miércoles, 18 de marzo de 2015

CAPITÁN POST MORTEM HÉCTOR CÁCERES, CAÍDO POR DIOS Y POR LA PATRIA

    ANIVERSARIOS
 
Daniel O GONZÁLEZ CÉSPEDES
 
A cuarenta años del Operativo Independencia
El Combate del Río del Pueblo Viejo
"La sangre aún tibia de nuesros Martines, será el plasma
de esta renovada Argrntina" "Monseñor Adolfo Tórtolo

CAPITÁN POST MORTEM
HÉCTOR CÁCERES, CAÍDO
POR DIOS Y POR LA PATRIA
Publicado por Revista Cabido Nº 111
meses Enero/Febrero de 2015-3º Época
EL Operativo Independencia comenzó el 9 de febrero de 1975.  El General de Brigada Adel Edgardo Vilas, en el primer comunicado, expresaba:
"El Comandante de la Quinta Brigada de Infantería pone en conocimiento del pueblo de la provincia de Tucumán, que en el día de la fecha, y en cumplimiento de órdenes expresas de la superioridad, ha iniciado operaciones con efectivos de la Brigada I V y fuerzas de seguridad, en la zona sudeste de la ciudad de San Miguel de Tucumán, con la finalidad de restituir ¡a tranquilidad a sus habitantes, alterada con el accionar de subversivos que pretenden explotar la impunidad que les garantiza la imposición del miedo..( )
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La guerra contra la subversión marxista no ha terminado. Es un gravísimo error, propio de la miopía liberal o de izquierda, circunscribirla al accionar militar. Nosotros no podemos caer en ese error. Nuestro deber es reivindicar y continuar la justa guerra contra el marxismo.
La Fuerza de Tarea Chañi instaló su puesto en el pueblo de Los Sosa, Aconquija, en Santa Lucía, Rayo en Las Fronteritas y el Comando de la Brigada en Famaillá.
Esta Fuerza de Tarea detectó una mayor actividad del enemigo subversivo al sudoeste de su zona de acción. Intensificó el control decidiendo instalar un equipo de combate compuesto por una batería del Grupo de Artillería 5 y algunos cuadros del arma de Infantería. Debía realizar preventivamente un reconocimiento al sur del río del Pueblo Viejo.
El 14 de febrero inició la marcha vehicular desde Los Sosa hasta El Vivero y de allí a pie por el monte de La Florida, hasta las compuertas del río, las que fueron alcanzadas a las cuatro de la tarde.
Luego de un descanso, el equipo de combate inicia el regreso por otro camino diferente al que habían hecho de ida con el objetivo de evitar una posible emboscada. Se lo hizo bordeando el río Pueblo Viejo, por una estrecha senda que corre entre la vegetación alta y tupida.
A la cabeza de la patrulla marchaba la punta de infantería al mando de un teniente, y detrás de ésta, se encolumnaban dos secciones.
A las 17:00 horas el teniente descubrió a un subversivo sobre la senda. Abriendo fuego, se lanzó en su persecución sobrepasando en la carrera a alguien que le disparó a quemarropa. La perdigonada de Itaca le dio de lleno en su espalda. Cayó consciente pero imposibilitado de moverse.
—    "¡Mi Teniente Primero, estoy herido!", le gritó a Héctor Cáceres.
El Teniente P. Héctor Cáceres abandonó su posición a cubierto y se lanzó con denuedo a rescatar a su camarada. Varios disparos lo buscaron, pero no lograron abatirlo. Al lado del oficial herido se tiró cuerpo a tierra con el fin de llevarlo a un lugar seguro.
—    "Quédate tranquilo que ya te saco", le dijo Cáceres; y cuando se disponía al rescate un disparo lo hirió  de  muerte.     Dice  Nuestro
Señor Jesucristo:  "No hay amor más grande que dar la vida por los amigos" (San Juan, 15, 13).
En un último esfuerzo logró impartir la orden: ¡ATAQUEN!
A cuarenta años del Combate del Río del Pueblo Viejo, librado en pleno territorio tucumano, nuestro homenaje, recuerdo y gratitud a quienes libraron la justa guerra contra el enemigo marxista; a esos bravos soldados que lucharon frontalmente sin necesidad de ensuciarse las manos.
Tiene nuestra Patria en el Capitán —Post Mortem— Héctor Cáceres, un modelo de soldado argentino que supo cumplir cabalmente con la divisa de "Dios y Patria... o muerte". •