China comunista -la que pactó con Bergoglio- prohíbe a padres de familia enseñar religión a sus hijos en encierro
junio 17, 2020
(Transcrito de ReL)
¿La URSS en 1920? No, ha pasado un siglo, estamos en 2020, en plena pandemia de coronavirus, en un mundo de i-Phones rastreables y comunicaciones globales instantáneas. Pero aún se repiten las viejas tácticas de un siglo antes: la carta que el colegio comunista envía a los padres prohibiéndoles transmitir la religión a sus hijos, amenazando
con sanciones a quien lo haga y animando a unos padres a delatar a
otros o a cualquiera (abuelos, catequistas, amigos) que acerque la fe a
los menores de edad. Los padres han de firmar la carta, para constatar que se dan por enterados.
Una de estas cartas ha llegado al equipo de la agencia misionera AsiaNews en China. Se trata de la carta que han enviado a las familias de la Escuela Media n° 6 de Xilinhaote (también llamada Xilinhot), una ciudad de 250.000 habitantes en la región china de Mongolia Inferior.
Con fecha de
25 de marzo de 2020, en lo más duro de la pandemia del coronavirus, las
autoridades de la región de Mongolia Inferior aún tienen tiempo y ganas
de asegurarse que nadie acerca ninguna religión a los niños, no sea
que recen para que sus abuelos no enfermen o para que acabe la pandemia.
La carta usa expresiones clave que hay que saber entender bien, por ejemplo:
– “los estudiantes están tenidos a recibir voluntariamente las ideologías patrióticas, colectivas y comunistas” (significa que serán adoctrinados en ideología comunista obligatoria en las clases, lo quieran o no)
– “formarse un punto de vista científico sobre el mundo y sobre la vida” (el
“punto de vista científico” al que se refieren es lo que las
autoridades del Partido consideren científico, incluyendo la ideología
comunista, que se considera científica)
– “durante
la permanencia en la escuela, los estudiantes no pueden ni participar a
las actividades religiosos, legales o no, ni usar signos religiosos” (no
se refiere sólo a horas de clase o de patio, sino también al tiempo en
casa o fin de semana; es ilegal llevar los hijos o nietos la iglesia,
mezquita o templo el fin de semana, incluso en los templos legalizados)
– “Los padres u otros no deben obligar a los estudiantes a profesar una religión ni participar en actividades religiosas” (es
decir, está prohibido a padres o abuelos enseñar a rezar a sus hijos,
llevarlos a misa, hacerles guardar ayunos o poner velas a iconos, etc…)
– “la escuela tiene el deber de educar a los estudiantes que participan en actividades religiosas” (es
decir, profesores, funcionarios y hasta compañeros han de detectar a
los niños religiosos, denunciarlos y re-educarlos para que dejen de ser
religiosos, y denunciar a los padres o abuelos para que sean castigados)
– “aquellos que no cambian actitud serán entregados a las oficinas competentes para hacer cumplir las medidas” (amenaza de expulsiones, multas, perder el trabajo, o incluso cárcel o campo de re-educación)
– “Los
padres y la escuela deben permanecer en estrecha colaboración, respetar y
poner en práctica estas normas, luchar contra la infiltración y la
intervención de la religión en la educación” (padres, maestros y
trabajadores han de colaborar y buscar y denunciar a las personas
religiosas)
En los últimos años, en toda China se da un mayor interés entre los jóvenes por la religión, incluyendo el cristianismo. Como respuesta, las autoridades en todo el país han publicado unos “Nuevos reglamentos” sobre actividades religiosas que impiden cualquier catequesis o educación en la fe a los menores de 18 años y su entrada en lugares de culto, asimilándola
así a actividades moralmente sucias y peligrosas. Siendo un país
enorme, en algunas regiones estas prohibiciones se cumplen más a
rajatabla y en otras las autoridades locales le dedican menos interés.
En Mongolia Interior, desde 1990 a 2010 las autoridades dejaron actuar a la comunidad cristiana de la región, que fue creciendo. Se consolidó una iglesia católica clandestina en
la diócesis de Suiyuan, con unos 30.000 fieles, 35 sacerdotes y 90
religiosas. Celebraban su fe en casas y locales pequeños y no llamaban
la atención. A partir de 2012 las autoridades empezaron una nueva etapa de vigilancia anti-religiosa, deteniendo sacerdotes y acosando a catequistas. En verano de 2019 las autoridades se esforzaron en limitar al máximo a los peregrinos católicos que acudían al santuario de la Montaña Mozi, bloqueando los caminos y disuadiendo a los viajeros.
Mongolia Interior es una enorme región china, fronteriza con Mongolia, con 24 millones de habitantes, de los que el 80% son chinos han, y sólo un 17% son de etnia mongola. Sin
embargo, en número absolutos, hay más mongoles aquí (4 millones) que en
la Mongolia independiente, donde solo viven 2,8 millones de personas.
Carta a los padres en la Escuela Media nº6 de Xilinhaote el 25 de marzo de 2020
En mérito a la participación de los estudiantes de la Escuela media n° 6 Xilinhaote
Carta a los padres: Al fin de garantizar la línea educativa socialista, mantener
el orden en la educación en la escuela, les informamos, en conformidad a
la Constitución de la República popular china, a la Ley sobre la
educación de la República popular china en mérito al Partido, las
diferentes etnias, la religión y las políticas educativas, tomando
también en consideración la realidad de la escuela, que:
La
escuela socialista utiliza el marxismo, el pensamiento de Mao, las
teorías de Deng Xiaoping, el pensamiento de Xi Jinping sobre el
socialismo para una nueva era para educar a los estudiantes,
transmitir los conocimientos científico-culturales, formar a los nuevos
socialistas que tienen grandes aspiraciones, integridad moral, que están
culturizados y con un fuerte sentido de disciplina, prohibiendo todo tipo de actividad religiosa.
Ninguna organización religiosa e individual puede contribuir o instituir las estructuras religiosas dentro de la escuela; está severamente prohibido obligar o inducir a los estudiantes a participar en actividades religiosas.
En el caso de que se verificaran estos hechos, los docentes, los estudiantes y otras organizaciones sociales, individuales están obligados a reportarlos a las autoridades locales y a las oficinas competentes, que tomarán las medidas necesarias en base a las leyes y normas vigentes.
Los
estudiantes son los constructores y los continuadores del socialismo,
por lo cual, están tenidos a recibir voluntariamente las ideologías
patrióticas, colectivas y comunistas, formarse un punto de vista
científico sobre el mundo y sobre la vida. Por lo tanto, durante la
permanencia en la escuela, los estudiantes no pueden ni participar a las
actividades religiosas, legales o no, ni usar signos religiosos.
Los padres u otros no deben obligar a los estudiantes a profesar una religión ni participar en actividades religiosas.
La escuela
tiene el deber de educar a los estudiantes que participan en actividades
religiosas. Aquellos que no cambian actitud serán entregados a las
oficinas competentes para hacer cumplir las medidas.
Los padres y la escuela deben permanecer en estrecha colaboración, respetar y poner en práctica estas normas, luchar contra la infiltración y la intervención de la religión en la educación, garantizando un sano crecimiento de los estudiantes adolescentes.
Firma de los padres
Firma de los estudiantes
Xilinhaote, 25.3.2020