Por CLAUDIO KUSSMAN.
PROTEGIENDO A CRISTINA.
Como todos sabemos GERMÁN GARAVANO, Ministro de Justicia y Derechos Humanos (para algunos) y miembro del mejor equipo de los últimos cincuenta años, en un rapto de sincericidio hace algunos días, expresó: “No es bueno que se pida la detención de un ex presidente”. Lo hizo en referencia a la situación judicial de CRISTINA KIRCHNER, poniendo en evidencia que lo de “todos somos iguales ante la ley”, en Argentina, es una gran mentira. De inmediato salió al cruce la diputada abanderada de la verdad y la justicia ELISA CARRIÓ, impulsando el juicio político del ministro GARAVANO.
Para no ser menos y no siendo suficiente “la grieta” que nos divide a todos los argentinos, FEDERICO PINEDO Presidente Provisional del Senado salió a defenderlo y con una sabiduría “digna” de un filósofo griego, dijo: “Tenemos que proteger que no haya persecuciones políticas a través de la Justicia”, señaló sobre el papel que tiene que cumplir el Gobierno”. Luego agregó: “no se puede tomar el comentario de Garavano como una presión” y por último remató: “hay un abuso de la figura de la prisión preventiva, porque la justicia tarda mucho en llegar”. En la memoria de todos quedaron perdidos los tiempos en que, este “sabio” en 1991, era Inspector General de la Ciudad de Buenos Aires bajo el gobierno de CARLOS GROSSO. Que anduvo a los saltos junto con JORGE CASTELLS, por la concesión irregular del Campo Municipal de Golf y el Velódromo de Buenos Aires a una empresa fantasma, ASESORES EMPRESARIOS S.A. y que la misma estaba vinculada al Secretario General de la Presidencia menemista ALBERTO KOHAN. Por último, apareció en escena MAURICIO MACRI y por supuesto lo respaldo al GARAVANO. Como para no hacerlo si es el principal beneficiado siempre y cuando la “jefa de la banda” CRISTINA KIRCHNER, siga en libertad y sea candidata en las próximas elecciones. No importa que hizo, para estos políticos no hay diferencia entre el bien y el mal, todo sirve. A todo esto, nada se dice cuando GARAVANO hace “la vista gorda” sobre los abusos y las situaciones irregulares de nosotros, los adultos mayores que tantas veces hemos denunciado en su ministerio. O cuando en soledad y durante interminables e ilegales prisiones preventivas, morimos en las cárceles federales dependientes de su cartera. En su reiterada falacia funcional y humanitaria este “adalid de la justicia” nos responde: “la justicia es independiente y no podemos hacer nada”.
Simultáneamente en los juicios simulados, como si faltaran acusadores, manda a sus esbirros querellantes del estado, para que se sumen a los fiscales y a las querellas de las contaminadas organizaciones de derechos humanos. Esas organizaciones a las que él en su condición de Ministro de Justicia y Derechos Humanos (para algunos) atiende con la especial deferencia de un obsecuente, mientras a nosotros y nuestras familias, nos ignora y miente como si fuéramos nada más que subhumanos.
Claudio KussmanInterno L.U.P 345.349
Servicio Penitenciario Federal
Octubre 10, 2018
“El único vicio que no puede ser perdonado es el de la hipocresía.
El arrepentimiento del hipócrita es hipocresía en sí misma”.
William Hazlitt (1778-1830)
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 10, 2018