VICTORIA Y DERROTA
Luis A Damasco
El
20 de febrero de 1827 las armas
argentinas se impusieron en Ituzaingó al Imperio del Brasil, guerra que la
Patria ganó, triunfando el Valor rioplatense y enseñándoles a los Braganza que
la Banda Oriental no sería su “provincia Cisplatina”, lamentablemente la
diplomacia de logias e intrigas colonialistas del Ministro de Rivadavia, Manuel García, malograron nuestro esfuerzo y
se terminó cediendo ante el enemigo derrotado (algo insólito en la historia
universal). Todo ello orquestado por el
“mediador” inglés Lord Ponsomby, que obviamente hizo prevalecer los intereses
británicos, que implicaban convertir a la Banda Oriental en un país
independiente de ambos beligerantes,
(algodón entre dos cristales” se llamó a Uruguay.
PRESIONE "MAS INFORMACION" A SU IZQUIERDA PARA LEER ARTICULO
No obstante ello, los laureles de la victoria
de Ituzaingó (y como tantos otros) constituyen un preciado trofeo de guerra
ofrendado por el Glorioso Ejército Argentino a la Patria.
Años después, en razón del “valioso”
aporte del Imperio del Brasil al “Ejército Grande” comandado por el Gral. Justo
José de Urquiza, el Ejército Imperial le exige a éste, el ingreso triunfal para
el 20 de febrero de 1852 (aunque la batalla de Caseros había sido el 3 de ese
mes) ya que como el Jefe de las tropas brasileñas, Marqués de Caxias, lo
expresó: “la victoria de esta
campaña es una victoria de Brasil, y la División Imperial entrará en Buenos
Aires con todas las honras que le son debidas y que han sido convenidas con
V.E.” (nótese que fue
previamente arreglada la humillación a la Patria a cambio de, entre otras
cosas, 100.000 patacones), posteriormente informaría satisfecho al ministro de
guerra Souza e Mello: “La 1º División, formando parte del Ejército aliado
que marchó sobre Buenos Aires, hizo prodigios de valor recuperando el honor de
las armas brasileñas perdido el 20 de febrero de 1827”
El doble significado de esa fecha, así como de
otras cosas, es una lamentable constante en la historia argentina; así, de esa
manera, por ejemplo, se ha rotulado y calificado con la palabra
“Patria” a mezquinos zarpazos, a la vulgar politiquería electoral, al
despotismo comunista o al nefando liberalismo; o han llamado “Libertad” a la
mas abyecta servidumbre de la usura financiera internacional.
Se
deben recuperar los verdaderos y únicos significados no sólo de las palabras
sino de entender los acontecimientos
históricos. El que se alza en armas
contra la Nación no es un idealista, el que defiende a la Patria no es un
terrorista, recuperar las Malvinas usurpadas no es “invadirlas” ni es un
“conflicto” es RECONQUISTA, hay un solo 3 de febrero glorioso y es del
Gral. San Martín, un solo 20 de febrero triunfal con los Braganza derrotados, UNA
SOLA PATRIA, que no es ni socialista, ni financiera, ni sindical, y es la
que fue fundada por gallardos caballeros con la espada y la cruz, que echaron
hace siglos las raíces de lo que ES Y SOLO ES la NACIÓN ARGENTINA.