martes, 30 de octubre de 2012

DECIA EL PADRE CASTELLANI: NO ME GUSTA EL !COMO!

"QUEREMOS VOLVER A LA REPÚBLICA"

Por Fernando A. Castro Pintos 
(castropintos@yahoo.com.ar)

RECORDANDO AL PADRE DE LA CRIATURA
Cuando en la antigua GRECIA se celebraban memorables obras de teatro, un CORO, hacía el relato previo a lo que transformaría COMEDIA en TRAGEDIA. En nuestros días, en el triste presente argentino pasa lo mismo. 
El CORO de la ciudadanía, avizora un final de TRAGEDIA a la escenificación de la protagonista; única actriz de pacotilla, que no quiere ver la realidad; ...
la que se cree dueña absoluta del escenario y por qué no de las cámaras televisivas. 
Esa necedad, desidia e imprudencia en tratar de manejar “la cosa pública”, nos va arrastrando a todos los argentinos a un callejón sin salida.
La falta de LIBERTAD, la falta de respeto por las INSTITUCIONES de la NACIÓN en general y del CIUDADANO en particular, quedaron plasmados en su última actuación teatral .
Pero la Señora se equivoca, como ya se equivocó el difunto idolatrado cuando el CORO sabía que sus candidatos “testimoniales” eran cargos ocupados por sus esbirros ó sicarios del régimen que terminado el sufragio volverían a administrar sus mezquinos intereses.
El CORO sabía que renunciarían.
No todos somos espectadores, que cumplimos a pie juntillas sus dictámenes. 
AQUEL que no tenía escrúpulos, antes de dejar este mundo, pasó los pergaminos a su dignataria y cae muerto dejando para siempre sus sueños de bronce. 
Esos pergaminos guardan la causante de la oscuridad que cubre nuestra Patria; es la madre oculta de todos nuestros males: la IGNORANCIA, la INTOLERANCIA, la PERFIDIA, el FANATISMO, la falta de RAZÓN ó lo que es peor la SINRAZÓN, la INJUSTICIA…estas son las armas que utilizaba el muerto y la viuda ha demostrado gran habilidad en su manejo. 
Son las herramientas del déspota para sojuzgar a todo un pueblo, son los mecanismos que utiliza este gobierno para afianzar SU PODER.
PERO LA VIUDA SE EQUIVOCA.
No todos somos ignorantes, ni intolerantes, ni ejercemos perfidia, ni somos fanáticos de ningún tipo y tratamos de ser lo más razonables posibles para poder INTERPRETAR los HORRORES de este RÉGIMEN. 
Este es el mismo pueblo que en el 2008 dijo BASTA en las urnas. 
Es el CORO que clama por LIBERTAD; es el CORO que exige a las autoridades que volvamos a ser una REPÚBLICA; que necesita de la CONSTITUCION; que se respete al SOBERANO; que se aprecie su esfuerzo y se valoren sus bienes personales.
Es vergonzoso saber que más de la mitad de sus más estrechos colaboradores estén “sospechados” por la Justicia en un común denominador: CORRUPCIÓN.
Es deber de un buen ciudadano hacer no solo aplicar las Leyes sino hacerlas cumplir, dejarlo pasar es una afrenta a nuestra INSTITUCIÓN DEMOCRÁTICA.
Por qué un ciudadano tiene la capacidad para asumir las consecuencias de sus actos y un funcionario público no?
Goza del respeto público aquel que actúa a conciencia y honestidad ejerciendo su albedrío con sabiduría y acierto. 
Nos MARAVILLA el respetuoso y justo con sus vecinos y consigo mismo, ofreciendo su mano para ayudar generosamente sin esperar nada a cambio. 
Nos DESLUMBRA el que posee sentido de la justicia, el que predica con el ejemplo, el que motiva a su próximo entusiasta en el logro de sus más nobles ideales. 
Nos FASCINA la pureza de pensamiento, cuando arroja lejos su costal de piedras de odio, envidia y revanchas que no era más que pesado lastre que lo anclaba en un profundo y oscuro pozo convirtiéndose en un sincero y franco hombre. 
Nos llena de GOZO el que valora a sus semejantes que no juzgan, que tiene personalidad propia, que extiende su mano para levantar al caído, con sensibilidad, con coraje, solidario, con bondad, con respeto, con alegría, con FE, con ESPERANZA, con humildad, con amor propio y para los demás.
SEÑORA PRESIDENTE: 
ASÍ ERA NUESTRA SOCIEDAD. Ud. No se olvidó de enumerar todos estos puntos sino que los esquivó.
Los ARGENTINOS queremos recuperar nuestra sociedad así, como éramos hasta hace unos años atrás, antes que Uds. los K, llegaran al poder en forma deshonrosa. 
QUEREMOS VOLVER A LA REPÚBLICA.