jueves, 24 de septiembre de 2015

FRANCISCO, EL NUNCIO Y EL TIRANO


FRANCISCO, EL NUNCIO Y EL TIRANO

Francisco y Raul en perfecto acuerdo

Francisco, el Nuncio y el Tirano

Francisco y Raul en perfecto acuerdo en la reunión habida en Roma en mayo 2015

Armando F. Valladares
En uno de los movimientos simbólicos más importantes del Concilio Vaticano, la Ostpolitik a favor del comunismo cubano, el Papa Francisco recibió al tirano Raúl Castro en un ambiente de cordialidad y sonrisas mutuas, con un apretón de unas manos manchadas de sangre y pidiendo oraciones al líder comunista. Esta es una escena escalofriante y atroz ante Dios y ante la Historia, y marcará indeleblemente el actual pontificado

Como he dicho a los líderes cubanos, leí todos los discursos del Papa y sobre todo los comentarios que hace. Y si el Papa continúa hablando así, voy a empezar a orar de nuevo y voy a volver a la Iglesia. Y no estoy bromeando “( Buenos Aires , 11 de Mayo de 2015, p. 12).
Estas fueron las frases pronunciadas por el dictador que atrajeron la mayor atención. Para no dejar dudas sobre sus principios, el tirano reafirmó su condición de “comunista del Partido Comunista de Cuba” ( Radio Habana , Cuba 10 de mayo de 2015).
Castro recordó cínicamente que los católicos cubanos pueden pertenecer al Partido Comunista de Cuba dado que sus posiciones no son doctrinalmente opuestas y mutuamente excluyentes. Y se le escapó que había hablado recientemente con el atroz Frei Betto, uno de los principales defensores de la Teología de Liberación, amigo personal de Fidel Castro y autor del libro Fidel y la Religión (Vatican Insider, Roma 10 de mayo de 2015).
“Nosotros haremos apóstatas, no mártires” en alusión de Raúl Castro, quizás involuntaria a Frei Betto, por lo que es importante para nosotros conocer el fondo de las declaraciones del tirano en Roma.
De acuerdo con su libro-entrevista, Frei Betto había explicado a Fidel Castro que la mejor táctica a emplear con los católicos era la de no perseguirlos y convertirlos en mártires, sino integrarlos en la Revolución Comunista en torno a objetivos supuestamente comunes a católicos y comunistas. Fidel ya tuvo una intuición acerca de eso. En un discurso hace unos años en la Universidad de La Habana ya había hecho esta rectificación maquiavélica: “No vamos a caer en el error histórico de sembrar el camino con los mártires cristianos, puesto que sabemos bien que el martirio fue precisamente lo que fortaleció la Iglesia. Haremos apóstatas, miles de apóstatas “(apud Juan Clark, Cuba: Mito y Realidad ., Miami-Caracas:. Ediciones Saeta, 1990, pp 358, 658)
Con el fin de efectuar esta corrección estratégica con el propósito de hacer apóstatas, llegaron a  reformar la Constitución comunista para permitir a los católicos entrar en  el Partido Comunista. Su engañosa artículo 54 garantiza a todos el “derecho” a “profesar” y “practicar cualquier creencia religiosa” siempre y cuando se haga “en cumplimiento de la ley [Comunista]” … Por lo tanto, la Constitución abrió las puertas del partido a revolucionarios católicos cubanos, que llegaron a elaborar una “teología de la colaboración.”
Arzobispo Musaró: El pueblo cubano es “víctima de una dictadura socialista que lo mantiene subyugado desde  los últimos 56 años ‘
El P. René David, profesor de Teología en el Seminario de La Habana, en un documento titulado “Hacia una Política de Teología y Pastoral de Reconciliación en Cuba”, pidió “la reconciliación entre el catolicismo y el comunismo”, aclarando que éste “debe ser considerado como una ideología en que el ateísmo no es de ninguna manera sustancial, sino un accidente “( Chrétiens de l’Est , n 51., 3er trimestre 1986, supl. # 11, p. 33).
En vista de este largo proceso de convergencia comunista-católica, uno puede entender que un líder comunista como Raúl Castro sigua siendo comunista y también perseguidor de cristianos auténticos  y al mismo tiempo “profesar” una “creencia religiosa” que coincide con los objetivos del comunismo, o al menos no se oponen a esta ideología que, a su manera, es una religión satánica que odia a Dios y sus mandamientos. Por lo tanto, en sus declaraciones antes mencionadas, la condición en la que Raúl Castro intenta materializar su supuesta “conversión” (“si el Papa sigue hablando así”) es verdaderamente impactante. ¿Hasta dónde va a llegar la ‘diplomacia’ del Vaticano?.

Implícitamente, Castro está diciendo que las declaraciones de Francisco, que lee y comenta con sus secuaces, tienden a los objetivos comunistas o por lo menos no las contradicen. Castro al fin está listo para regresar a una “iglesia” que aparece ante sus ojos, en conformidad con sus propios puntos de vista diametralmente opuestos a la doctrina de la Iglesia, que declaró el comunismo como “satánico” e “intrínsecamente perverso” (Pío XI, Encíclica Divini Redemptoris ).
Arzobispo Musaró: El pueblo cubano son Sobre la situación real de opresión y miseria en Cuba, me permito recordar aquí las valientes  declaraciones, “políticamente incorrectas” dadas por el ex nuncio en La Habana, el arzobispo Bruno Musarò. Las dio el año pasado en su país natal y después de eso – por coincidencia o no – fue retirado de la Nunciatura en Cuba y nombrado nuncio en Egipto. Al describir la situación de la degradación, la pobreza y la opresión del pueblo cubano, Musarò dijo: “El Estado lo controla todo “y” la única esperanza está puesta en escapar de la isla. “Concluyó diciendo que, inexplicablemente,” hasta el día de hoy, más de la mitad de un siglo después, siguen hablando de revolución y ensalzándola mientras la gente no tiene trabajo y no sabe qué hacer para alimentar a sus hijos “( Lecce Noticias 28 de agosto de 2014). Todos esto pone los pelos de punta y estos hechos atroces plantean las más graves preguntas no sólo sobre el dictador Castro y sus secuaces, sino también acerca de la intención de fondo de la diplomacia del Vaticano ( Ostpolitik ) en relación con el comunismo cubano y sus objetivos y metas. ¿Qué se pretende? ¿Hasta dónde llegará todo esto? ¿Cuál es el objetivo final ? ¿Cuáles son las consecuencias para la fe y la integridad de la doctrina católica con estas actitudes tan diferentes de la enseñanza tradicional de la Iglesia sobre el comunismo “satánico” e “intrínsecamente perverso”?
No es casualidad que durante el transcurso del deplorable Encuentro Nacional Eclesial Cubano de 1986 , en el que los obispos cubanos pasaron del diálogo y colaboración a la concurrencia real con el comunismo y sus objetivos socioeconómicos, el entonces arzobispo de Santiago de Cuba Pedro Meurice llegó a reconocer: “Solían considerarnos una Iglesia de mártires, pero ahora nos dicen que somos una Iglesia de traidores(La Voz Católica, Arquidiócesis de Miami, el 14 de marzo de 1986).
el El Paredón , la pared de la matanza donde los católicos murieron gritando ¡Viva Cristo Rey!
el El Paredón , la pared de la matanza donde los católicos murieron gritando ¡Viva Cristo Rey!
Los cubanos en el exilio han escrito libros sobre la Ostpolitik del Vaticano con el régimen de Castro, que describe esta etapa desafortunada. Dos de estos libros, Dos Décadas de Aproximación Comuno-Católica en la Isla-Presidio del Caribe y Cuba Comunista Despues de la Visita Papal que se pueden descargar de forma gratuita en formato PDF en los enlaces que se encuentran al final de este artículo. Yo me sentía incluso obligado en conciencia a escribir docenas de artículos sobre el tema, en una actitud respetuosa pero firme y bien documentada y, en ejercicio de mi derecho como cualquier católico laico, ya que la Iglesia no es una prisión para las conciencias de sus hijos. Además, tengo mis artículos de este lamentable Vaticano de la Ostpolitik con Cuba comunista publicados en Internet. El resultado final del encuentro de Francisco con el tirano es dramático para los cubanos de dentro y fuera de la isla, que se oponen a la dictadura de Castro y anhelan la libertad de Cuba. El tirano Raúl Castro se comprometió a “convertirse” si, desde su punto de vista revolucionario, él sigue viendo coincidencias con los discursos y los comentarios del Papa Francisco.
 Paredon-2 
Mientras tanto, en una dirección diametralmente opuesta recuerdo con emoción que la causa de la conversión de cientos de presos políticos cubanos, incluyéndome a mí, fue el haber escuchado en la cárcel siniestra de La Cabaña en el comienzo de la revolución comunista los gritos heroicos de los jóvenes católicos al estar a punto de morir en el Paredón, el grito de ¡Viva Cristo Rey! ¡Abajo el comunismo! ” Eso sucedió hasta que los comunistas, al darse cuenta de que la sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos, comenzaron a amordazar a los jóvenes cuendo eran llevados al pelotón de fusilamiento.
Esto es lo que narro en mi libro de memorias de unos 22 años en la prisión de la isla. Por eso llamé a mi libro Contra toda esperanza, recordando una frase llena de fe de Abraham citado por San Pablo, que sigue teniendo suma importancia para los cubanos que anhelan la libertad: “Abraham, habiendo esperado contra toda esperanza … no falló en la fe “(Rm 4:18 y 19).
Publicado 01 de junio 2015 por Tradition in Action
 Armando Valladares es escritor, pintor y poeta. Pasó 22 años en las prisiones políticos de Cuba. Él es el autor del best-seller Contra toda esperanza , que relata el horror de las cárceles de Castro. Fue embajador estadounidense ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU bajo las administraciones de Reagan y Bush. Recibió la Medalla y el Premio Mayor para Ciudadanos, por el Departamento de Estado de la Presidencia. Ha escrito numerosos artículos sobre la colaboración de la Iglesia con el comunismo cubano y la “Ostpolitik” del Vaticano hacia Cuba. 
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