¿Pactos oscuros entre Mauricio Macri y la corporación Monsanto?
10/06/2016 | "Argentina y Monsanto alcanzan un acuerdo preliminar sobre las semillas y regalías de la soja", indica MercoPress. "Luego de varias semanas de acusaciones cruzadas, Argentina alcanzó un acuerdo preliminar con Monsanto", según los informes, el Gobierno Argentino trabajará para Monsanto realizando controles ilegales sobre los envíos de soja ilegalmente patentada.
Falta de ética
Por Celeste Fassbinder
Gracias a Monsanto el cáncer es la primera causa de muerte en Argentina. ¿Que hacen los ministerios de Salud y Medioambiente? ¿Por qué no se demanda a Monsanto y se le cobra el daño y perjuicio que ocasiona al país?
El gobierno trabajando para Monsanto por una patente ilegal: Añadir un gen tóxico a un vegetal, no es crear una planta, sino contaminar el medio ambiente y a la especie. Por lo tanto, y en lugar de operar para la corporación en defensa de una mentira, el gobierno debería demandar a Monsanto por daños a la salud de los argentinos y la biodiversidad.
"Según el acuerdo, el gobierno argentino será el que lleve a cabo las inspecciones", como parte de un marco adecuado para pagar a las empresas agrícolas su propiedad intelectual", indica MercoPress.
Para el staff de BWN Argentina, "resulta patético que el gobierno de un país presuntamente soberano e independiente trabaje de cobrador para una corporación extranjera, que reclama derechos ilegales sobre una semilla".
Monsanto se tomó atribuciones inconstitucionales y no hubo penalización
Monsanto también "presionó" ($$$) a las compañías navieras para que notifiquen sobre embarcos de productos transgénicos que no posean la "documentación" comprobante del pago de regalías.
Aunque estas inspecciones se consideraron ilegales, no hubo penalización para Monsanto. Incluso cuando hasta los productores transgénicos cuestionaron a la firma estadounidense para sobrepasar los límites.
El Gobierno al rescate del negocio de Monsanto
Dichos controles serán ahora llevados a cabo por el Instituto Nacional Argentino de Semillas (INASE), la institución oficial para inspección de simientes.
Evidentemente, Monsanto aprovechó que el INASE trabajó con un presupuesto muy limitado durante los últimos diez años, y que los 16 miembros de su junta nunca fueron nombrados. La excusa para justificar esta maniobra es que "aumentará el presupuesto y ayudará a designar los miembros de la junta" (funcionales a la transgénia y sus patentes).
Ley Monsanto de Semillas.
Por Diego Ignacio Mur
Finalmente, y como la Justicia rechazó la Ley de Semillas impulsada por Monsanto, el gobierno de "Cambiemos" intentará ahora acelerar "un proyecto de ley para actualizar la Ley de Semillas".
¿A que responde la "actualización"? A que la Ley de Semillas vigente fue aprobada en 1973, cuando no existía la llamada "biotecnología agrícola".
Por lo tanto, el verdadero objetivo de esta Ley es garantizar a Monsanto y otras corporaciones biotecnológicas como Bayer, Dupont, Syngenta, BASF o ChemChina, el permiso de patentar vida, legitimando una practica corporativa que no tiene asidero científico ni legal.
Tras una muy buena campaña de marketing financiada por Monsanto y sus medios de desinformación cooptados, la "actualización" será bien recibida, al reglamentar que "las regalías se paguen sólo al comprar la semilla y no después". obviamente, la nueva Ley legaliza las patentes sobre la vida.
¿Monsanto y Macri con un
proyecto orwelliano contra las
"Malas Prácticas", milenarias?
Por Laura Cohen
La nueva Ley limita la libertad de los productores que optan por guardar semillas de la cosecha para un próximo cultivo - una metodología común autorizada por la ley, pero no regulada -.
Esta limitación está estipulada en el nuevo proyecto de Ley, acorde a la cantidad de granos que pueden guardar y la cantidad de tiempo que pueden almacenarlos.
Esa modificación se ajusta a las críticas de Monsanto contra tales prácticas utilizadas en la agricultura durante miles de años, por considerarlas "malas prácticas".
Esta asociación entre el Gobierno y Monsanto, para atropellar la Soberanía Argentina, responde a un llamado de atención desde Estados Unidos (un país controlado por la Reserva Federal de los Rothschild), donde se advirtió a Macri que su conflicto con Monsanto podría tener "efectos negativos" en el relación entre ambos países.
BWN Argentina
Para el staff de BWN Argentina, "resulta patético que el gobierno de un país presuntamente soberano e independiente trabaje de cobrador para una corporación extranjera, que reclama derechos ilegales sobre una semilla".
Monsanto se tomó atribuciones inconstitucionales y no hubo penalización
Monsanto también "presionó" ($$$) a las compañías navieras para que notifiquen sobre embarcos de productos transgénicos que no posean la "documentación" comprobante del pago de regalías.
Aunque estas inspecciones se consideraron ilegales, no hubo penalización para Monsanto. Incluso cuando hasta los productores transgénicos cuestionaron a la firma estadounidense para sobrepasar los límites.
El Gobierno al rescate del negocio de Monsanto
Dichos controles serán ahora llevados a cabo por el Instituto Nacional Argentino de Semillas (INASE), la institución oficial para inspección de simientes.
Evidentemente, Monsanto aprovechó que el INASE trabajó con un presupuesto muy limitado durante los últimos diez años, y que los 16 miembros de su junta nunca fueron nombrados. La excusa para justificar esta maniobra es que "aumentará el presupuesto y ayudará a designar los miembros de la junta" (funcionales a la transgénia y sus patentes).
Ley Monsanto de Semillas.
Por Diego Ignacio Mur
Finalmente, y como la Justicia rechazó la Ley de Semillas impulsada por Monsanto, el gobierno de "Cambiemos" intentará ahora acelerar "un proyecto de ley para actualizar la Ley de Semillas".
¿A que responde la "actualización"? A que la Ley de Semillas vigente fue aprobada en 1973, cuando no existía la llamada "biotecnología agrícola".
Por lo tanto, el verdadero objetivo de esta Ley es garantizar a Monsanto y otras corporaciones biotecnológicas como Bayer, Dupont, Syngenta, BASF o ChemChina, el permiso de patentar vida, legitimando una practica corporativa que no tiene asidero científico ni legal.
Tras una muy buena campaña de marketing financiada por Monsanto y sus medios de desinformación cooptados, la "actualización" será bien recibida, al reglamentar que "las regalías se paguen sólo al comprar la semilla y no después". obviamente, la nueva Ley legaliza las patentes sobre la vida.
¿Monsanto y Macri con un
proyecto orwelliano contra las
"Malas Prácticas", milenarias?
Por Laura Cohen
La nueva Ley limita la libertad de los productores que optan por guardar semillas de la cosecha para un próximo cultivo - una metodología común autorizada por la ley, pero no regulada -.
Esta limitación está estipulada en el nuevo proyecto de Ley, acorde a la cantidad de granos que pueden guardar y la cantidad de tiempo que pueden almacenarlos.
Esa modificación se ajusta a las críticas de Monsanto contra tales prácticas utilizadas en la agricultura durante miles de años, por considerarlas "malas prácticas".
Esta asociación entre el Gobierno y Monsanto, para atropellar la Soberanía Argentina, responde a un llamado de atención desde Estados Unidos (un país controlado por la Reserva Federal de los Rothschild), donde se advirtió a Macri que su conflicto con Monsanto podría tener "efectos negativos" en el relación entre ambos países.
BWN Argentina