Cómo nos asesina el Nuevo Orden Mundial
Según Natural News la “Gran
Matanza” de la población humana ya ha comenzado. “Secretamente,
insidiosamente, sin piedad, una agenda de despoblación mundial se ha
puesto en marcha. A medida que transcurre, la gran mayoría de la raza
humana será eliminada del acervo genético. Genéticamente aniquilada.
¿Sobrevivirán usted y su linaje genético?”
Con esta pregunta apocalíptica empieza
el artículo que devela la agenda de exterminio estilo nazi al que
estamos siendo sometidos, cortesía de los amos del mundo, el 0.01% que
maneja los bancos, los estados, la guerra y la muerte. En este preciso
momento, bajo nuestros propios ojos, desde nuestros mismos cielos
estamos siendo atacados, de manera silenciosa pero no menos letal y sin
que la gran mayoría se dé cuenta. Lo primero que dirán los incrédulos,
los que no quieren creer y los que nos quieren hacer creer lo contrario,
es que se trata de una “teoría conspiracional” más.
La información se encuentra al alcance
de los que quieran investigar y que no les hayan matado aún las neuronas
del raciocinio en esta guerra bacteriológica, toxinonológica e
ideológica no declarada. Personajes como Bill Gates y Ted Turner,
asegura Nature News, discuten abiertamente la reducción de la población
mundial en un 90%.
“Bill Gates, en particular, felizmente
da fondos para la tecnología de la infertilidad, las vacunas y los OGMs
(organismos genéticamente modificados), todos los cuales están diseñados
a propósito para causar infertilidad y detener nuevos nacimientos de
bebés, dando como resultado una fuerte disminución de la población
humana”.
Pero la cosa va más allá de disminuir la población humana. Se trata es de acabar con el 90% de la población mundial .
“La palabra para esto es, por supuesto,
la eugenesia. Adolfo Hitler se basó en la misma filosofía: Mejorar la
raza humana a través de genocidio. Eliminar a los débiles, los feos, los
estúpidos. Encender los incineradores, desarmar a la gente seleccionada
para ser exterminada, y llevarla como ovejas a las cámaras de gas o a
cementerios a cielo abierto”.
La Segunda Guerra Mundial sí la ganaron los nazis
Todas las técnicas nazis de exterminio,
de lavado cerebral, de control a través de un estado policíaco, fueron
perfectamente asimiladas por los victoriosos, y no solamente las
asimilaron sino que las expandieron y las refinaron. Y, finalmente
parieron su hijo: El Nuevo Orden Mundial, el hijo bastardo del estado
nazi que adquirió legitimidad a través de los mecanismos de control
financieros (FMI, Banco Mundial), políticos, militares y
propagandísticos (cadenas de televisión, prensa, Internet, etc.) de
Occidente, además de las “fundaciones caritativas” que nos hacen la
caridad de ayudar a aniquilarnos.
“La Fundación Bill y Melinda Gates, por
ejemplo, proporciona una importante financiación a la Universidad de
Carolina del Norte para desarrollar la tecnología de ultrasonido de
infertilidad que podría hacer que el esperma humano fuera inviable por
un máximo de seis meses. Reporta la BBC, que esta tecnología se probó
eficazmente en ratas, y es solo uno de los 78 proyectos de investigación
que la Fundación Gates ha financiado bajo el disfraz de “programas de
salud global”.
http://www.naturalnews.com/034834_Bill_Gates_sperm_infertility.html
Bill Gates explicó de su famosa agenda de despoblación mediante el uso de vacunas, ante una audiencia en vivo en 2010:
“El mundo de hoy tiene 6800 millones de
personas… que se dirige hacia los 9 mil millones. Ahora bien, si hacemos
un gran trabajo con nuevas vacunas, atención médica, servicios de salud
reproductiva, podríamos bajar el número en tal vez un 10 o 15 por
ciento”. (http://www.naturalnews.com/029911_vaccines_Bill_Gates.html)
“Eliminar a los débiles”
El objetivo final es hacer una
eliminación darwiniana de una gran parte de la humanidad en la que solo
los más fuertes sobrevivirán. Para los dueños del poder, continúa el
artículo, la gran mayoría de las masas son “consumidores idiotizados,
inmersos en los videojuegos, la televisión y la comida chatarra, que no
pueden ofrecer ninguna contribución significativa para el futuro de la
civilización humana”.
Los seres humanos han dejado de serlo.
Los que gobiernan se han convertido en una mafia asesina e
inescrupulosa, cuyo único objetivo es tener el poder económico,
(apoyados en su poderío militar), explotar los recursos del planeta
Tierra hasta que no haya nada más que explotar y fomentar el caos global
para aniquilar a los “débiles”, mientras que ellos se alistan para
encerrarse en sus búnkeres y los polos se derriten y 8 mil millones de
personas, como si fuera un “silencio de los corderos”, son llevadas al
matadero global: La globalización, los TLC, las crisis económicas
preprogramadas , la deforestación, el calentamiento global, el cáncer y
las guerras del petróleo que comenzaron mucho antes de la primera
invasión de Irak y que continúan hoy en día expandiéndose por el Medio
Oriente.
La aniquilación de la población, según
ellos, continúa el artículo “hace que la humanidad sea más fuerte, casi
de la misma manera que el sacrificio de los débiles de una manada de
animales salvajes mejora el acervo genético total de la especie
enfocada. El patrimonio genético humano, dicen, está decayendo, y la
única manera mejorarlo para tener una especie capaz de alcanzar las
estrellas es eliminar a aquellos que no sean lo suficientemente
inteligentes como para merecer un lugar en dicho acervo genético”.
Cómo nos están matando
Este es el punto más increíble de esta
historia, ya que las formas de aniquilamiento antiguas han sido
reemplazadas por nuevas y sofisticadas técnicas de genocidio, de manera
que el exterminado sea su propio exterminador. En unos casos, el NWO nos
da las armas para que nosotros nos encarguemos de apretar el gatillo, y
lo que es más, hasta terminemos pagando por ello. Se trata de métodos
encubiertos, basados en la persuasión y la propaganda. Como todos
sabemos, el veneno se toma por la boca, y, ¿qué manera más macabra que
el hacer que nosotros mismos nos lo suministremos?
Para empezar están los infames GMOs, o
alimentos genéticamente modificados, los cuales llevan a la
infertilidad. Están por todas partes, Monsanto, o mejor Mondiablo, es la
compañía que encabeza la lisa de multinacionales del veneno con sus
semillas genéticamente modificadas. No se trata de alimentar mejor a la
humanidad, sino de darle la comida de su propio exterminio. A estas
semillas y alimentos les sigue una larga lista encabezada por el agua,
sin la cual no podemos sobrevivir. Está cargada de fluoruro además de
miles de residuos químicos, la mayoría cancerígenos, que están causando
muertes y abortos al por mayor. Como ningún grupo poblacional queda sin
ser atacado, están además las vacunas, llenas de mercurio que causan
daños irreparables al cerebro e incluso la muerte… a esta población
debilitada y mentalmente disminuida se le pone al frente una gran
“prueba de inteligencia”: Si ustedes son tan estúpidos como para
consumir nuestros venenos, es que en verdad merecen morir…
La prueba de inteligencia
“Es importante destacar que las
propiedades genocidas de las vacunas, los transgénicos, los aditivos
alimentarios químicos, medicamentos y otras sustancias químicas
sintéticas funcionan como una especie de test de inteligencia para la
población”.
Esta es la ecuación diabólica del Nuevo
Orden Mundial: Para deshacerse de los “estúpidos” o sea aquellos que no
son material mental para alcanzar las estrellas, los “estúpidos” se
suministrarán su propio veneno sin darse cuenta. Esta es la trampa: Por
medio de la propaganda masiva, de los comerciales de televisión, de
revistas, radio y prensa escrita, se ofrece a la gente un estilo de vida
“moderno”, en el cual ¡todo viene prefabricado! Los pensamientos vienen
enlatados y las multinacionales del veneno, tales como Nestlé, son las
encargadas de distribuir la cicuta moderna que mata lentamente las
neuronas cerebrales asegurando que la persona pierda cada vez más su
capacidad de raciocinio. El veneno se llama glutamato monosódico, es un
“saborizante”. Según el idioma venenoso de su propaganda, sirve para
“realzar el sabor de los alimentos”. El que caiga en la trampa de
comprar este producto ya ha demostrado, según el NWO, que merece morir.
¿Por qué demonios necesita el ser humano un “saborizante” que realce el
sabor de nada? El glutamato monosódico es una excitotoxina. ¿Qué es una
excitotoxina? Como su mismo nombre lo indica, es un producto tóxico que
excita. Hace que las neuronas cerebrales se exciten y disparen sus
impulsos sin parar, hasta que en el curso de una hora mueren: se trata
de una muerte lenta del cerebro que puede concluir con múltiples
enfermedades terminales, entre ellas la de Alzheimer. En resumen, se
trata de una droga letal que se vende abiertamente, disfrazada de
múltiples formas entre ellas como condimento. Los mercaderes de la
muerte y del veneno ponen en su propaganda que su producto se compone de
especias, yerbas y otras cosas fantásticas que harán que la comida
“sepa mejor”. En letra diminuta o en el fondo del empaque se oculta la
realidad: Las yerbas son un 10% y el veneno es el 90%. El “saborizante”
termina por matar el sentido del gusto, y el adicto no puede percibir ya
los sabores naturales porque todos son neutralizados por lo que
supuestamente “los mejoraría”. No podría haber mejor metáfora para el
Nuevo Orden Mundial: Asesina por la espalda y nos quiere hacer creer que
su veneno es el sabor, hasta que seamos incapaces de saborear nada.
Siguen en la lista las personas que se
vacunan rutinariamente. Todo aquel que use vacunas, también entra en la
categoría de los “estúpidos” que merecen morir. Las vacunas “sirven como
filtro perfecto para la eliminación de los “estúpidos” del acervo
genético humano. Esta es sin duda la razón por la cual los globalistas
presionan fuertemente las vacunas en las familias de bajos ingresos (…)
Es importante destacar que las vacunas contienen virus invisibles de
cáncer que se transmiten de generación en generación. Los virus SV40
introducidos en la población a través de las vacunas contra la polio en
la década de 1950 todavía existen hoy en día en los nietos de aquellos
que fueron primero vacunados. Esto es abiertamente admitido por los
mejores científicos que ayudaron a desarrollar estas vacunas (http://www.naturalnews.com/033584_Dr_Maurice_Hilleman_SV40.html).”
Muerte desde arriba
Son rayas inocentes en el cielo que
mucha gente confunde con las estelas dejadas por los aviones, la mayoría
de la gente no las nota y para los que las notan no dejan de ser más
que una mera curiosidad carente de trascendencia. A diferencia de las
estelas de vapor, las estelas químicas en vez de desaparecer en unos
minutos, se van expandiendo hasta dejar caer finalmente su lluvia
venenosa de metales pesados y agentes bacteriológicos. Están siendo
dispersadas alrededor del planeta sobre los grandes centros
poblacionales 24 horas al día, 7 días a la semana. Se pueden ver ya sea
en el cielo de Europa, de América Latina o de Estados Unidos y del resto
del mundo cumpliendo su labor de la muerte: Aviones que vuelan a
grandes alturas cubren el cielo de estelas hasta que el cielo azul
desaparece y se convierte de un color gris contaminado. Algunos dicen
que es para “controlar el cambio climático”, para otros son un gran
misterio que no tiene explicación. Sin embargo la realidad es más sucia y
mortal de lo que cualquiera se pueda imaginar. Un día claro en
California, los aviones comienzan a hacer una X gigantesca en el cielo,
siguen dibujando docenas de estelas en forma de X y cuando la nube de
veneno se extiende, hace que el sol se borre del paisaje. Se ven también
en el cielo bogotano, ¿con qué autorización dejan caer su veneno sobre
Colombia, sobre el resto del mundo? Es solo una pregunta retórica, la
complicidad con el Nuevo Orden Mundial supera barreras geográficas y
políticas. Una vez que somos rociados con el veneno caído del cielo, los
síntomas no demoran en aparecer:
• problemas en el tracto respiratorio
• dolores de cabeza
• sinusitis
• hinchazón de las glándulas linfáticas
• tos/incapacidad respiratoria
• fallo respiratorio generalizado
• daño al corazón y al hígado
Diversos medios informativos han
reportado que las estelas químicas han sido fotografiadas vía satélite
sobre Irak y Arabia Saudita durante la Guerra del Golfo y ahora cubre el
cielo de los Estados Unidos.
“¿Cómo puede mantenerse en secreto una
estratagema tan grandiosa de ingeniería planetaria?”, se pregunta el
sitio Web “Nosotros” de Chile, y esta es la respuesta:
“Bien, piensen por cuánto tiempo se han
ocultado a un público drogado, indiferente y desilusionado, los horrores
del agente naranja entre el pueblo vietnamita, la enfermedad de la
Guerra del Golfo, que dejó incapacitados o mató a miles de combatientes,
o las 16.000 muertes en Chernobyl.”
Cientos de miles de personas alrededor
del mundo está siendo asesinadas o incapacitadas por esta fumigación
venenosa sin precedente en la historia de la humanidad. El planeta está
siendo convertido en una gigantesca cámara de gas donde el Pentágono y
sus socios de la banca internacional y las 100 familias que dominan el
planeta han iniciado una extinción programada a nivel global, tal vez
nunca vista desde que un meteorito se estrellara con la tierra hace 65
millones de años y la luz del sol resultara bloqueada en una especie de
invierno nuclear que acabó con los dinosaurios.
Los dinosaurios actuales que detentan el
poder mundial quieren ahora exterminar al 90% de la raza humana, de
hecho, este proceso se inició hace décadas, solo que hasta ahora estamos
siendo testigos de nuestro propio aniquilamiento. Tenemos dos opciones:
o dejarnos llevar como corderos al matadero o tomar conciencia de la
situación y resistir. Los gobiernos de cada país del mundo deben
responder a sus ciudadanos por qué están dejando que desde el cielo
estemos siendo fumigados con una mezcla tóxica asesina. ¿Podría
responder por ejemplo el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, por
qué dio autorización para que Colombia sea fumigada? ¿Por qué esta
fumigación venenosa se mantiene en secreto?
Del cielo a la mesa, estamos siendo
envenenados, cada día, cada hora, con cada comida, cada vez que
respiramos, cada segundo que existimos. Existe una conspiración global
para acabar con el 90% de la humanidad y el primer paso para derrotarla
es saber que existe.
Y, un dato final que no deja de ser de
interés: Un excocinero de la Casa Blanca para los gobiernos de Bush y
Obama reveló que en la Casa Blanca solo se servía comida orgánica, sin
aditivos ni preservativos… No OGMs ni MSG (glutamato monosódico)… los de
arriba no quieren matar sus neuronas mientras legislan para que las
masas mueran de una muerte lenta y venenosa…
Mario Lamo JIménez / http://www.escritoresyperiodistas.com/NUMERO61/nwo.htm
Visto en : Conexión con la verdad