María Jose Lupertino
Si a ellos no Le Interesa, a quién nos es DEGENERADO Sí
María José Lubertino, titular del Inadi y una vida precaminosa.
REALPOLITIK | 5 de julio de 2009
La funcionaria del Inadi (Instituto contra la Discriminación) María José Lubertino
participó con transexuales durante la marcha del orgullo gay que
terminó con pintadas y daños materiales en el edificio de la Catedral
Metropolitana. El Inadi financió con fondos públicos esta marcha y hasta
tuvo un stand durante la marcha homosexual.
Sus dos hijos son un detalle a tener en cuenta sobre la vida María José Lubertino Beltrán.
Manuel, el hijo mayor sería fruto de la relación extramatrimonial que habría mantenido con el presidente radical Raúl Ricardo Alfonsín.
Su embarazo y la amenaza de Lubertino por desatar un escándalo
mediático por el no reconocimiento de la criatura durante las rebeliones
carapintadas, le habría valido una banca de diputada nacional en el
Congreso de la Nación.
Ernesto, su hijo menor es el resultado de un traumático affaire sentimental con Enrique “Coti” Nosiglia, quién la erradicó de la Unión Cívica Radical y de la posibilidad de renovar su banca.
Hoy se la vincula sentimentalmente con la cantante chamamecera ultrakirchnerista Teresa Parodi,
con las cuales organizaría reuniones lésbicas en el edificio de Callao
741, donde supuestamente solía concurrir la ministra de la Corte
Suprema, Carmen Argibay (ex-pareja de María José Lubertino).
Gracias
a la función pública, María José Lubertino habría adquirió una lujosa
casa en la calle Costa Rica 4471 de Palermo Hollywood. Por dicho inmueble, dicen que pagó la bonita suma de 835.000 dólares.
Una
de las fuentes de ingreso de María José Lubertino sería la extorsión
por parte de su “fundación” llamada “Asociación Ciudadana por los
Derechos Humanos”.
Este
lobby suele “aproximarse” a las personas denunciadas ante el Inadi por
hechos discriminatorios ofreciendo sus “servicios” para “parar la
denuncia frente al Inadi”.
Usualmente, esta asociación lograría “parar el expediente” a cambio de una “contribución” de 3000 pesos aproximadamente.
Un
dato curioso es que la sede de esta “fundación” (que recibiría un
subsidio del gobierno argentino) se encontraría en el primer piso de
Callao 741, edificio propiedad de María José Lubertino. Una verdadera
pinturita.