viernes, 30 de enero de 2015

Bergoglio aprobó y bendijo la “marca de la bestia”, llamando chips RFID la bendición de Dios para la humanidad.

En mayo de este año “Papa” Francisco hizo una declaración que conmocionó a todo el mundo.
Bergoglio aprobó y bendijo la “marca de la bestia”,
 llamando chips RFID la bendición de Dios para la humanidad.

Francis dijo: “Hemos examinado las Escrituras a fondo, y de manera concluyente puedo decir que no hay nada que indique que los chips RFID sean satánicos de algún modo. En todo caso, estos dispositivos son una bendición de Dios mismo, concedidos a la humanidad para resolver muchos de los males del mundo.” (http://praisedc.com/1710415/pope-francis-gives-support-to-rfid-chip-implantation-shocking-video)
PRESIONE "MAS INFORMACION" A SU IZQUIERDA PARA LEER ARTICULO


 

La declaración de este llamado “Papa” es una traición a Dios, el colmo de la blasfemia y la mentira. ¡Es un pecado evidente contra el Espíritu Santo!
Bergoglio es un falso profeta con el espíritu del mundo. Hace 20 años, los monjes ortodoxos del Monte Athos dijeron palabra clara de la profecía en el Espíritu de Dios cuando advirtieron insistentemente contra los chips.
Además, las investigaciones de los científicos del mundo indican claramente que los chips RFID tienen toda la pinta de la “marca de la bestia” descrita en el libro de Apocalipsis (véase la investigación del Dr. Carl W. Sanders: trumpetministries.net).
Todos los verdaderos cristianos que se adhieren en su vida a la Palabra de Dios y a la tradición apostólica consideran los implantes RFID la “marca de la bestia”.
Incluso si la Escritura no hablara acerca de la “marca de la bestia”, el sistema satánico que influye en la voluntad del hombre y lo esclaviza, lo coinvertiría en un “biorobot” controlado. Cada uno que habrá recibido tal chip perderá la libertad, la vida eterna y se convertirá en un esclavo del diablo. Y si uno quisiera retirarse de este sistema, no será posible. Los cristianos deben rechazar la implantación del chip con el número 666, aun a costa del martirio.
En la conclusión de su discurso, Francisco ―como jefe del Estado Vaticano― explicó a los presentes su entusiasmo por hacer la implantación de RFID (chip implantado en la mano o la frente) un procedimiento obligatorio para todos los empleados y residentes del Vaticano. Ningún presidente en el mundo, incluso Obama, ha llegado tan lejos hasta la fecha. Todavía no ha sido un anticristo tan radical como Francisco.
A pesar de la imagen piadosa construida por los medios de comunicación del mundo para el pseudo Papa Francisco, ¡sus frutos son evidentes!
Desde que se convirtió en la cabeza de la Iglesia, nunca se ha arrepentido de crímenes homosexuales y pedófilos cometidos por sacerdotes, obispos o cardenales. Por el contrario, ha aprobado la homosexualidad (véase una entrevista con Francisco durante el vuelo). Y ahora, él ha dicho que la “marca de la bestia” es una bendición de Dios, y ha llamado a todos los creyentes católicos a aceptar los implantes de microchips, lo cual es un camino seguro al infierno.
La dirección en la que Francisco guía la Iglesia Católica no es la de Cristo, pero sin duda del Anticristo. El pseudo Papa Francisco es uno de los precursores y un apóstol del Anticristo cuyo objetivo es engañar a tanta gente como sea posible y llevarlos a la condenación eterna.
Francisco ha atraído sobre sí la maldición de Dios: “Si alguien os predica un evangelio diferente… incluso un ángel del cielo … sea anatema.” (Gálatas 1, 8-9)
El Patriarcado Católico Bizantino en el nombre del Dios Trino por este medio advierte y obliga en conciencia a todos los católicos así como creyentes cristianos: “Si alguno recibe la marca de la bestia en su frente o en su mano, será atormentado con fuego y azufre ardiente para siempre” (cf. Ap 14, 9-11). ¡Si alguno obedece al apóstata y hereje Francisco y recibirá el implante del chip RFID arderá en el infierno para siempre!
Declaraciones espantosas del Vaticano apóstata revelan siempre de nuevo que el Vaticano y la jerarquía católica actual se ha alejado de Dios.
Cada obispo y sacerdote deben dejar de mencionar al apóstata Francisco en la Misa. Si no lo hacen, revelan públicamente su unidad espiritual con él. Si dejan de mencionarle y serán expulsados de la estructura apóstata por el consiguiente, que pasen a la clandestinidad con un pequeño grupo de fieles. Esta es la respuesta a la pregunta qué hacer hoy. Si un sacerdote menciona al Papa apóstata, los creyentes están obligados en conciencia a romper cualquier relación con ese sacerdote. ¡Liturgias Divinas celebradas por aquel sacerdote, así como los sacramentos administrados por él no tienen fuerza en los ojos de Dios! Aquel sacerdote, unido con el espíritu apóstata del pseudo Papa, ya no lleva las almas al cielo, sino al infierno.

+ Elías

Patriarca del Patriarcado Católico Bizantino