lunes, 11 de marzo de 2013

A MI PATRIA

   
   Por: Alejandro Julio Aliaga

    Ya no entiendo, Señor, yo ya no entiendo,
    ¿Cuál ha sido el pecado cometido?,
    que castigue con tanto sentimiento
    a este pueblo al que llaman argentino 

    ¿Es su cambio permanente de valores?
    Que de honestos han mutado a corrompidos
    por codicias de políticas ateas
    enemigas del bien y de hombres dignos

    ¿Qué ha pasado Señor con los valores?
    Que mis padres me enseñaron desde niño,
    Amar a Dios, a mi Patria y mi familia,
    Hoy por leyes casi todos abolidos

    Ya de Dios no se habla en las escuelas
    Y se sacan los Santos Crucifijos
    En una hipócrita actitud de herejes
    En nombre de una igualdad de indignos

    ¿Y de mi Patria?, Señor, ¿que hay de ella?.
    Muriendo de tristeza, escarnecida,
    gobernada por políticos corruptos,
    por cobardes, criminales y asesinos

    ¿Dónde está la democracia que declaman?.
    ¡¡En su nombre, hay dictadura y  tiranía!!,
    República vaciada de valores,
    Sin Justicia, sin leyes que iluminan

    Es terrible que el destino de Argentina,
    Esté en manos de una tilinga inmerecida
    Que de acuerdo al humor con que amanece
    Destruye algo de ella, día a día

    El Ejército, la Iglesia, la Justicia,
    La escuela, la prensa, la familia,
    Todo ataca, todo ensucia con sus actos
    Y justifica su actitud con la mentira

    Hoy le toca a los Liceos Militares,
    Cuna de hombres que hicieron la Argentina
    Pues a ellos también con su veneno
    pretende matarlos este día

    Forjadores de Reservas de la Patria
    de juveniles Oficiales que algún día,
    dispuestos por el honor jurado
    a su Patria entregar la vida.

    ¡¡Esto molesta!!

    No preocupa la droga que asesina,
    ni la Juventud sin brújula, sin guía
    interesa solamente el clientelismo,
    el desorden sin Patria. La anarquía

    Te preguntaba al comienzo de este escrito
    El por qué de este castigo a la Argentina
    Ahora entiendo Señor porque sucede,
    Por la Infamia, traición, y cobardía

    De este pueblo al que le diste todo
    Mares, cordilleras, llano y serranía
    Un cielo hermoso como pocos
    Pero un pueblo que de Ti se olvida

    Por eso ya no es más una potencia
    Perdimos el honor y la hidalguía
    Del trabajo el esfuerzo y sacrificio
    Por la dádiva, recibida de rodillas.

    Ahora entiendo Señor…..ahora entiendo