Ucrania da plazo de 48 horas a Rusia para explicar maniobras
El Ministerio de Asuntos
Exteriores de Ucrania ha dado un ultimátum de 48 horas a Rusia para
explicar y dar detalles sobre sus ejercicios militares en las cercanías
de la frontera ucraniana.
En el marco de la cláusula 16 del
documento de Viena sobre medidas de confianza y seguridad y los acuerdos
de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE),
Ucrania ha solicitado a la Federación de Rusia aclarar el propósito,
lugar y fecha de la clausura de esos ejercicios, así como el número y el
tipo de las tropas involucradas, se lee en el texto de ultimátum.
“De acuerdo con el documento de Viena,
Moscú debe dar explicaciones claras sobre estos simulacros, 48 horas
después de recibir esta petición, el 26 de abril, antes de las 16H00 en
Kiev”, reza la nota.
Por su parte, en un discurso televisado,
el presidente interino de Ucrania, Oleksander Turchinov, ha acusado a
Rusia de apoyar al “terrorismo” en su país, para después asegurar que
han pasado de las amenazas verbales a la exhibición de fuerza, con el
aumento de su presencia militar en la frontera del este ucraniano.
A su vez, el presidente de Rusia,
Vladimir Putin, ha advertido a Kiev de las consecuencias del uso de
tropas contra el pueblo, y lo ha tachado de un “crimen grave”; pues
durante la jornada de hoy, el Ejército ucraniano ha lanzado una
“operación antiterrorista” contra los manifestantes prorrusos en la
ciudad oriental de Slaviansk.
En respuesta a esta operación castrense,
el ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, ha dado a conocer la
realización de nuevas maniobras militares en la frontera con Ucrania,
aseverando que Moscú está obligado a reaccionar ante la evolución de la
situación.
Las operaciones de este jueves del
Ejército de Ucrania en la ciudad de Slaviansk se han saldado con al
menos cinco muertos entre los manifestantes prorrusos, mientras un
soldado ucraniano ha resultado herido.
Las ciudades orientales de Slaviansk,
Donetsk y Lugansk, en Ucrania se han convertido en escenario de
multitudinarias protestas para reclamar su anexión a Rusia, tal como
hiciera en marzo la península de Crimea a través de un referéndum.
