CRISIS DE PODER Y NECESIDAD DE CONSOLIDAR EL NACIONALISMO
Por Martín Ledesma
Es evidente que muchos no entienden el concepto de “poder”. Los liberales se han creído su propio cuento de que el poder viene de las urnas y hoy su versión bastante berreta llamada PRO o “cambiemos” está sufriendo las consecuencias. No se dan cuenta aún que las leyes no son fuentes de poder sino consecuencias de un poder que ya se tenía anteriormente. Las leyes no dan poder, las leyes necesitan poder para ser aplicables.
Los liberales se engañan a sí mismos, pensando que porque la ley dice que consiguieron que la gente meta más papeles de su partido en las urnas ya tienen el poder asegurado, solo porque “la ley” así lo dice.
Se
olvidan que el poder no es ni más ni menos que la capacidad de imponer
los propios puntos de vista, sean estos justos o injustos, “legales” o
no, y ese poder reside en última instancia en la fuerza organizada, en
la capacidad de que un grupo de personas lleguen a un consenso para
imponerse a otro con menos recursos, peor organizada o, directamente, no
organizada.