viernes, 5 de mayo de 2017

LA CLAVE MASÓNICA Y EL NUMERO 33

 TOMADO EN YOUTUBE DEL CANAL Mentes Curiosas TV
Descubre los orígenes de uno de los mayores secretos de la historia... ¿Qué pasaría si la francamasonería fuera más antigua de lo que actualmente se considera?
- El origen de la masonería no son las cofradías de constructores medievales ni, mucho menos, la logia de constructores del Templo de Salomón, sino un círculo iniciático de la Orden del Temple.
- Los nueve caballeros fundadores del Temple excavan bajo el solar que ocupó el Sancta Sanctorum del Templo de Herodes y encuentran en 1119 manuscritos esenciales escondidos por los esenios de Qumram en su última etapa de existencia –poco antes del año 70- que estos dos francmasones identifican con la Iglesia de Jerusalén, la de los nasoreanos que presidiera Santiago “el Justo”, el “hermano de Jesús”. Dicho descubrimiento habría sido referenciado crípticamente en el ritual masónico del Sagrado Arco Real y reflejado iconológicamente en su “plancha de trazar”del grado del Arco Real.
- Estos pergaminos qumránicos-esenios-nasoreanos del cristianismo primitivo de Jerusalén los lleva inmediatamente Hugues de Payns –primer gran maestre templario- a Francia para que sean traducidos en lo que fuera posible y en el mayor secretismo. Hugues de Payns estaba casado con la escocesa-normanda Catherine de Saint-Clair y “estableció el primer preceptorio templario fuera de Tierra Santa en la propiedades que la familia de ella tenía en Escocia”, donde los Sinclair (que son los Saint-Clair) protegerían posteriormente a los templarios huidos de la hecatombe provocada por el rey francés Felipe el Hermoso. Enclave donde se construiría la hoy llamada “Capilla Rosslynd”, donde se esconderían tales pergaminos.
- Por tanto: algunos ritos de la primitiva Iglesia de Jerusalén-Qumránica son conocidos por el círculo interior del Temple y, posteriormente, por el “príncipe” Henry Sinclair, promotor de la Capilla Rosslynd, que esconde los rollos manuscritos qumránicos en una supuesta cripta subterránea de la Capilla Rosslynd, y crea el rito del Arco Sagrado para asegurarse el secretismo de los canteros de esta Capilla Rosslynd, en la que hay muchas referencias masónico-qumránicas, en las columnas, capiteles, claves, arcos… La planta de esta Capilla, a su vez, imitaría la del Templo de Herodes.
- Ahora bien, aparte del Templo de Salomón, en la masonería hay otro motivo “central”: el arquitecto Hiram Abif y su leyenda. Lomas y Knight aseveran que la leyenda tiene como fundamento el asesinato del rey de Tebas, Seqenenra Tao II, por el rey invasor hicso Apepi I que habría sido instigado –afirman los autores- nada menos que por José, el hijo del patriarca Jacob (los hebreos, según estos dos francmasones habrían sido “aupados” social y políticamente por los invasores hicsos, y tras su caída, se habrían granjeado la enemistad egipcia y habrían pasado a ser esclavos).
- Sequenenra Tao II habría sido vilmente asesinado por no revelar el ritual secreto de muerte-resurrección por el que, tras la muerte de un rey egipcio, éste pasaba a asimilarse a Osiris, en el Más Allá, y el nuevo rey era reconocido como legítimo sucesor (como encarnación de Horus) tras un ritual nocturno en el que, tras un viaje “psicodélico-chamánico”, despertaba al amanecer coincidiendo con la aparición de la estrella Venus. Este ritual estaba vinculado al secreto arquitectónico-filosófico de las dos columnas o pilares unidas por el Cielo, que luego sería representado por las famosas dos columnas del Templo de Salomón y que son fundamentales en toda logia masónica.
- Este secreto –el de los dos pilares y su arco estabilizador que los une, y el del ritual iniciático de muerte-resurrección- sería conocido en Qumran, y por tanto, según estos autores, por Jesús (“Salvador”) y “Mesías” de la columna real, así como por su hermano Santiago “el Justo”, que era el “Mesías” de la columna sacerdotal. Y ambos secretos son los que se describirían en los pergaminos hallados supuestamente por los templarios y enterrado en la Capilla Rosslynd.
Hay más temas tratados por estos dos francmasones en “La Clave Masónica” (la Sábana Santa de Turín reflejaría la crucifixión del último gran maestre del Temple, Jacques de Molay; Jesús era un ser humano y no el Hijo de Dios de la Trinidad cristiana, y además no llegaba al metro y cuarenta de estatura y era jorobado…), pero con estos datos creo que resumimos los puntos esenciales de este libro “para aviso de navegantes”.
Nuevo canal para mentes curiosas - http://www.youtube.com/user/TvMentesC...
Varias subidas por semana, todo esto y mucho más en nuestro canal de youtube.