Francisco, el Papa de la inclusión
Gracias Santo Padre
Esto no habría sido posible sin Vuestra Santidad
Más ahora Señor te has apartado./ Alejaste a tu ungido;/ revocaste tu pacto, y profanado/ su santuario por tierra está caído,/ destruido sus vallados./ Sus defensores todos han huido. (Sal 88) |
Como en muchos países del mundo, el futbol tiene en la Argentina una
inmensa cantidad de seguidores. El raiting de las transmisiones alcanza
marcas elevadas cuando son transmitidos los clásicos futbolísticos.
En el entretiempo de estos partidos, cuando la mirada
de millones de argentinos y simpatizantes de otros países está fija en
las pantallas domésticas, se proyecta desde hace unos días el aviso de
la Presidencia de la Nación que mostramos abajo.
¿Queda alguna duda de que el famoso bautismo cordobés fue perfectamente
calculado para seguir afianzando la neomoral del Nuevo Orden Mundial
Anticristiano?
¿No es claro que muchas personas se sentirán tentadas a pensar que la
Iglesia ha cambiado su posición con respecto al "matrimonio"
igualitario?
¿Alguien puede ser tan ciego como para no haber visto lo que para muchos de nosotros era evidente antes de suceder?
Del Arzobispo de Córdoba no esperábamos nada. Hace rato que tiene un
nido gay en su campanario, cuya paz es sólo violada cuando alguno de sus
integrantes saca los pies del plato; como ha sido el asunto del ex cura
Alesio.
Pero de la curia romana, más precisamente de los que eran marcados como "tradies", no esperábamos lo mismo.
Tal el caso del que fuera conocido como "el pequeño Ratzinger",
cardenal Antonio Cañizárez Llóvera, quien desde la Prefectura de la
Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos
acaba de autorizar la aventura cordobesa.
Pues según informó oportunamente ACI PRENSA,:
Mons. Ñáñez señaló además que este caso “ya lo he hablado y lo he explicado al Cardenal (Antonio) Cañizares, Prefecto de la Congregación para la Disciplina de los Sacramentos, así que ya está en conocimiento de la Santa Sede”.
Lo cual confirma que el responsable último de toda esta abominación se llama nada más y nada menos que Francisco.
Él autorizó, cuando finalizaba su pontificado en Buenos Aires, que el hijo de un famoso travesti fuera bautizado en la Basílica del Santísimo Sacramento. Atreviéndose a retar públicamente a los sacerdotes locales que se habían negado, al punto que hubo de venir un celebrante de la vecina diócesis de San Isidro a consumar la afrenta. Claro, lo hizo a su modo, para no dejar huellas que lo impliquen directamente (Ver AQUÍ).
También ahora, él está detrás de esto, pues no es posible que una cosa así ocurra en la Argentina sin su consentimiento.
La falta de caridad que la Iglesia Jerárquica ha tenido con las madres de Umma, con ella misma, y con los fieles, es difícilmente parangonable.
Las lesbianas han quedado certificadas en su conducta errada por la autoridad de la Iglesia. De más está decir aquí que el Papa ha dicho tal o cual cosa contra el homomonio. Eso no les importa un rábano.
Como ellas misma lo dicen en el asqueante video de abajo, la Iglesia ha dado un paso gigante al aceptar lo que hacen, y por eso recomiendan a los jóvenes, todos y todas, que sigan su desviada conducta.
El desgraciado papel que representó el sacerdote bautizante queda patentizado cuando, luego del bautismo, se aviene a bendecir la medalla de oro que la Presidente de la Nación envió a su nueva ahijada haciendo una excepción a la Ley. Pues esa distinción sólo corresponde al séptimo hijo varón de un matrimonio.
En el bautismo de Umma se han consumado las bodas entre una Jerarquía apóstata y un Estado que está operando la más radical de las revoluciones sobre la sociedad argentina. Bodas que, salvo milagro celeste, pueden terminar de hundir a la Patria en las sentinas de satanás.
"Cuando veáis la abominación desoladora sediendo en el templo de Dios, entonces los que estéis en Judea huid a los montes...", nos dijo nuestro Señor cuando enseñaba a sus discípulos los signos que anunciarán la inminencia de su Parusía.
La abominación se ha empezado a mostrar oficialmente en Córdoba, frente al Altar del Sacrificio, a la vista de Jesucristo Eucaristía y de la Santísima Virgen... ¡Kyrie Eleison, Christe Eleison, Kyrie Eleison!
Él autorizó, cuando finalizaba su pontificado en Buenos Aires, que el hijo de un famoso travesti fuera bautizado en la Basílica del Santísimo Sacramento. Atreviéndose a retar públicamente a los sacerdotes locales que se habían negado, al punto que hubo de venir un celebrante de la vecina diócesis de San Isidro a consumar la afrenta. Claro, lo hizo a su modo, para no dejar huellas que lo impliquen directamente (Ver AQUÍ).
También ahora, él está detrás de esto, pues no es posible que una cosa así ocurra en la Argentina sin su consentimiento.
La falta de caridad que la Iglesia Jerárquica ha tenido con las madres de Umma, con ella misma, y con los fieles, es difícilmente parangonable.
Las lesbianas han quedado certificadas en su conducta errada por la autoridad de la Iglesia. De más está decir aquí que el Papa ha dicho tal o cual cosa contra el homomonio. Eso no les importa un rábano.
Como ellas misma lo dicen en el asqueante video de abajo, la Iglesia ha dado un paso gigante al aceptar lo que hacen, y por eso recomiendan a los jóvenes, todos y todas, que sigan su desviada conducta.
El desgraciado papel que representó el sacerdote bautizante queda patentizado cuando, luego del bautismo, se aviene a bendecir la medalla de oro que la Presidente de la Nación envió a su nueva ahijada haciendo una excepción a la Ley. Pues esa distinción sólo corresponde al séptimo hijo varón de un matrimonio.
En el bautismo de Umma se han consumado las bodas entre una Jerarquía apóstata y un Estado que está operando la más radical de las revoluciones sobre la sociedad argentina. Bodas que, salvo milagro celeste, pueden terminar de hundir a la Patria en las sentinas de satanás.
"Cuando veáis la abominación desoladora sediendo en el templo de Dios, entonces los que estéis en Judea huid a los montes...", nos dijo nuestro Señor cuando enseñaba a sus discípulos los signos que anunciarán la inminencia de su Parusía.
La abominación se ha empezado a mostrar oficialmente en Córdoba, frente al Altar del Sacrificio, a la vista de Jesucristo Eucaristía y de la Santísima Virgen... ¡Kyrie Eleison, Christe Eleison, Kyrie Eleison!
P/D: Dice el dicho: "Por si fuéramos pocos, parió mi abuela". Según
informa Wikipedia (sabrán nuestros lectores a qué atenerse), el nombre
de la niña UMMA significa:
"Comunidad de creyentes del islam que comprende a todos aquellos que profesan la religión islámica, independientemente de su nacionalidad, origen, sexo o condición social".
"Comunidad de creyentes del islam que comprende a todos aquellos que profesan la religión islámica, independientemente de su nacionalidad, origen, sexo o condición social".