Vidal y otras marionetas.
Por Miguel De Lorenzo
En su calamitoso declive hacia las
formas menos dignas de la política, debemos anotar entre otras, la ley
que prohíbe siquiera mencionar un número diferente de los famosos
treinta mil, sus elogiosos encuentros con Carlotto, las concesiones y
privilegios a abuelas, la exención de declaraciones juradas a los
intendentes de la provincia, la prohibición de cualquier ceremonia
religiosa en las escuelas provinciales, la educación sexual integral,
el fervor por la ley pro aborto etc., entre otras..
Ahora agregó una perla majestuosa. Un
médico, Secretario de Salud de Magdalena, Julio César Romero fue
obligado a renunciar por haber escrito que se necesitaban para el
distrito, médicos provida.
La tenebrosa osadía no paso
desapercibida para varias instituciones declaradas pro muerte, digamos
el CELS, amnistía internacional, católicas por el derecho a decidir
etc. y obligaron a un tal Peluso intendente de Magdalena, a echar al
médico, previa queja al secretario de salud provincial y a Vidal que
velozmente bajo el pulgar a la vida y al médico.
Los emisarios de la muerte expresaron
preocupación por la búsqueda de médicos que pudieran oponerse a la
práctica del aborto legal. Curiosa preocupación en un país donde hace
pocos meses se votó en contra de esa ley. Es decir que echaron a un
médico por defender la vida.
Lo echaron por la dudas salga otra ley. Fascinante. Ni a Zaffaroni se le hubiese ocurrido argumento tan estrafalario.
Lo echaron por pensar distinto. Parece que para Vidal, lo de pensar, es delito.
Por eso es posible sostener que la
provincia – también en materia de salud – es gobernada desde afuera
por organismos internacionales, que son las que financian y dan las
directivas a las anteriores. Es decir la Fundación Ford, Planned
Parenthood, FMI, etc., etc.
Alguno
diría que Vidal no es más que una marioneta, sabemos que tales
ejemplares carecen de ideas y de principios inalterables y propios que
orienten sus acciones en la vida y en la política, en ese sentido
estaría en sintonía con su jefe, el Presidente. Claro que ese tipo de
sintonías no enaltece a nadie.
Pero un amigo me apunta que la cosa
viene de lejos, de cuando trabajaba en la ciudad con el abortista
Rodríguez Larreta y editó el famoso manual de perversiones ilustradas,
manual que mantuvo aún contra tantas y tan válidas objeciones.
Es decir, se trataría de una marioneta,
que apoya a las ideologías menos humanas y por tanto más
siniestras, sobre todo las que ordenan pervertir a los niños y jóvenes,
el control de la natalidad, rechaza el culto divino y consiente matar a
los bebes en el vientre de sus madres.
Todo un combo para recordar a la hora elegir.
Eso sí, nobleza obliga, en un gesto
destacable, Vidal no mandó preso Al Dr. Julio Cesar Romero y permitió,
pese a sus temibles antecedentes pro vida, que pueda seguir
trabajando en el hospital. Gracias Heidi
