchjve.org
143    www.CubaArchive.org una iniciativa de Free Socíery Ptoyect, INC. P. O. BOX 529
Summit, N J. 07902 Te. 973.701.0520 .
144 Ver Castañeda, Jorge O. La vida en rojo, una biografía del Che Guevam, Espasa, 1997, pág. 182.
145 "Nuestra Lucha es una Lucha a Muerte", discurso de Ernesto Guevara, el 11 de diciembre de 1964, ante la Asamblea de la ONU. transcripto en Che Guevara, Ernesto, Obras Completas, Andrómeda, 2002.
La obra completa permanecerá alojada en imágenes ubicadas a la derecha del blog, y podrá disponer de su lectura presionando la identificada como LIBROS-"EL CANALLA" de Nicolás Marquez.