domingo, 1 de noviembre de 2015

LA «IMPOTENCIA» DE DIOS SEGÚN FRANCISCO


LA «IMPOTENCIA» DE DIOS SEGÚN FRANCISCO

Un malhablado de temer, afable divulgador del gnosticismo
por Alejandro Sosa Laprida

Desconcertantes palabras las de Francisco en su homilía del 29 de octubre en la Casa Santa Marta. Transcribo un extracto y lo cotejo luego con un pasaje del Evangelio de San Mateo :

« El don es el amor de Dios, un Dios que no puede separarse de nosotros. Esa es la impotencia de Dios. Nosotros decimos: ‘‘¡Dios es poderoso, lo puede todo!’’. Menos una cosa: ¡separarse de nosotros! En el Evangelio esa imagen de Jesús que llora sobre Jerusalén, nos hace comprender algo de este amor. ¡Jesús ha llorado! Ha llorado sobre Jerusalén y en ese llanto está toda la impotencia de Dios: su incapacidad de no amar, de no separarse de nosotros. […] El más malo, el más blasfemador es amado por Dios, con una ternura de padre, de papá. […] Dios llora por los malvados, que hacen tantas cosas feas, tanto mal a la humanidad. Espera, no condena, llora. ¿Por qué? ¡Porque ama!»


Desafortunadamente para Francisco, sus palabras no se condicen en absoluto con estas otras de Nuestro Señor: « Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria rodeado de todos los ángeles, se sentará en su trono glorioso. Todas las naciones serán reunidas en su presencia, y él separará a unos de otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos, y pondrá a aquellas a su derecha y a estos a la izquierda. Entonces el Rey dirá a los que tenga a su derecha: "Venid, benditos de mi Padre, y recibid en herencia el Reino que os fue preparado desde el comienzo del mundo, porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; estaba de paso, y me alojasteis; desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; preso, y me vinisteis a ver". Los justos le responderán: "Señor, ¿cuándo te vimos habriento, y te dimos de comer; sediento, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos de paso, y te alojamos; desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o preso, y fuimos a verte?". Y el Rey les responderá: "Os aseguro que cada vez que lo hicisteis con el más pequeño de mis hermanos, lo hicisteis conmigo". Luego dirá a los de la izquierda: "Alejaos de mí, malditos; id al fuego eterno que fue preparado para el demonio y sus ángeles, porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; estaba de paso, y no me alojasteis; desnudo, y no me vestisteis; enfermo y preso, y no me visitasteis". » Estos, a su vez, le preguntarán: "Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento, de paso o desnudo, enfermo o preso, y no te hemos socorrido?". Y él les responderá: "Os aseguro que cada vez que no lo hicisteis con el más pequeño de mis hermanos, tampoco lo hicisteis conmigo". Estos irán al castigo eterno, y los justos a la vida eterna. » (Mt. 25, 31-46) Un « Dios » que « no puede separarse » de sus creaturas es necesariamente un « Dios » inmanente, un « Dios » conforme a la doctrina del monismo panteísta de la escuela gnóstica, el cual es, por naturaleza, « incapaz » de separarse de quienes no son sino emanaciones de su propia esencia, chispas de la substancia divina que retornarán a ella una vez que hayan tomado conciencia de su verdadera naturaleza, infinita y divina, a través del « conocimiento » gnóstico, cabalístico y luciferino : « Seréis como Dios » (Gn. 3, 5). Hay que abrir los ojos de una buena vez y reconocer este hecho innegable, por más tremendo y perturbador que pueda ser: Francisco no es cristiano, sino un panteísta y evolucionista en la línea de pensamiento de un Teilhard de Chardin… Las siguientes citas nos permiten comprobar la veracidad de esta afirmación :
« Dios es luz que ilumina las tinieblas y que aunque no las disuelva hay una chispa de esa luz divina dentro de nosotros. En la carta que le escribí recuerdo haberle dicho que aunque nuestra especie termine, no terminará la luz de Dios que en ese punto invadirá todas las almas y será todo en todos. » (cf. p. 10: https://www.aciprensa.com/entrevistapapalarepubblica.pdf)
« Yo creo en Dios, no en un Dios católico; no existe un Dios católico, existe Dios. Y creo en Jesucristo, su Encarnación. Jesús es mi maestro, mi pastor, pero Dios, el Padre, Abba, es la luz y el Creador. Este es mi Ser. » (cf. p. 10: https://www.aciprensa.com/entrevistapapalarepubblica.pdf)
« [Dios] quiso limitarse a sí mismo al crear un mundo necesitado de desarrollo, donde muchas cosas que nosotros consideramos males, peligros o fuentes de sufrimiento, en realidad son parte de los dolores de parto que nos estimulan a colaborar con el Creador» § 80
« El fin de la marcha del universo está en la plenitud de Dios, que ya ha sido alcanzada por Cristo resucitado, eje de la maduración universal. » § 83
« Podemos decir que, ‘‘junto a la Revelación propiamente dicha, contenida en la Sagrada Escritura, se da una manifestación divina cuando brilla el sol y cuando cae la noche’’. Prestando atención a esa manifestación, el ser humano aprende a reconocerse a sí mismo en la relación con las demás criaturas: ‘‘Yo me autoexpreso al expresar el mundo; yo exploro mi propia sacralidad al intentar descifrar la del mundo’’ ». § 85
« […] estamos llamados a ‘‘aceptar el mundo como sacramento de comunión […] Es nuestra humilde convicción que lo divino y lo humano se encuentran en el más pequeño detalle contenido en los vestidos sin costuras de la creación de Dios, hasta en el último grano de polvo de nuestro planeta’’. » § 9
« Tenemos que reconocer que no siempre los cristianos hemos recogido y desarrollado las riquezas que Dios ha dado a la Iglesia, donde la espiritualidad no está desconectada del propio cuerpo ni de la naturaleza o de las realidades de este mundo, sino que se vive con ellas y en ellas, en comunión con todo lo que nos rodea. » § 216
« […] pero [las creaturas] avanzan, junto con nosotros y a través de nosotros, hacia el término común, que es Dios, en una plenitud trascendente donde Cristo resucitado abraza e ilumina todo. Porque el ser humano, dotado de inteligencia y de amor, y atraído por la plenitud de Cristo, está llamado a reconducir todas las criaturas a su Creador. » § 83
« […] todos los seres del universo estamos unidos por lazos invisibles y conformamos una especie de familia universal, una sublime comunión que nos mueve a un respeto sagrado, cariñoso y humilde. » § 89
«No puede ser real un sentimiento de íntima unión con los demás seres de la naturaleza si al mismo tiempo en el corazón no hay ternura, compasión y preocupación por los seres humanos. [ …] Todo está conectado. Por eso se requiere una preocupación por el ambiente unida al amor sincero hacia los seres humanos y a un constante compromiso ante los problemas de la sociedad. » § 91
Para mayor información acerca de los desafueros consuetudinarios de Francisco :


« Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. » (Mt. 7, 15-29)