TODOS LOS FARSANTES

15:00 (Por Rubén Lasagno) – El kirchnerismo sufre como duelo inexorable la salida abrupta del poder en el 2015. No estaba en sus planes quedarse con las manos vacías. El 2015 debía ser un escalón más. Todo estaba preparado: Scioli-Zannini cuatro años donde el bonaerense sería anulado (o destituido) y luego volvería la dama para quedarse. El plan no era perfecto, pero si muy ambicioso. Báez y López se aprestaban a quedarse con el resto y en el envión aspirador de fondos públicos que pensaban renovar desde el 2016 en adelante, se harían virtualmente dueños del país, para ellos o subrogando los intereses de sus patrones: los Kirchner.

La caída arrastró no solo las expectativas económicas, financieras y de enriquecimiento ilícitos de los actores, sino que, además, se llevó el relato. Y desaparecido el modelo, también se fue el argumento que lo sostenía. Todo esto, si al gobierno nacional le iba más o menos bien, agravaba su restauración.

Al gobierno nacional no le va del todo bien y entonces, el relato destartalado ya en desuso volvió a ser reflotado en calidad de farsa, eje central de toda argumentación K. Y así aparecieron la farsas y los farsantes.

La farsa 1

Ante una veintena de personas Tristán Bauer, director de la película El camino de Santiago: Desaparición y muerte de Santiago Maldonado , presentó la película con guión a cargo de Florencia Kirchner.

El cineasta no dejó sola a la hija de la jefa y la siguió hasta en la farsa del relato y olvidando su arte, se encargó de resaltar una mentira con dotes de pretendida verdad, amañando la muerte de un pobre pibe que se ahogó en un río de Chubut con la “desaparición forzada”, “los 30 mil desaparecidos”, las conquistas mapuches y todo en un punto de convergencia: Macri es genocida.

La farsa 2

Como en el camino de las sociedades políticas las piedras pueden transformarse en flores, éstas en excrementos y viceversa, el kirchnerismo con tropa propia raleada y poco apoyo de los más conscientes, encontraron en sus detractores históricos, los hermanos Saá, los aliados del momento, pero claro, trascendió que “El Alberto” en el ´78 le pidió expresamente por escrito al Almirante Massera que “le aplicara un castigo ejemplar a los subversivos”. Semejante antecedente no encajaba con el relato setentista recortado, mentiroso y horneado en una pseudo ideología más fascista que reivindicadora del kirchnerismo, entonces había que perdonarlo (para no perder la plata y apoyo de San Luis en el 2019).

Y allí apareció la jueza moral de la Argentina espasmódica, Estela de Carlotto, quien sin vergüenza ni arrepentimiento lo abrazó al amigo y muy suelta de cuerpo y sin rubor dijo “Yo de esa carta ya sé. Es un pasado, la oportunidad del cambio hay que dársela a todos“. Y la abuelita K desvergonzada y falta de memoria afirmó “Si uno guardara esos malos recuerdos, pocos quedaríamos de pie. Muchos han cometido errores y luego han vuelto al redil y se los ha recibido como a un hijo prodigo“.

Obvio, así sucedió con Milani, Berni, Bendini, etc.

La farsa III

El piquetero, vividor de los dineros públicos y (él sí) traidor a la patria, Luis D´Elía, dijo, sin red, que “Mauricio Macri debe ser fusilado en la Plaza de Mayo por ser un mafioso y ladrón”.

Aún no hay ningún fiscal que haya iniciado una acción judicial por los dichos del pro-Iraní y mantenido del kirchnerismo más atroz. De todos modos nos mueve a reflexionar sobre las palabras de D´Elía y pensar ¿Cuántos de ellos quedarían en pie si acaso se aplicara la misma receta de “justicia sumaria” a los integrantes del gobierno anterior acusados de robarse el país y traicionar a la Nación?

Este cobarde buchón del estado terrorista de Irán quien junto con Timmerman, Cristina Fernández, Esteche, Milani, Berni, y un zoo bien identificado de verdaderos traidores a la patria, fueron los encargados de firmar el vergonzoso “Memorandum”, habla sin red en un país sin red… y sin justicia.

Ellos o nosotros

Todas farsas y farsantes. Es el relato de los atacados por el síndrome del poder, porque sufren la abstinencia de impunidad de la cual hicieron gala por más de una década y hoy sueñan con volver a reinstalarla. Es raro, extraño, complejo, casi absurdo y perverso pensar que sigan construyendo relatos, quienes aún nos hacen vivir las consecuencias de los desastres de su paso por el gobierno o el entorno faccioso que lo rodeó durante la década (para ellos) ganada.

Lo peor, no es que la jefa espiritual del Modelo y el relato, tenga 75% de la opinión en contra; lo grave es que aún tenga el 25 a favor. Eso implica que la farsa sigue vigente, los farsantes están activos y el público, a pesar de saber que les mintieron, los robaron, los denigraron y los sodomizaron, no se espanta lo suficiente y hay muchos que aún creen que todo puede ser posible.

Lo que está hoy en el poder no es del todo bueno, en eso podemos coincidir, pero si ello implica extrañar lo que nos pasó por más de una década y no recordar que fuimos víctima, estamos ante un problema que excede a los farsantes, somos nosotros mismos, en realidad, la verdadera farsa y deberíamos hacernos cargo. (Agencia OPI Santa Cruz)