jueves, 18 de noviembre de 2010
El cachetazo de Camaño al terrorista Kunkel
La mayoría del periodismo se mostró escandalizada
ante el cachetazo de la diputada Graciela Camaño a un ex terrorista
(Carlos Kunkel) que intento derrocar gobiernos democráticos para
instalar una dictadura de izquierda. Seguramente la diputada no propinó
el cachetazo por los males que este ex-terrorista provocó a la
Argentina.
Mientras
muchos miembros de la sociedad se preguntaban atónitos y sorprendidos
por la reacción de Camaño que aplicó un cachetazo a quién formó parte de
organizaciones terroristas y cometió atentados, ninguno de los
valientes periodistas que hoy critican a Camaño ha preguntado a este
sujeto por qué atentó con sus crímenes a la humanidad entera que es
contra quien atenta el terrorismo del qué este hombre formó parte.
Creo
que la reacción de la diputada no es correcta pero que levanten la voz
por haber estampado con la mano abierta el rostro de un malvado que puso
en jaque a la Nación entera y hoy desde su banca insulta y agrede a
opositores como hace tiempo lo hizo cuando Felipe Solá votó a favor de
la derogación de la resolución 125 es demasiado.
Seguramente
de funcionar la justicia en este país este hombre desearía recibir un
cachetazo porque la condena por sus crímenes de lesa humanidad sería muy
grave y el cachetazo no sería nada.
Estamos
viviendo momentos muy difíciles y luchando contra gente que incita a la
violencia y no tiene límites y para peor no han abandonado los métodos
violentos.´
Cómo indica Ayn Rand, "el
derecho a la defensa propia es moral y parte del principio libertario
de que nadie debe obtener un valor de otra persona usando la fuerza. Por
ejemplo, el ladrón armado actúa en forma inmoral cuando busca obtener
un valor-dinero-amenazando de muerte a su víctima. Pero la víctima no
obtiene un valor al matar a su asaltante, por lo que actúa moralmente al
defenderse. Ningún individuo o grupo tiene derecho a usar la fuerza
contra uno. Si lo hacen, uno tiene derecho a defenderse contra quienes
usan esa fuerza" ("Ni Parásito ni víctima: libre" pag. 196. Por Raúl Costales Dominguez, Ed. El grito Sagrado)
La
diputada Camaño defendió el valor del honor familiar y el suyo, lo
defendió ante el ataque de un ex-terrorista y ella no obtuvo ningún
valor atacando a quien la ofendió porque defendió su honra y la de su
familia y lo hizo en defensa propia ante el violentísimo ataque verbal
de quién acostumbró a ofender los valores más trascendentes de la
humanidad como por ejemplo el valor de la vida humana.
No
hay que rasgarse las vestiduras por un cachetazo aplicado en forma
tardía contra quién ofendió a la humanidad entera y a mi criterio
todavía debe responder por dichas violaciones imprescriptibles.
Alejandro Olmedo Zumarán.
Fuente: Blog del Zorro
Publicado por
La Verdad Histórica de la República Argentina
en
7:10


