viernes, 2 de octubre de 2015

OSKO: EL SEXTO ANTIPAPA CONCILIAR




OSKO: EL SEXTO ANTIPAPA CONCILIAR


¡QUÉ STAMPA LA DEL “PAPA”!

autito


Más trucho que billete de cuatro dólares
Hay noticias que sólo confirman lo que ya sabíamos; pero igual tienen un sabor especial, y generan un cúmulo de sensaciones encontradas; que en algunos casos tal vez andaban bastante desencontradas. Lo que también causan es una fuerte impresión.
El asunto es que, con motivo de la publicación de las memorias del “Cardenal” belga Godfried Danneels, típico espécimen del club conciliar, uno viene a enterarse (o confirmar) que pasan cosas muy raras; como que existe una “hermandad” (al menos una) cuasi secreta o algo así que actúa dentro del grupo de personas que fungen como Cardenales, y que dicha “hermandad” se reúne secretamente con el fin de preparar la elección del futuro “papa” (conciliar, obviamente) y que lo hacen ¡¡¡ con una antelación de años !!!



Al menos eso es lo que Danneels confiesa que ocurrió con la elección de Bergoglio; y dice mucho más, ya que revela que quien organizaba las reuniones de las que él, entre otros, tomaba parte era nada menos que el “Cardenal” y masón Carlo María Martini, personaje que se encuentra decorando el Oriente Eterno desde no hace mucho tiempo.



La versión electrónica del prestigioso medio italiano LA STAMPA, por medio de uno de sus periodistas relata que:

“La elección de Jorge Bergoglio fue el resultado de reuniones secretas de cardenales y obispos, organizadas por Carlo María Martini, celebradas por años en St. Gallen, Suiza.”

La Stampa dice, además, que:

“Según los autores (de su biografía), Danneels asegura que ese grupo de obispos y cardenales, han trabajado durante años para prepararse para la elección de Francisco”.

Y sí…, viendo las correrías de Bergoglio, uno piensa que es absolutamente entendible la necesidad de una preparación adecuada.

El articulista de La Stampa da algunos otros datos interesantes, como por ejemplo que los complotados le hacían oposición al predecesor de Bergoglio, Joseph Ratzinger. O sea, una típica pelea entre orcos. Hay orcos conservadores, medio conservadores, orcos progresistas e incluso ultra progresistas, pero son todos orcos y ninguno es bueno, ni tiene “corazón tradicional” como creen “cándidamente” Monseñor Fellay y no tan “cándidamente” el Obispo de la Rosa.

Estaba promediando este artículo cuando encontré que el “espejo” de Non Possumus, esto es SYLLABUS ERRORUM (que haciendo honor a su nombre continúa coleccionando imposturas y errores… propios) se apresuró a publicar sobre esta misma cuestión. http://syllabus-errorum.blogspot.com.ar/2015/09/francisco-una-eleccion-preparada.html

Ahora bien. Mucho antes de esto, en el libro “El Gran Reformador”, su autor Austen Ivereigh revelaba exactamente lo mismo que acaba de publicar LA STAMPA.

En “El Gran Reformador”, puede leerse cómo un grupo de cuatro cardenales liberales (Walter Kasper, Karl Lehmann, Godfried Danneels y Cormac Murphy-O´Connor) se asociaron para orquestar (obviamente de manera ilícita, cosa que el libro no dice) una campaña a favor de la elección de Bergoglio, después de que éste último aceptó ser el beneficiario de dicha campaña.

De manera que Danneels aparece mencionado en el libro de Ivereigh y en su propia Biografía, como es lógico.

Ivereigh nos cuenta, además, que Bergoglio, no ignoraba la “campaña” que operaba en su favor, y que aceptó ser el beneficiario de eso que, más que de “campaña”, merece el nombre de confabulación.

Se explica ahora mucho mejor que Bergoglio hubiera comenzado a tomar clases para mejorar su “italiano” unos dos años antes de lo que terminó en su “elevación” al Trono Petrino.

Extrañamente de esto último Syllabus-Errorum no hace ni la más mínima mención, pero en cambio sí le da espacio al hecho de que la “hermandad” de “cardenales” también se ocupaba de hacer oposición a Ratzinger. Danneels admite que actuaban mafiosamente.

Según parece, Austen Ivereigh es un gran admirador de Bergoglio; que incluso acudió al Vaticano para entregarle personalmente un ejemplar de su libro, posiblemente sin caer en cuenta de las consecuencias que se siguen de lo narrado en el capítulo 9, cuyo título es “El Cónclave”.

De ser cierto todo esto, y parece que es muy cierto, ¿pondría un manto de sombras (conforme el actual reglamento en uso en la Iglesia Conciliar) sobre la legitimidad de la elección de Bergoglio?

Por supuesto que lo mismo valdría para el caso de que hubiera ocurrido en la Iglesia Católica, ya que se trata de una práctica que parece ilegítima.

A los “cardenales” puede aplicárseles, con cierta ironía (o sin ella), aquello de “Hombres de poca fe”. Al menos en lo que se refiere a los beneficios de someterse a la presencia e inspiración del Septiforme Espíritu en el cónclave.

Todo esto, obviamente lo estoy planteando asumiendo por un momento, términos muy diferentes de los que habitualmente esgrimo al afirmar que la Sede Apostólica se encuentra en estado de Vacancia.

A la vista todo esto caben, me parece, algunas reflexiones.

Dado que parece que ocurrió lo que dicen que ocurrió, y que esos hechos son admitidos por partidarios del señor Bergoglio, algunos de los cuales parecen ufanarse (Danneels lo hace), y que todo esto da pie para jugar un poco con la actual situación, me parece útil, oportuno y conveniente dejar de lado por un momento, los habituales argumentos de FE y DOCTRINA.

Y también dejar momentáneamente suspendidos los criterios que usualmente se mencionan, aquí o allá, para establecer que quienes FALLAN en la FE pierden IPSO FACTO su condición de miembros de la Iglesia; que siendo NO MIEMBROS de la Iglesia, es imposible que sean CABEZA de la misma, razón por la cual vacan TODOS los cargos apostólicos que pudieran pretender ostentar. Se suele decir que esas personas que FALLAN en la FE, o que se encuentran A FIDE DEVIUS, o que son herejes públicos, carecen en razón de sus herejías de la habilidad para asumir lícita y válidamente cualquier cargo en la Iglesia Católica, y que por tanto, aquellos de dicha condición que fungen en algún cargo lo hacen en carácter de usurpadores de tales cargos y consecuentemente, también usurpan la jurisdicción inherente a los mismos, o bien que la ejercen de manera ilegítima e inválida y que por lo tanto todos sus actos son írritos, o NO acontecidos.

Personalmente, me importa un bledo lo que ocurre con los cargos de la Iglesia Luterana. Digo… lo que hacen con ellos; quiénes los administran, etc. etc. El mismo estado de ánimo se aplica a la secta conciliar.

No obstante (ya que los de la secta conciliar se empecinan en aparecer ante el mundo como si ellos fuesen verdaderos católicos), usando lo que los mismos modernistas o conciliares aceptan respecto de la elección de un pontífice (La Constitución Universi Dominici Gregis, que es la que rige esos conclaves) y que dicha norma es usualmente admitida como tal por casi todas las personas que dicen ser o llamarse CATÓLICAS, podría  afirmarse que Jorge Mario Bergoglio, alias FRANCISCO, ha sido elegido de manera FRAUDULENTA, violando parte de ese reglamento.

Cuando me aprestaba a finalizar el presente escrito, se me ocurrió ver qué piensa cierto “caminante”, de modo que me arrimé a su fogón (siempre con sus agradables dos sillones y sus (doblemente agradables) dos wiskys, y me encontré con un artículo que lleva por título este:

“¿LO ELIGIÓ EL ESPIRITU SANTO?”


La emprendí decididamente con el mencionado artículo para darme cuenta que hay un solo párrafo de autoría “wanderiana” y que es verdaderamente “delicioso“; dice así:

“Para los neocones que todavía afirman que al Papa lo elige el Espíritu Santo, aquí dejo la traducción de un artículo en el que se demuestra que a Bergoglio, al menos, lo eligió una mafia de cardenales, según la confesión del líder de los mismos.”

Recomiendo a los lectores que no se pierdan los comentarios. Algunos son desopilantes. Imperdibles.

El escándalo aumenta a velocidad exponencial ya casi llegando al “fatídico” mes de octubre donde tendremos el mucho más fatídico aún (eso se espera) “SINODO” de la familia. Algunos auguran cismas (¿Dónde?, ¿en la iglesia conciliar? Pues, sería normal; después de todo, es lo que ocurre siempre con las herejías, se dividen y subdividen) y calamidades diversas… ¡AY!

Pero dejémonos de tantas vueltas; no vale simplemente, porque de la iglesia conciliar y oficial nada vale. Se trata de una banda de apóstatas.

Pero además, y vuelvo un poco al sentido común de la posición que habitualmente defiendo: es archisabido que no sólo CARLO MARIA MARTINI era masón.

De manera que, por todo esto, se torna indudable que JORGE MARIO BERGOGLIO es tan Papa, como pudo haber llegado a serlo en el año 1903 el Cardenal RAMPOLLA del TINDARO, el Topo Gigio en la década de los 70, o… una actriz de cine dentro de dos años…

Dése a conocer.

Publíquese.

Archívese.

Y a otra cosa mariposa.