CABILDO Nº 18/3
MIRANDO PASAR LOS
HECHOS
por Víctor Eduardo
ORDÓÑEZ
DE LA MATANZA A ATENAS
EN medio de empujones, improperios y de algún
que otro golpe de sus empleados, los diputados aprobaron -con más disciplina
que entusiasmo- el proyecto del Poder Ejecutivo de recortes de salarios y
jubilaciones.
DEMÓCRATAS CONTRA EL
DEMOS
No fue todo lo que las
fauces ansiosas de Cavallo esperaban pero obtuvo el oxígeno indispensable para
llegar a fin de año. El personal del congreso se les amotinó a los
legisladores, de tan poca monta que aceptaron entrar y salir a escondidas del
recinto donde casi no pueden sesionar. Esa buena gente -muchos beneficiarios
del sistema de clientelismo en que se basa nuestra democracia-cometió
indudablemente el delito de sedición, pero no purgarán pena; por lo demás si
bien no tenían derecho les sobraba razón, excepto lo dicho sobre su probable
inutilidad y exceso.
He aquí algunos rasgos de la democracia que practicamos, puestos de manifiesto en el episodio: los mandatarios desconocen y desobedecen a sus mandantes; los infractores no recibirán sanciones; los legisladores votan contra los intereses de sus representados. Al respecto es de observar que Cavallo, apenas si escudado detrás de los harapos presidenciales de De la Rúa, no fue elegido por nadie (incluso había perdido las elecciones de la Capital) en tanto el jefe de la nueva oposición -bien que mediatizada por compromisos partidarios- Raúl Alfonsín, que se encargó de contrariar los deseos y necesidades de Cavallo, tampoco fue electo por nadie y posiblemente no lo será nunca más. Curioso nuestro sistema de representación en el que el mecanismo de decisión fue a dar a manos de los más irrepresentativos ¿No habra llegado la hora de que todos, incluso el sistema, se sincere y acabe con su propia ficción?
SALARIO FAMILIAR
Patricia Bulrich,
incansable viandante de todas las calles también callejuelas de la
política argentina, debió reconocer que
había designado a su marido (!) a su hermano en muy altos cargos en la propia
órbita del Ministerio de Trabajo que supo conquistar fuerza de cruzar de
vereda. Admisión que hizo bien a pesar suyo sólo cuando un indiscreto dirigente
gremial lo había denunciado en una asamblea. Claro, cuando al hogar ingresan
más de 11.000 dolares por mes se puede uno solazar con recortes de sueldos ínfimos.
Cosas de la izquierda que tan espléndidamente se lleva con el capitalismo, su
empleador.
MIL ROSTROS Y UN CARADURA
La situación de
Alfonsín es patética. Se opone al gobierno que él mismo contribuyera de un modo
decisivo a llegar y al que, por lo mismo, no puede repudiar; le hace entonces
una oposición de zapa, lo sabotea y lo manosea tanto como puede pero sin
animase a darle un golpe final porque, en definitiva, él también vive de su
creatura. Prefiere las alcobas de su casa a los despachos oficiales, los
susurros telefónicos a las declaraciones públicas, las sobremesas a las
tribunas, para dar sus opiniones y ejercer la influencia que le resta. Por
ahora no puede sino tomar distancias de un gobierno semicadavérico que poco ya
da de sí pero, claro, sin alejarse demasiado porque todas sus posibilidades y
las de la izquierda que encabeza -aunque sin la unanimidad que quisiera- se
centran en el gobierno que repudia pero al que pertenece por numerosos
vínculos. Muy complicado todo tanto para el analista del presente como para el
futuro historiador. Lo cierto es que Alfonsín, hombre de varios rostros, no
puede irse pero tampoco quiere quedarse ya que. permanecer cerca de un elenco
desgastado como el actual, hace perder la escasa renta política que todavía
dispone. Es probable, entonces, que no pueda impedir quedar manchado por el
venenoso desprestigio
en que han caído el gobierno y la alianza que el prohijó, Izquierdista a su
manera, le resulta incómoda la convivencia con el liberalismo hipercapitalista,
que también con su anuencia se ha instalado en la Argentina y que domina todos
sus movimientos y reacciones. Este es el dilema
del ex presidente y todo su progresismo que lo rodea aunque no siempre
l0o acompañe.
CANCILLER DE MATERIAL
PLASTICO
Con cierta
clandestinidad, se tomó momento el canciller Rodríguez Giavarini habría
ofrecido instalar en algún lugar del territorio nacional una base para integrar
el escudo misilístico estadounidense, ello a cambio de una determinada ayuda
económica. De ser esto verdad se ha de concluir que el actual gobierno
liberal-socialdemócrata (por partes iguales) no ve inconveniente de ningún tipo
(ni ético ni jurídico) en vender o arrendar un pedazo de la geografía
argentina. Preferimos no formular juicio de valor alguno sobre semejante
iniciativa porque la adjetivación sería obvia, pero cabe preguntarse si un
gobierno que tiene sus días contados (o, por lo menos, que está limitado por su
precariedad y provisionalidad) tiene el derecho a enajenar parte de la herencia
recibida y que, por lo tanto, no le Corresponde sino resguardarla con el mayor
celo puesto que la Argentina en su conformación alcanzada es de las
generaciones pasadas y de las futuras y no se la puede vilipendiar por un
precio, cualquiera fuera éste. No esperamos que el ministro comprenda -y si lo
consigue, acepte- lo que es la dignidad nacional. Por suerte, siempre a estar a
las versiones, la iniciativa -tan audaz como torpe- asustó al propio presidente
que no se animó a seguir a su tan cercano y estimado colaborador. Para dislates
le basta con Cavallo.
SOFISTA SE ALQUILA
Sólo a Mariano
Grondona se le pudo ocurrir considerar, en una de sus habituales colaboraciones
en La Nación (diario), a los radicales como escrupulosos. No podemos hablar de
los de antes, pero lo que es los de ahora cargan con innúmeras manchas pero no
con la de la escrupulosidad, lo que es tan evidente que no requiere ni admite
demostración. En otro artículo, siempre jugando con esos binarios que le vienen
de la época de su insistente orteguismo, nos informa que el país está en su
actual triste situación porque se encuentra entre dos posiciones vitales o,
quizá mejor, pos y pre vitales, a saber: un modelo económico que no termina de
morir (el malo) y otro que no termina de nacer (el bueno) Cuando por fin -se
supone que al cabo del ajuste presente y de los posteriores si necesidad
hubiere y de espacio se dispusiere- éste se imponga a aquél, la paz y la
prosperidad volverá al país bajo la forma de un capitalismo auténtico, esto es
globalizador y, claro, globalizante. Grondona lanza sus denuestos contra el
estatismo, ya un fantasma, cuyas secuelas aun perviven para nuestro mal
privándonos del placer del paraíso a cuyas puertas estamos y del que Cavallo,
su escuela y prosélitos tienen la llave. La cosa es así de sencilla, y la feliz
resolución del conflicto que nos viene afligiendo, según el proteico
comentarista de marras, desde hace 50 años, se producirá en cuanto entremos por
la cordura de la ortodoxia liberal. Se apoya en el hecho de que Alfonsín tuvo
que huir ante la estampida hiperinflacionaria de fines de su gobierno; en
cambio no parece preocuparle que, luego de tanta buena letra durante más de un
decenio, hayamos caído en la recesión con todas sus consecuencias. Le falla uno
de los términos de su binarismo a este pensador para todo servicio,
precisamente el que se está aplicando ahora, el otro lo descartó como vimos.
Para un teórico del Mercado (y de mercado donde procura cotizarse) la realidad
no importa aunque estalle como una granada en las manos del gobierno y en los
ojos del pueblo.
¿HAY VIDA MÁS ALLÁ DEL
DEFAULT?
Si bien se mira la
Argentina puede sentirse feliz desde que está cumpliendo -cierto es que con
algunas feas máculas- con el régimen democrático en el orden político y con el
sistema liberal en el económico y, en general, adoptó un disciplinado
procedimiento de inserción en el mundo globalizado. Verdad es también que tanta
pulcritud nos cuesta la industrialización conseguida, la tecnología alcanzada,
la pérdida creciente de empleos y la declinación constante y ya casi
estructural ¿No ha llegado el momento de preguntarse porqué y hasta cuándo
tanta disciplina de la que somos las primeras víctimas y si no habrá otra
alternativa que no sea la humillación y la pobreza? ¿Hay vida más allá del default?
No asustarse demasiado: hay vida y también esperanzas.
PORDIOSERISMO CRUEL
Una angustiada
delegación argentina (¿) negocia en Washington un nuevo crédito con el FMI. Le
es indispensable para sobrevivir habida cuenta que el recorte de sueldos y
jubilaciones no tendrá efecto alguno y el que tenga será contrario a lo buscado
ya que la recesión crecerá y la recaudación bajará. En definitiva, la nueva
política de Cavallo, ya exhaustos él y su modelo, no puede consistir sino en
esta mendicidad internacional a que nos someten, una vez más, los fracasados de
siempre a saber: los que copian programas y propósitos extranjeros y
extranjerizantes y los aprovechan hasta la última gota de sangre de los
compatriotas ¿Quién pagará tanta vergüenza y humillación por lo demás
innecesarias de haberse custodiado bien el patrimonio nacional en poder del
Estado?
A todo esto, ese cruel
e irracional programa de ajuste y achicamiento se debía, según se nos dijo en
tono patético, al hecho que la bolsa de los acreedores se habia cerrado para la
Argentina que, por lo tanto, se debía empezar a vivir con lo nuestro. Horas más
tarde se cambió de opinión: de situación porque se voló pronto a Washington
para obtener: nuevos créditos de los que es dependiente el país. La conclusión
sería, entonces, que el plan de corte será innecesario puesto que se consiguió
el dinero para emparejar las cuentas ¿O habrá que rapiñar más para conseguir nuevos
créditos? La economía según Cavallo tiene muchos misterios, entre otros a saber
qué pasó con el blindaje y quien pagó las comisiones del megacanje, los dos instrumentos
que el ministro desechó.
HUELGA EL COMENTARIO
Se llevó a cabo una
huelga general exitosa en cuanto a la adhesión y expresiva en cuanto al repudio
de la sociedad y que ofendió al pulcro elenco aliancista que trata de gobernar
con una desaprensión que es casi una alegría, la peor crisis económica y
subsidiriamente política argentina. La huelga fue en sí, justa por donde se la
mire aunque se le hayan agrupado las diversas izquierdas que buscan un rédito
obvio para insertarse, por fin, en una masa de proletarios, pequeños propietarios
y propietarios que históricamente formaron la clientela del peronismo y a la
que ellas nunca pudieron acceder. Cada cual hace su negocio. El liberalismo
defiende sus postulados como puede porque quiere sobrevivir a los tramos
postreros de su desastre. La izquierda aspira a sustituirla, claro que sin idea
de lo que va a hacer. De alguna manera aquel necesita a ésta y viceversa porque
el liberalismo siempre saldrá beneficiado en comparación con una izquierda que
también fracasó allí donde llegó y ésta se favorece lidiando contra el
liberalismo como adalid de los pobres y presentándose como desfacedora de de
injusticias sociales y como portador de la ética pública. Este juego dialéctico
finaliza en la socialdemocracia donde se reúne lo peor de cada uno pero esto es
un fenómeno europeo que todavía no advino en las economías emergentes ni se
apropió de sociedades cada vez más fragmentadas como las nuestras.
EL SHOW DE LA CARRIÓ
A la diputada Garrió
no le van bien las cosas. Quiso dar un golpe de efecto ganándole a la vanguardia
de la ética -que es donde la izquierda gusta dar sus mediáticas batallas ¡
cuando está en el llano- a los justicialistas y radicales a pro del lavado de
dinero. Para cual reunió a una bulliciosa batía de adeptos -no muy numerosa por
cierto- en el Salón de los Pasos Perdidos de la Cámara de Diputados: con gesto
trascendente y dramático intentó la ficción de adelantar contra viento y marea
el resultado de la investigación que habría llevado a cabo la comisión que
preside. Introdujo un discurso demagógico y obvio y luego dio detalles que no
sorprendieron a nadie porque los nombres y las maniobras allí denunciadas ya
eran de público conocimiento; en realidad fue una recopilación de recortes
periodísticos que la legisladora trató apresuradamente de usar para reponer su
imagen haciendo casi lo único que se puede en estos momentos a saber: tomar
distancia de la clase partidocrática con la que, no obstante, no quiere romper
puesto que de ella y en ella vive y toma legitimidad. Pocos le creyeron y nadie
la tomó en serio porque no se pudo disimular lo falso y truculento de la trama
mediática montada para recuperar la bandera de la ética que sus
correligionarios -incluyendo a la Fernández Meijide y a Alvarez- dejaron caer
tan ignominiosamente.
PlQUETERISMO
A vista y paciencia
del gobierno, en tanto la ex correligionaria Patricia Bulrich es la única que
muestra algo de energía, los piqueteros siguen interrumpiendo calles y rutas
con el inédito placer de anunciar previamente el cronograma de sus sistemáticos
atentados contra el orden público que, a esta altura, ya comprenden tres
jornadas consecutivas de agresiones contra la sociedad. Está claro que se trata
de gimnasia prerevolucionaria en procura de crear condiciones similares a las
que se dieron y utilizaron en los 70. La intención es evidente: desafiar al
poder policial -que es casi el único que se mantiene en pie- en búsqueda del
cadáver que les permita erguirse como héroes de la resistencia (por el momento
no pudieron inventar más que a la hija de la de Bonafini que habría sido
torturada no se sabe por quién, en su propia casa) o algo parecido. Sin embargo
y por las dudas se resguardan llevando a sus más bien módicas manifestaciones
de fuerza a niños y mujeres en tanto los hombres sólo pasan al frente para
insultar o recitar su discurso delante de cuanta cámara disponible encuentren.
Conocido el procedimiento de manejar a los auténticos desocupados al mejor
estilo mañoso de quitarles a los reales beneficiarios sus "planes
trabajar" o subsidios a la desocupación, y es de preguntarse cómo se llegó
a montar semejante estructura de poder por afuera del establecido porque, de hecho,
los órganos de representación democrática -de la que tanto se vanaglorian los
izquierdistas que apenas gobiernan y los liberales que lo hacen como pueden-
han sido sobrepasados por estas bandas residuales de la violencia del pretérito
que, ahora comprendemos, nunca se fue. Aunque también se puede preguntar quien
los eligió a los jefes piqueteros con sus métodos, reclamos y lenguajes, cómo
fue esto que, inesperadamente, volvimos sin darnos cuenta a una democracia
directa de donde se establecería una linea directa entre La Matanza y Atenas. •