EL JEFE DEL PAPA : GEORGE SOROS
George Soros se hace con el control del Vaticano y se jacta de ser “el jefe del Papa”
Tras
pocos meses de la elección papal del argentino Bergoglio, el círculo
íntimo de Soros ya estaba firmemente atrincherado en del Vaticano, dando
órdenes, redactando documentos, planeando la agenda política de Soros
con el poder y la persuasión moral del Vaticano. El movimiento ecológico
global encontró finalmente el elemento clave que le faltaba, la voz de
la autoridad moral. Los verdes ya pueden depositar sus inútiles líderes,
Al Gore, Leo DiCaprio y Michael Moore en la basura.
Tal
como lo demuestra la última exposición de Wikileaks sobre Soros, los
tentáculos del multimillonario enredan políticas y generan caos en
países de todo el mundo a través de las legiones de empleados de su
filantrópica Open Society. Su dinero financia grupos extremistas
buscando derrocar el capitalismo y promover un orden global radical
medioambientalista. Su séquito de asesores abarcan todo el globo en
posiciones de influencia y poder, e implementando su agenda radical.
Si bien la Open Society financia grupos católicos radicales, Soros no había sido capaz de capturar el último trofeo de dominación mundial, el papado, debido a que los dos conservadores Papas anteriores se opusieron a su agenda radical. Hasta ahora
El
movimiento medioambientalista necesitaba desesperadamente un nuevo y
deslumbrante demagogo para empujar la causa del calentamiento global y
silenciar a sus opositores bajo pena de delito o pecado mortal.
El 13 de marzo de 2013, con el súbito e inesperado cambio de régimen en la Ciudad del Vaticano, Soros y sus empleados en la ONU comprendieron que con el nuevo pontífice argentino izquierdista el clima se calentó de golpe y abundaron las oportunidades. George Soros no podría haber imaginado un socio más perfecto en el escenario mundial, el que había estado buscando durante toda su carrera: un gran líder religioso pontificando como autoridad moral en favor del medioambiente, países sin fronteras, migraciones masivas, y movimientos en favor del islam.
El 13 de marzo de 2013, con el súbito e inesperado cambio de régimen en la Ciudad del Vaticano, Soros y sus empleados en la ONU comprendieron que con el nuevo pontífice argentino izquierdista el clima se calentó de golpe y abundaron las oportunidades. George Soros no podría haber imaginado un socio más perfecto en el escenario mundial, el que había estado buscando durante toda su carrera: un gran líder religioso pontificando como autoridad moral en favor del medioambiente, países sin fronteras, migraciones masivas, y movimientos en favor del islam.

Entra
en escena Jorge Bergoglio, el sonriente y completamente misericordioso
argentino. A pocas semanas de la elección de Francisco, el colaborador
de Soros y secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon cumplió
con la visita de cortesía obligada al nuevo pontífice, y Moon supo que
algo había cambiado dramáticamente en el Vaticano. Luego de su visita
papal, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon anunció al mundo,
“Conversamos acerca de la necesidad de avanzar sobre la justicia social y
presionar para que el mundo alcance los Objetivos de Desarrollo del
Milenio (ODM) y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).También
hablamos de la necesidad de que todos nosotros y el mundo avancemos en
dignidad y derechos humanos, especialmente las mujeres y las niñas.”
Escandalosamente, el nuevo Vicario de Cristo electo parecía haber
bendecido los ODM y ODS favorables al aborto, pero este era sólo el
comienzo del golpe de Soros a la Santa Sede.
En
palabras del Vicepresidente de la Fundación Naciones Unidas (otro
beneficiario de Soros), Timothy Wirth, ampliamente conocido por su árbol
de condones durante su puesto anterior en el Departamento de Estado,
dijo: “Nunca hemos visto a un Papa hacer algo así. Ningún otro individuo
tiene tanta influencia global como él. Lo que él hace resonará en el
gobierno de todos los países de constitución católica.”
El
amistoso recibimiento papal resonó entre la elite global. ¡Alleluya!
Francisco dio luz verde a los Objetivos de Desarrollo del Milenio
plagados de aborto, cambio de género, y feminismo, y a su prole, los
ODS.
Jeffrey
Sachs, asesor especial del secretario general de la ONU en el asunto de
los ODM, lleva 30 años en una relación económica como partidario de
Soros, asesor cercano y beneficiario de los millones de Soros. Sachs fue
al Vaticano para bosquejar los planos para el lanzamiento de la
teología del calentamiento global del Vaticano.
Inmediatamente,
la ONU, a través del elenco estable de expertos inculcados por Soros,
comenzó a dominar la agenda del Vaticano silenciando y expulsando toda
visión opuesta a la ciencia sobre el calentamiento global. Felizmente
para Soros y la ONU, el papa Francisco sólo quería “dialogar” con una de
las facciones del debate climático.
El Comité Cerebral de Soros en el Vaticano-El Soñado Equipo Verde

Desde
1989, el economista Jeffrey Sachs trabajó como experto global
itinerante de Soros, promoviendo su controvertida “terapia de shock”
levantando monedas y el control de precios entre otras variadas tácticas
veloces para introducir a los países en la economía de libre mercado,
con resultados mixtos. Sachs se recuperó con la asistencia de Soros,
dirige el Instituto de la Tierra de la Universidad de Columbia, y
reconfiguró su cúmulo de habilidades a modo de un zar de la pobreza,
dirigiendo en la ONU el proyecto de Aldeas del Milenio (Millenium
Villages), contando con una asistencia de $50 millones de parte de
Soros. Ahora, firmemente convertido en experto sobre la pobreza y gurú
medioambientalista, Sachs construyó su feudo en Naciones Unidas con los
dólares de Soros, se convirtió en un experto en pobreza, alarmista
medioambiental, y maquinador maestro de la catástrofe del calentamiento
global.
A
tres meses de la elección de Bergoglio, Jeffrey Sachs, confidente
cercano de Soros, fue destacado como nuevo portavoz del Vaticano,
experto, autor, y porrista de la teología ecológica de Francisco. Sachs
se convirtió en un elemento habitual dentro del Vaticano, con 10
discursos promoviendo los ODS en el Vaticano. Sachs compuso la agenda
medioambientalista del Vaticano, generando el impulso y el consenso para
los ODS. Con el aporte de muchos otros acólitos de Soros en el
Vaticano, escribieron el manifiesto radical del cambio climático del
Vaticano, Cambio climático y nuestra casa común, anticipando el golpe de
gracia, la encíclica papal, Laudato Si.
De
la noche a la mañana, la Santa Sede se convirtió en el centro de
operaciones detrás de la agenda de Desarrollo Sostenible de la ONU a
medida que la agenda del cambio climático ganaba estatus espiritual como
teología medioambientalista de Francisco.
Ha
sido nombrado como economista de Soros y su cara visible. No nos
sorprende que él y Soros hayan escrito libros juntos. Es Joseph
Stiglitz, quien lidera la’ Iniciativa para el Diálogo Político’
financiada por Soros, promoviendo la institución de una “nueva moneda
internacional” y un sistema impositivo internacional. Stiglitz también
ocupa un puesto clave en la Revolución Ecológica de Francisco/Soros,
como miembro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales (PACS) que
alberga y opera como centro de comando del complot ecológico papal.
Stiglitz, al igual que Sachs, trabaja desde hace mucho tiempo como
colaborador y consultor de Soros. Con frecuencia, Soros y Stiglitz
comparten el panel en grandes conferencias globales, y Soros proveyó el
dinero para otra organización radical, el Grupo Socialista Internacional
de Stiglitz. Stiglitz y Sachs también escribieron el manifiesto
medioambientalista radical del Vaticano, Cambio Climático y el Bien
Común, junto con otros aliados de Soros.
También
es interesante y significativo que durante mucho tiempo Stiglitz ha
sido asesor económico de la presidenta argentina Cristina Kirchner y su
esposo, el presidente anterior, ambos peronistas como el papa Francisco.
Infiltrados
exitosamente en el Vaticano, los cercanos colaboradores de George Soros
acechan para llevar a cabo la estrategia medioambientalista de la
izquierda radical, con la bendición y la asistencia de la Santa Sede.
Más acólitos de Soros poblaron el Vaticano.
La Misión para el Control por parte de Soros/Vaticano: Pontificia Academia de Ciencias Sociales

La
Pontificia Academia de Ciencias Sociales sirve como comité de expertos
académicos en el Vaticano. Su canciller, el obispo argentino Marcelo
Sánchez Sorondo, un progresista radical, fue nombrado cuando su
compatriota argentino Bergoglio accedió a la Silla de Pedro, para llevar
a cabo esta agenda extremista.
Durante
los años 2013-2015, la Academia sirvió frenética y efectivamente como
refugio del plan ONU/Soros/ODS que fue lanzado e implementado bajo el
liderazgo de Sorondo cuando abrió las puertas de par en par a los
aliados de Soros.
El
obispo Sorondo desvió todas las críticas sobre la repentina cercanía de
la ONU con el Vaticano. El malhumorado Sorondo salió a enfrentar las
serias acusaciones de que el Vaticano se estaba convirtiendo en una
plataforma para que la ONU promueva sus propios intereses. El obispo
Sorondo defendió a la ONU y recalcó, “las Naciones Unidas no son el
diablo. Más aún, es todo lo contrario.”
Sorondo
parece sugerir que la ONU tiene una misión de Dios. Pero, como reza el
dicho, el diablo está en los detalles y los detalles incluyen el equipo
de Soros.
El
comité cerebral de Soros, Sachs y Stiglitz, lideró la revuelta papal
para promover la agenda de cambio climático de la ONU/Soros con la ayuda
de otros beneficiarios de Soros.
El favoritismo de Soros/ONU en el Vaticano
•
Obispo Marcelo Sanchez Sorondo, canciller de la Pontifica Academia de
Ciencias Sociales (PACS), se sienta en el Consejo de Asesores de la Red
de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de la ONU, junto con Ted
Turner y Jeffrey Sachs. Sorondo fue honrado recientemente por la
Fundación de Naciones Unidas, una de las filantropías de George Soros,
por su trabajo promoviendo los ODS y Laudato Si.
•
Jeffrey Sachs, confidente y colaborador durante mucho tiempo de Soros y
parte de su consejo de expertos, co-autor del documento del Vaticano,
Cambio Climático y el Bien Común. Sachs habló preponderantemente al
menos 9 veces en la PACS del Vaticano sobre la catástrofe del cambio
climático. Soros gastó decenas de millones financiando muchos de los
proyectos de desarrollo de la ONU de Sachs en África.
•
Partha Dasgupta, miembro de la PACS, co-autor del documento del
Vaticano Cambio Climático y el Bien Común. Dasgupta trabajó en el Comité
Externo del Instituto de la Tierra de Sachs, junto con George Soros.
•
Peter Raven, miembro de la PACS, co-autor del documento del Vaticano
Cambio Climático y el Bien Común. Raven colaboró con la investigación
sobre el control poblacional del radical Paul Erhlich, que sirvió de
base para el controvertido y desacreditado libro, “La bomba
demográfica”. Él también trabajó en el Comité de Asesores del Instituto
de la Tierra de Sachs, junto con George Soros. Raven trabajó en el
comité ejecutivo de la Fundación de Ciencias Internacionales de George
Soros para la URSS.
•
Joseph Stiglitz, miembro de la PACS, fue durante mucho tiempo
colaborador de George Soros, co-autor de libros con Soros, recibió
financiación de Soros para la Fundación Socialista Internacional, y fue
por mucho tiempo asesor económico de los presidentes socialistas
argentinos, Cristina y Néstor Kirchner.
•
Hans Schellnhuber, nuevo miembro de la PACS, co-autor del documento del
Vaticano Cambio Climático y el Bien Común. Es un científico alemán
miembro de FuturICT, una organización financiada por George Soros.
También es portavoz y estridente promotor del control demográfico.
•
Naomi Klein, marxista anti-capitalista y medioambientalista radical
invitada por el papa Francisco para liderar una conferencia sobre el
medioambiente en junio de 2015. Klein es miembro de un grupo
medioambientalista financiado por Soros y denominado 350.org. Klein ha
hablado abiertamente acerca de la necesidad de derrocar el capitalismo
y, al igual que Sachs y Stiglitz, habló y apoyó las demostraciones de
Tomen a Wall Street (financiada por Soros) en octubre de 2011.
•
Emma Bonino, el papa Francisco se reunión con Bonino horrorizando y
conmocionando a los católicos. Ella es un miembro preeminente del
Directorio Global de la Open Society Foundation de Soros, su mayor
filantropía. Bonino, una política italiana, es también conocida como la
abortista italiana que ha realizado miles de abortos sin ser realmente
médica. El papa Francisco la llamó “una de las grandes de Italia” que
equivaldría a llamar a Kermit Gosnell (médico acusado por la muerte de 7
niños que nacieron y fueron asesinados), uno de los grandes de América.
Cambio Climático, no catolicismo, en la agenda del Vaticano
Sachs
y sus aliados de Soros tramaron su trabajo en el Vaticano con precisión
estratégica. El 25 de mayo de 2015, el Papa publicó su esperada
exhortación medioambientalista, Laudato Si, que clamó por la aceptación
de los ODS. El 25 de septiembre de 2015, la ONU planeó el discurso del
papa Francisco frente a la Asamblea General de las Naciones Unidas,
urgiendo la aprobación de los ODS que fueron aprobados casualmente ese
día.
Francisco
alardeó orgullosamente que esperaba que su encíclica
medioambientalista, Laudato Si, fuera utilizada para promover la
aprobación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU en
septiembre de 2015, seguido por el Acuerdo de París sobre el Cambio
Climático (Cop 21) en diciembre de 2015. Jeffrey Sachs reconoció que el
papa Francisco y su encíclica Laudato Si hicieron posible tanto la
aprobación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU en
septiembre de 2015 y el Acuerdo Climático en Paris en diciembre de 2015.
Se declara el mandamiento número once: Reducirás tu huella de carbono.
Hacia
fines de 2015, el sindicato de Soros entregó a su patrón, George Soros,
una encíclica papal de 185 páginas sobre el calentamiento global, la
aprobación de los ODS, y más importante aún, luz verde para comenzar la
implementación del Acuerdo Climático de París, la redistribución global
de la riqueza a través de los impuestos a la contaminación en el mundo
industrializado.
Misión Cumplida, Sr. Soros

Soros
y Bergoglio—una pareja formada en los ecosistemas celestiales—. Sus
huellas de carbono se alinean en muchos asuntos políticos. George Soros
es el mayor propietario de tierras de Argentina (medio millón de
hectáreas) con más de 150.000 cabezas de ganado, y también posee una
masiva cantidad de activos financieros argentinos. Jorge Bergoglio es el
primer Papa latinoamericano, un argentino peronista con una gran
preocupación por la economía argentina. Dos caras del peso argentino,
uno nativo, pontífice, con grandes bolsillos en el Banco Vaticano, y el
otro, un poderoso y multimillonario intermediario global con bolsillos
más grandes aún.
Ambos
aman el poder y el caos; Francisco es conocido por su infame refrán
“hagan lío, generen caos”, y Soros por su críptico “disciernan el caos y
háganse ricos”. Ambos hombres comprenden que se hacen más poderosos
cuando las instituciones y los gobiernos son desestabilizados.
Jorge
y George, idénticos ideólogos políticos globales: medioambientalistas,
pro-Irán, pro-ONU, pro-Argentina, pro-migración masiva, pro-mundo sin
fronteras, anti pena de muerte y anti-Trump.
Hoy George Soros es el jefe del papa Francisco.
Es una verdad angustiante.