No al “cuento” infantil homosexual
Portada del folleto que será entregado a sus hijos
¡Ya es demasiado! Tenemos que protestar.
Ahora la promoción de la homosexualidad comienza en el Jardín Infantil y es promovida por el Ministerio de Educación.
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¿Qué diría Ud. si su hijo o nieto de 4 años recibe en el Jardín un
“cuento” preparado por homosexuales para que él se vaya “preparando”?
¿Qué diría Ud. si ese “cuento” es entregado sin su consentimiento? ¿Y
si las “tías” del Jardín de infancia le explican que esto es común, que
“Nicolás” tenga dos papás? ¡No puede ser!
En realidad, ya nada detiene el afán de sodomizar a la sociedad. Sin
embargo, hasta ahora el Gobierno no había mostrado de tal forma su
empeño en promover estas conductas, sin límites de edad y sin el
consentimiento de los padres de familia.
Sí, como Ud. sabe, la prensa ha dado a conocer el lanzamiento de un
“cuento” que, bajo el título “Nicolás tiene dos papás”, busca
acostumbrar a los niños a partir de los cuatro años, a las conductas
homosexuales.
El “cuento” es patrocinado por la Junji y la Dibam, organismos
dependientes del Ministerio de Educación, su redacción estuvo a cargo
del lobby homosexual y cuenta con el financiamiento de la Unión Europea y
del Gobierno de Holanda. ¡Yo protesto!
Esta medida se anuncia en el preciso momento en que la Cámara de
Diputados aprobó la Reforma Escolar, lo que muestra qué tipo “calidad”
de educación impondrá el Ministerio a todos los establecimientos del
País, sin distingo de edades ni de religión.
De acuerdo a la información entregada, las Municipalidades de
Providencia y de Buin han solicitado el manual para sus bibliotecas
infantiles. La Dibam también lo difundirá en su red de bibliotecas. O
sea, un verdadero cerco oficial contra la inocencia de nuestro niños.
No existe precedente en todo el continente latinoamericano de que un
Gobierno patrocine para niños de cuatro años una publicación que sea la
masacre de la inocencia de éstos y que, para ello, cuente con el
financiamiento de gobiernos extranjeros.
A este propósito, creemos necesario recordar la condenación de
Nuestro Señor Jesucristo a quienes escandalicen a los niños: “Pero al
que escandalice a uno de estos pequeños que creen en Mí, más le vale que
le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los
asnos, y le hundan en lo profundo del mar (San Mateo18.6.).
