jueves, 1 de mayo de 2014

Día del Trabajo: la presidente mostró su ignorancia sobre las crisis sindicales

Día del Trabajo: la presidente mostró su ignorancia sobre las crisis sindicales

mayo 1, 2014
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 Ayer, la presidente, al reinaugurar un galpón donde se fabricarán heladeras Siam que costarán dos veces más que en Chile y tres veces más que en los Estados Unidos, trató de convertirse en la abanderada de la segunda industrialización del país, según el gobierno, tan importante como la que protagonizó el general Perón en sus dos mandatos. Sin embargo, la realidad demuestra lo contrario, al publicarse el índice de obreros ocupados, que es el menor de la década y en momentos en los cuales la industria bandera de este gobierno, la automotriz, atraviesa una crisis casi terminal, con suspensiones en casi todas las fábricas. Esto motivó que Ricardo Pignanelli, secretario general del Sindicato de Mecánicos (SMATA), sostuviera que si declara una huelga les hace un favor a las fábricas, que producirían así despidos en forma inmediata.

Otra vez la falsificación del pasado
Guille-3-14-2La presidente aprovechó para condenar a los sindicalistas -en obvia alusión a Hugo Moyano- por convocar a huelgas y ahora a una marcha el 14 de mayo, porque, según su opinión, el país está creciendo, contra la opinión de muchos economistas que señalan que estamos en estanflación. Las críticas presidenciales apuntaron a que los obreros en épocas de abundancia curiosamente realizan más paros y dijo que hace unos días había conversado con Carlos Zannini, quien le contó que en la década de los ‘70, en un sindicato de la fábrica Sitrac-Sitram, integrado por obreros de Fiat Concord y Materfer (la primera fabricaba autos y la segunda material ferroviario), los obreros hicieron una huelga por una cuestión culinaria. En el comedor fabril les sirvieron tres veces en una semana congrio, el pescado chileno del Pacífico, que es poco común que se coma en la Argentina. En realidad, los obreros de Sitrac-Sitram estaban en conflicto por definir si pertenecían a la UOM de Augusto Timoteo Vandor o al SMATA de Dirk Henry Klosterman. Y en el ‘68, antes del cordobazo de mayo del ‘69, se desató una huelga que llevó a formar una comisión de fábrica independiente de la UOM y de SMATA, liderada por Gregorio Flores, del Partido Obrero. Éste desató ese conflicto no por los sueldos, que se ubicaban entre los más altos de país, sino porque no les dejaban usar jabón para lavarse las manos en los baños, cosa que finalmente lograron con esa huelga. Tal vez Zannini no sea en realidad el cuadro maoísta que purgó cárcel en Córdoba del ‘76 al ’83, sino más bien un “perejil” pro-chino de clase media que conocía de oídas las acciones de Sitrac-Sitram, que marcaron la historia de la izquierda revolucionaria en la provincia mediterránea. Otra posibilidad es que ella no haya entendido claramente lo que le transmitió Zannini sobre esos tiempos violentos de Córdoba. Lo que ella quiso decir es que Moyano hace huelgas sin sentido, ya que los camioneros tienen altos sueldos, lo que es verdad. Pero no dice cómo los afectan el mínimo no imponible al impuesto a las ganancias, la inflación y los peligros de despidos. Esta semana la presidente, al criticar a los economistas, usó una supuesta frase de Ernesto Jauretche que en realidad había escrito Raúl Scalabrini Ortiz. Es que ya sabemos que nuestra presidente tiene veleidades intelectuales con las cuales adorna sus discursos. Y en la mayoría de los casos comete furcios.