martes, 19 de julio de 2016

FRANCISCO, CABEZA DE UNA ORGANIZACIÓN FILANTRÓPICA

FRANCISCO, CABEZA DE UNA ORGANIZACIÓN FILANTRÓPICA

¿Qué es la Iglesia para Francisco? ¿Una institución divina o una organización filantrópica defensora de los derechos humanos?

filantropia
“La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy yo como la da el mundo” (Jn 14, 7), dice Jesucristo. Por eso la Iglesia Católica nunca quiso ser considerada una institución filantrópica que agrada a los hombres de todas las épocas, independientemente de las costumbres y prácticas morales de los pueblos.
La paz que la Iglesia da al mundo es la paz de Cristo, y por fidelidad a los principios cristianos los católicos no temen ir en contra de las opiniones de su tiempo.  La necesidad de contradecir convicciones mundanas hace que el cristiano viva lo que Cristo también anunció: “No penséis que he venido a la tierra a sembrar paz: no he venido a sembrar paz, sino espada” (Mt 10, 34).


La Iglesia no cambia ni siquiera una coma de las enseñanzas de Cristo, y esto por fidelidad a Él y a su santas leyes, no por causa de la concepción moderna de la dignidad humana. En caso contrario, cambiaría la posición de la Iglesia según la concepción de dignidad humana de cada época.
Un ejemplo dramático: el mundo predica la dignidad de la mujer por encima de la vida de su hijo… frente a esto la Iglesia no sólo declara: “El dueño de la vida y de la muerte es Dios”, sino que sanciona con la excomunión a la madre que practicó el aborto. Esto, porque la Iglesia no basa su moral en cuestiones de “bien común”, sino en conformidad con los mandamientos de Dios, y en el caso mencionado no se analiza la moralidad del acto según el “trauma de la madre” sino según el mandamiento “no matarás”. Podríamos multiplicar los ejemplos.
El objetivo de la Iglesia es la salvación de las almas y la implantación del Reino de Cristo en el mundo. Y cuanto más la Iglesia logra implantar el Reino de Cristo en la tierra, más se establece la verdadera paz y la dignidad del hombre es respectada. La paz y dignidad, recordamos, según los patrones evangélicos y no los del mundo secularizado en que vivimos.
La preocupación de ser reconocida como una institución fiable delante de la opinión pública en lo que respecta al ámbito de la solidaridad y de la preocupación por los más necesitados es propio de una ONG, y no de una institución divina.
Una vez más, Francisco parecer querer desfigurar la imagen de la Esposa Inmaculada de Cristo y transformarla en una figura laica, empequeñecida y despojada de su esencia sobrenatural. ¿Se puede confiar en las intenciones de alguien que disminuye con sus palabras la figura de la Iglesia? ¿Es posible creer en un líder que rebaja la propia institución que dice estar guiando? Y todavía hay ciegos que no quieren ver…

Recordemos, por lo tanto, los objetivos sobrenaturales que motivan la acción evangelizadora de la Iglesia. Entra aquí→