martes, 9 de junio de 2020

ANTE LA RENUNCIA DE MONS. PEDRO MARTÍNEZ





Ante la renuncia de Mons. Pedro Martínez, obispo de San Luis

Esta mañana, la agencia informativa AICA dio a conocer lo que muchos sabíamos desde hace meses: la renuncia de Mons. Pedro Martínez a su cargo de obispo en la diócesis de San Luis, Argentina.

Para quienes no conozcan estas tierras eclesiales australes, la diócesis de San Luis era -hasta el momento- algo así como la aldea de Ásterix: fundada en 1934, llegó a tener un enorme crecimiento con Mons. Laise, obispo capuchino (el único que decidió no permitir la comunión en la mano en su diócesis, publicando incluso un libro), para, luego, dar lugar a dos obispos hasta hoy: Mons. Lona (2000-2011) y Mons. Pedro Martínez (2011-2020), quienes -al menos en el plano doctrinal- seguían la misma línea.
Según fuentes cercanas al caso y al mismo Martínez, la renuncia se habría dado no espontáneamente, sino a partir de una visita pastoral enviada por la Santa Sede en diciembre de 2019, en la persona de Mons. Tróccoli, (obispo uruguayo y uno de los que intervino en la destitución de Mons. Livieres, ex-obispo de Ciudad del Este) y del llamado a Roma del mismo Martínez, el 11 de Marzo de 2020.
Las razones serían:
– Su interpretación de “Amoris laetitia conforme al Magisterio de Familiaris consortio, etc.
– No innovar respecto de impedir la comunión en la mano en su diócesis.
– Impedir las “monaguillas” en el altar.
– Continuar con un clima general de “conservadurismo” tanto en la diócesis como en el propio seminario.
Es verdad que Mons. Martínez, hacía sus esfuerzos por mostrar cambios, pero seguía desentonando.
Hoy es obispo emérito.
Que no te la cuenten…
P. Javier Olivera Ravasi, SE