OBJETIVO DEL VATICANO II : ¡LA DESTRUCCIÓN DEL SACERDOCIO!
la destrucción del sacerdocio, el objetivo del vaticano II
El sacerdote asesinado.
(De un dibujo de petit journal N ° 361- 1897)
(De un dibujo de petit journal N ° 361- 1897)
Este objetivo se logró, esto hay que remacharlo una y otra vez.
Los trabajos de Rore Sanctifica son convincentes y no han sido refutados nunca.
El objetivo del enemigo llegó a lograrse. Era importante, sin embargo que hubiera tranquilidad en todas partes! Peor
aún, había que hacer todo lo posible para poner señuelos que
distrajeran a la gente, tal como la fábula de un Pablo VI que habría
sobrevivido hasta nuestros días o el embeleco materialiter – formaliter. Tenemos que tener presente la única realidad que persiste desde hace 50 años: la destrucción irreversible del sacerdocio.
El Concilio de Trento nos había enseñado que nuestro señor jesucristo
creó los sacramentos y entre la Resurrección y la Ascensión dio su
enseñanza a los Apóstoles acerca de la materia y la forma de los
sacramentos.
El Concilio de Trento
Los ritos católicos nos aseguraban de su validez y de sus efectos eficaces. No había ninguna razón para cambiarlos.
Entonces ¿por qué los han cambiado? Sólo hay una razón: para reemplazarlos por ritos inválidos y nulos.
Para
entender la gran lucha que se desarrolló para destruir el viejo ritual
de la consagración de los obispos y su sustitución por un nuevo ritual ontológicamente inválido, abajo le ofrecemos un enlace de una cronología de los acontecimientos ocurridos hace desde hace más de 150 años. Este
enorme trabajo, detenido en 2007, nos permite comprender las muchas
intervenciones internacionales que se hicieron para lograr destruir y reemplazar.
Dicha cronología merece una seria meditación para comprender la lucha que hubo entre el verdadero Vicario de nuestro señor jesús Cristo, y los militantes en el campo enemigo, todo bajo la mirada de la Santsima Virgen María, madre
de la iglesia y del clero, especialmente del episcopado, constituído
por los obispos sucesores de los apóstoles, en cuya conciencia quedaron
grabados [los ritos sacramentalrs] después de la ascensión. Ella sabía muy bien sus debilidades, su valentía, su amor a Dios. ¡Era su madre!
Unámonos desde el campo de la la Verdad, en el que estamos, a los apóstoles de la Verdad:
Los “obispos” conciliares creen que son obispos, nos hacen creer que son obispos, pero son los obispos de la secta conciliar y en todo caso no son Obispos Católicos. Sus consagraciones son inválidas, sus ordenaciones no son válidas, sus sacerdotes no imparten gracia y no absuelven los pecados.
CRONOLOGÍA
Ante todo debe ponderarse cuidadosamente la cronología cuyo enlace les damos a continuación.
Les rogamos que SE DÉ absolutamente la más amplia difusión a esta cronología.