PANORAMA POLÍTICO AL 19 DE SEPTIEMBRE DE 2014.
.- Si algo no se le puede negar a Cristina Kirchner y al kirchnerismo
es la permanente generación de dichos, hechos y golpes de efecto que
arman la agenda diaria, por más que entre estas acciones sea negar la
Ley de Gravedad, explicar la curvatura del círculo, hacer de un tartufo
un héroe homérico, de un señor feudal del peronismo provinciano, un
progresista imbuido de los años 70, de un corrupto, un intachable y
honesto vicepresidente, etc, etc.
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Esta semana acaparó la atención la
cínica declaración de Víctor Hugo Morales en la ponderación de la
holgada, cómoda y segura vida en los asentamientos de emergencia o
villas miseria, que han aumentado hasta lo grotesco, durante la “década
vaciada”; el lanzamiento de un émulo de las “Torres Petronas” en la isla
De Marchi, que
constituirán el edificio de lujo más elevando de América, por parte de
la Presidente en su condición de “arquitecta egipcia”; algo que hace
recordar al Tren Bala a Rosario, que aún espera en el baúl del
kirchnerismo del relato, la impostura y la tergiversación. Hasta de la
misma historia como los casos del ex Monumento a Cristóbal Colón, o la
denigración de “genocida” del Presidente Roca, parte de una generación
que hizo del progreso su norte rector, que consolidó los territorios del
Sur, continuando con lo emprendido por Juan Manuel de Rosas, y que
atrajo oleadas de inmigrantes de todas las naciones del mundo en busca
de un suelo generoso que les abrió la esperanza del progreso y el
trabajo duro; y que dio por Ley, la enseñanza gratuita, libre y
obligatoria en su afán de formar ciudadanos. En
su trasnochada irrealidad, la Presidente lanzó en su doble condición de
madre y jefa suprema del kirchnerismo a su hijo Máximo, a quien se le
desconoce su pasado como político, trabajador o empresario. Sólo en su
condición de “heredero” de Néstor y Cristina fue la primera estrella del
acto en el estadio de Argentinos Juniors, ante 25.000 asistentes
nutridos por La Cámpora, Unidos y Organizados, el Miles de D’Elía, la
Kolina de la tía Alicia, el Movimiento Evita, y un sinnúmero de
grupúsculos que viven al calor de la prebenda oficial. En su discurso,
que culminó en un grotesco puño cerrado izquierdo en alto, el que no
ocupó ni una concejalía en Río Gallegos, patoteó a la oposición y a los
propios pre candidatos del peronismo a que dejaran competir a Cristina
en la elección de 2015. Con bravuconadas propias de un barra brava de
las afueras de Río Gallegos, el
“heredero” Máximo sinceró lo que el kirchnerismo “valora” la
Constitución Nacional, que no permite, sin una reforma constitucional,
un tercer mandato presidencial. ¿Sería posible imaginar que un hijo de
Bachelet en Chile, de Mujica en Uruguay, países donde no existe la
reelección calificaran de “proscriptos” a sus padres porque la Carta
Magna no admite que sean reelectos? ¿Acusando a la oposición de
impedirlo? Ni siquiera una mente afiebrada lo vería posible ni en un
alucinado ensañamiento. Pero, la Argentina ha hecho, con la anuencia de
su sociedad, que aquí todo sea posible, aún la manifestación pública de
exigir que la Constitución sea violada, algo que el kirchnerismo ha
realizado todas las veces que lo ha podido hacer.
En un país, medianamente serio, Máximo Kirchner habría sido denunciado
por promoción del delito de alentar la violación de la
Constitución Nacional. En la Argentina no deja de ser una noticia más.
Como apostilla del esperpento, del tragicómico presente, el “Canciller
del alicate”, Héctor Timerman, amenazó con expulsar al Encargado de
Negocios de la Embajada de los Estados Unidos por declarar que a los
Estados Unidos le agradaría que la Argentina saliera del default. Claro,
como para el gobierno nacional no lo estamos, vaya uno a saber cómo lo
califica en su nuevo léxico, nuestro canciller lo acusó de ser vocero de
los Fondos Buitres y dentro de las bravuconadas a que nos tiene
acostumbrados amenazó con su expulsión. Para no ser menos, la Argentina
apoya el ingreso de Venezuela al Consejo de Seguridad de las Naciones
Unidas que tiene como embajadora a María Gabriela Chávez, la hija del
fallecido Hugo Chávez. Sería
paradójico que la heredera de Chávez vote en el Consejo de Seguridad
apoyada por el kirchnerismo, siendo que Venezuela logra obtener el
premio al país con más violencia e inseguridad ciudadana, camino que la
Argentina recorre a gran velocidad para no ser menos que su modelo
caribeño.
Mientras cortinas de humo son lanzadas por el oficialismo como la
boutade del periodista Morales, o la construcción de la mega torre
kirchnerista; el acuerdo con China, con cláusulas secretas avanza sin
pausa sin que el Congreso conozca lo acordado al igual que lo firmado
con la petrolera Chevrón. En el caso chino, la posible instalación de
una base satelital, convertible en plataforma militar estratégica como
ha sido denunciado, enajena el futuro y augura seguros y complejos
problemas para los próximos gobiernos.
La Ley de Abastecimiento, siguiendo el modelo venezolano, país donde ya
escasea desde la harina para el pan, la pasta de dientes y el papel
higiénico, se votó en diputados, mientras la Presidente, Kiciloff y
ahora el ausente por doce años, el “heredero” Máximo, denunciaron
complots, desestabilizaciones y proscripciones provenientes del
sindicalismo, la oposición, el empresariado que “encanuta” autos, los
fondos buitres y los poderes concentrados del sistema financiero
internacional. En su debut como orador camporista, Máximo, como voz de
Cristina, también apuntó al peronismo, buscando constituir a la Reina
Madre como la gran electora en la sucesión y retirada, ante
gobernadores, intendentes y dirigentes de un peronismo viciado por el
poder que mira de costado y nervioso pero en silencio, la fosa que hoy
la Presidente parece construirles a todos ellos, a quienes controla con
el unitarismo fiscal y el látigo. Hoy por hoy, la oposición no necesita
de campañas duras para limar a un peronismo que el kirchnerismo usó y
usa, pero a su vez desprecia, y que parece decidido a compartir con
ellos la hoguera de la autoimolación. Será la profecía auto cumplida del
kirchernismo cuando lanza la consigna de “irreversible” a lo actuado
desde el 2003, abrazando a todos los acompañantes en la pira funeraria
de la épica trucha y fracasada. Parecería que el kirchnerismo duro desea
compartir su fracaso con aquellos que por conveniencia y apego a las
mieles del poder lo han acompañado desde su llegada al gobierno.
2.- El gobierno del “vamos por todo”, incluido su fracaso, consecuencia
de su impericia, ideologismo trasnochado, y
discrecionalidad autoritaria acusó a Estados Unidos por la suba del
dólar paralelo, buscando conspiraciones planetarias para auto justificar
su propio desastre. En línea, se votó ayer, las reformas a la Ley de
Abastecimiento en un trámite acelerado que le otorga al gobierno la
potestad de intervenir empresas o como admitió la diputada kirchnerista,
Diana Conti, que alguna vez se auto definió como estalinista, que “el
Estado podría intervenir en la cosecha”. De allí a ver a la Gendarmería
asesorada por La Cámpora, ingresando a los campos para hacerse y obligar
a vender los granos, falta un corto tramo. La inconstitucionalidad es
palmaria y las Cámaras empresarias, y Asociaciones Rurales concurrirán
sin duda a la Justicia. Las fuerzas de la oposición en su conjunto
declararon que de llegar al poder, derogarán la Ley. Esto debería ser
ampliado, en un
compromiso público, hacia todas las aberraciones que el kirchnerismo
haga votar, de aquí al final de su mandato, por la sola imposición del
número y no del consenso.
Al igual que el Presupuesto de “ficción” como lo calificó el diputado
Asseff, presentado ante el Congreso por el Valido Real, Kiciloff, el
gobierno avanza aún más sobre los derechos que establece la Constitución
Nacional, la misma por la que juró al asumir en 2011, Cristina
Kirchner. La semejanza con la Venezuela de Maduro, que parecía una
exageración hace un tiempo, hoy cobra vida en la lamentable equiparación
de atropellar. Vale resaltar que para lograr el quórum ayer, el
kirchnerismo contó con el auxilio de “opositores”, entre otros los cinco
diputados de Compromiso Federal, que responden a los Rodríguez Sáa y
dos de los tres que, por Unión Por Córdoba, tienen a José Manuel De la
Sota como su máximo referente. Flaco favor le hacen a Sergio Massa que,
en su búsqueda de presentarse como opositor, los legisladores de
Rodríguez Sáa y de De la Sota hayan sido funcionales al gobierno
nacional. No debemos olvidar que, ya se mencionó que el peronismo
disidente concurrirá a las elecciones primarias PASO con tres
candidatos: Massa, Rodríguez Sáa y De la Sota. Lo actuado ayer por ambos
“opositores” a través de sus diputados, dan una muestra que la
oposición declamada se convierte en una quimera funcional al
oficialismo, al momento de las decisiones fundamentales donde, lo blanco
es blanco y lo negro, no es gris.
Ignacio Bracht.
