sábado, 25 de abril de 2015

REVOLUCIÓN


REVOLUCIÓN

La revolución sexual es toda una ideología que concita los peores aspectos del pensamiento marxista y neoliberal en lo que respecta a la sexualidad, la persona y el matrimonio, que alcanza su máxima expresión pseudocientífica en el fraudulento «Informe Kinsey» de finales de los años 40, el cual tuvo sus fundamentos ideológicos en Wilhelm Reich  y Herbert Marcuse, que invitaban a experimentar todo tipo de situaciones sexuales.
 PRESIONE "MAS INFORMACION" A SU IZQUIERDA PARA LEER ARTICULO
Primero se postuló la práctica de la sexualidad sin matrimonio: el llamado amor libre. Después, la práctica de la sexualidad sin la apertura al don de los hijos: la anticoncepción y el aborto. Luego la práctica de la sexualidad sin amor: hacer sexo, pornografía, etc. Más tarde la producción de hijos sin relación sexual: la llamada reproducción asistida (fecundación in vitro, etc.). Por último, con el anticipo que significó la cultura unisex, y la incorporación del pensamiento feminista radical, se separó la sexualidad de la persona: ya no hay varón y mujer; el sexo es un dato anatómico sin relevancia antropológica; el cuerpo ya no habla de la persona, de la complementariedad sexual que expresa la vocación al amor; cada cual puede elegir configurarse sexualmente como desee: hombre heterosexual, hombre homosexual, mujer heterosexual, mujer homosexual, transexual, travesti. Había nacido la «Ideología de Género», cimentada en la ruptura del bien que significa los conceptos de persona y matrimonio, y, por tanto, en la progresiva debilidad del vínculo conyugal que llevó al aumento de las rupturas matrimoniales y la desintegración física, psíquica y moral de las personas.
La divisa de la revolución sexual es la de la superación de la familia: ¡La familia ha muerto! Se promueve la emancipación del joven a la edad más temprana posible para vivir de modo individualista, fuera de todo tipo de vínculos estables, que según una idea extrema de libertad, le encerrarían en un mundo insufrible. En cambio, se proclama la bondad de una promiscuidad sexual que se presenta como fuente de liberación frente a toda inhibición.
  http://esperaeldia.blogspot.com.ar/