A MI PATRIA
por Alejandro Julio Aliaga
Ya no entiendo, Señor, yo ya no entiendo,
¿Cuál ha sido el pecado cometido?,
que castigue con tanto sentimiento
a este pueblo al que llaman argentino
¿Es su cambio permanente de valores?
Que de honestos han mutado a corrompidos
por codicias de políticas ateas
enemigas del bien y de hombres dignos
¿Qué ha pasado Señor con los valores?
Que mis padres me enseñaron desde niño,
Amar a Dios, a mi Patria y mi familia,
Hoy por leyes casi todos abolidos
Ya de Dios no se habla en las escuelas
Y se sacan los Santos Crucifijos
En una hipócrita actitud de herejes
En nombre de una igualdad de indignos
¿Y de mi Patria?, Señor, ¿que hay de ella?.
Muriendo de tristeza, escarnecida,
gobernada por políticos corruptos,
por cobardes, criminales y asesinos
¿Dónde está la democracia que declaman?.
¡¡En su nombre, hay dictadura y tiranía!!,
República vaciada de valores,
Sin Justicia, sin leyes que iluminan
Es terrible que el destino de Argentina,
Esté en manos de una tilinga inmerecida
Que de acuerdo al humor con que amanece
Destruye algo de ella, día a día
El Ejército, la Iglesia, la Justicia,
La escuela, la prensa, la familia,
Todo ataca, todo ensucia con sus actos
Y justifica su actitud con la mentira
Hoy le toca a los Liceos Militares,
Cuna de hombres que hicieron la Argentina
Pues a ellos también con su veneno
pretende matarlos este día
Forjadores de Reservas de la Patria
de juveniles Oficiales que algún día,
dispuestos por el honor jurado
a su Patria entregar la vida.
¡¡Esto molesta!!
No preocupa la droga que asesina,
ni la Juventud sin brújula, sin guía
interesa solamente el clientelismo,
el desorden sin Patria. La anarquía
Te preguntaba al comienzo de este escrito
El por qué de este castigo a la Argentina
Ahora entiendo Señor porque sucede,
Por la Infamia, traición, y cobardía
De este pueblo al que le diste todo
Mares, cordilleras, llano y serranía
Un cielo hermoso como pocos
Pero un pueblo que de Ti se olvida
Por eso ya no es más una potencia
Perdimos el honor y la hidalguía
Del trabajo el esfuerzo y sacrificio
Por la dádiva, recibida de rodillas.
Ahora entiendo Señor…..ahora entiendo
Agradezco la colaboración remitida por el Dr. Gabriel Vénica