ALGO PARA RECORDAR
LA ORGANIZACIÓN:UNICO CAMINO
Ricardo Martín Bustamante
Posiblemente no resulte tan expeditivo, ni tan brillante y hasta se lo
vea gris, rutinario, sin los oropeles de una supuesta heroicidad que
tanto suele declamarse y poco ejercerse efectivamente. No solo se forjan
héroes en una guerra. A veces la heroicidad esta en soportar con
paciencia y sin desertar cuando nos encontramos aplicados a una tarea
que parece común, y hasta anodina y poco sobresaliente pero en la que va
la conservación de algo que amamos: la Patria, nuestro movimiento,
nuestros camaradas.
Tal
vez resultemos reiterativos en nuestra afirmación, pero debe
entendérsela y hacerse carne. Es el único camino que nos queda. No solo
eso, es el que hay que recorrer irremisiblemente si queremos hacer
política con un mínimo de seriedad, orden y disciplinadamente para
recuperar nuestra cautiva Argentina
Ese camino es el de la organización,
es el de la estructuración de un instrumento para dar la lucha política
patriótica en los años difíciles que seguramente nos aguardan.
Desgraciadamente es algo que parecemos olvidar los nacionalistas
curiosamente mientras hablamos reiterativos de la restauración del
principio de autoridad. Como si la autoridad y la organización no
tuvieran nada que ver. Hablamos de cómo el sistema ha limado el
principio de autoridad pero asumimos conductas anárquicas e inorgánicas.
Inconducentes en definitiva. Después nos lamentamos. Justamente para
eso, para la organización, hemos creado la Red Patriótica Argentina,
para promover y estructurar algo sólido y netamente nacionalista que
cubra todo el territorio patrio
La
organización y la identidad son dos de los elementos esenciales que se
aúnan a la coherencia del mensaje: ya hemos dicho mil veces que somos
nacionalistas no “algo parecido” sabemos concretamente que es lo que
queremos. Esas son las cosas, las notas distintivas fundamentales que
hacen y harán en el futuro mucho más creíble nuestra predica Hemos
puesto nuestros mejores esfuerzos en estas dos cosas: concretar algo
estructurado que se vaya extendiendo de a poco (siempre mas despacio de
lo que deseáramos) pero seguramente, y al mismo tiempo con una
personalidad propia y netamente distintiva, a pesar de las diferencias
de detalle que se puedan manejar de forma sanamente plural, que al mismo
tiempo nos permita, mas allá de las mencionadas diferencias, la
necesaria cohesión basada en la amistad y la camaradería.
Hemos
puesto el acento en lo federal como elemento fundamental de nuestra
organización e identidad, también tantas veces predicado y tan pocas
veces concretado.
Por
ello llevamos ya tres años diciendo que muchas de las modalidades que
había tomado el nacionalismo en los últimos 40 años a la fecha han
caducado por imperio de las circunstancias y de los problemas que se
plantean y de la evolución de los tiempos.
Palpamos
en esos años la desorientación de muchos camaradas o gente afín ante
las mentadas caducidades que los ubican en un escenario diferente y
mucho más difícil. Palpamos la desazón de muchos que dedicaron la vida a
esta lucha larga y dificultosa y no han visto ni brizna de algo que
pudiera coronar tantos esfuerzos. A otros se les fue la vida misma en
ello. También en esas vidas que se consumen silenciosamente esta la
heroicidad del amor a la Argentina.
Por
ellos y por los que están y vendrán algún día debemos reforzar los
esfuerzos, para tener el elemento de lucha política. Nuestro objetivo no
es difuso e indefinido. Es concreto: la conquista del poder político que creemos imprescindible para establecer una República Patriótica, Social y Orgánica.
Gracias
a Dios hay camaradas que han entendido el mensaje y se han unido a
nosotros en esta patriada, otros a pesar de no contarlos en nuestra
organización van comprendiendo lo que veníamos predicando desde hace un
tiempo, sea por el fruto de esa predica o por la propia capacidad de
analizar las circunstancias políticas, llamando consecuentemente a la
organización de forma inequívoca:
“Aquí
y ahora debemos definir nuevamente todo porque los modelos y propuestas
que en el pasado pudieron haber tenido una cierta efectividad, por la
evolución propia de la dialéctica del enemigo, y el acontecer histórico
diferente, han sido ampliamente superados, y en no pocos casos,
trastocados en sus fines y puestos a su servicio. Debemos proponernos
que definitivamente no se pueda ingresar más a la Casa Nueva, la Patria
Restaurada, con la suciedad acumulada. Creo sinceramente que ha llegado
la hora de dejar de lado algunas cuestiones y seriamente abordar la
necesaria organización del Bando Patriota, por dos razones esenciales:
Se avecina la hora final de la Patria, donde deberemos asumir decisiones tajantes, de vida o muerte.
Debemos responder por nuestras Obligaciones no cumplidas al presente en la Defensa de la Patria.” ( Carta de Cda. E.S. Gutierrez)
Digamos para cerrar que así como es irresponsable y suicida llamar a
dar una guerra cuando no tenemos ejercito con que hacerla, es igualmente
de una irresponsabilidad y una frivolidad absoluta pensar que sin
organización podremos plantear el necesario cambio de nuestra Argentina
de su estatus actual de factoría al servicio del Imperio a ser una
Nación Soberana. Dios nos de las fuerzas para poder lograrlo.