El sábado 31
de agosto integrantes de la Acción Nacional Católica (ANC) nos
convocamos frente a la embajada Siria en Buenos Aires para orar por la
paz en Siria y en Medio Oriente, y sobre todo por los cristianos
perseguidos.
Reproducimos la carta de un sacerdote sirio que refleja lo que están padeciendo nuestros hermanos en aquel país.
Queridos amigos
Os escribo con gran pesar y con el corazón herido profundamente por
la ola de violencia de los terroristas musulmanes que sacude todos los
días a Siria y que también golpea al Líbano.
Prueba de ello es el reciente ataque terrorista de Beirut, donde un
coche bomba colocado por los rebeldes islámicos ha matado a más de
cuarenta civiles y otros cinco resultaron heridos.
El miedo y el horror es visible a los ojos de todos nosotros. Todo
cabe en la espiral dramática de la sangre , donde cientos de personas
inocentes pierden la vida todos los días.
Esto, queridos amigos, es sólo una gota en el océano de la violencia
que todos los días se ven obligados a soportar nuestros hermanos
cristianos.
En Siria, una noche de este agosto en Homs, en la aldea cristiana de
Marmarita donde hay un santuario dedicado a la Virgen, los terroristas
de Jabhat islámico Nusra Front, escondidos ocupan el antiguo castillo
por ser una posición estratégica y desde allí, han consumado una nueva
masacre.
Indecibles atrocidades contra civiles inocentes que se convierten en
víctimas de los sacrificios en la vorágine de la violencia cometida por
estos sanguinarios "bestias": treinta y cinco cristianos muertos, no se
sabe el número de heridos y más de doscientas mujeres (especialmente las
niñas) secuestradas, literalmente arrastradas y forzadas a la
esclavitud en el pueblo de Der Zor, bastión terrorista de Jabhat al
Nusra Front.
El destino de cada uno de ellas está marcado por la violencia y la
crueldad con la que serán torturadas y violadas hasta la muerte, que
acogerán como liberación ante tanta maldad.
La continuación de la violencia en la ciudad de Damasco, donde
incluso hoy en día los terroristas islámicos bombardearon el barrio
cristiano y quemaron otra iglesia, siempre dirigiendo sus ataques al
"corazón" de los cristianos que no dejaron su patria para poder defender
lo más sagrado que tiene todo ser humano, el derecho a la dignidad
humana y de profesar libremente su fe.
El objetivo es destruir a cualquier precio, los lugares que durante
dos mil años han sido la "cuna" del cristianismo, y que todos se sometan
a la ley del Islam, como ya ha ocurrido en Afganistán.
Ya no es un lugar seguro para nuestros hermanos cristianos, día tras
día sólo hay dolor y las lágrimas de las madres desesperadas a las que
les matan sus niños y secuestran sus hijas, de los ancianos que viven en
silencio este horror son impotentes frente a tanta crueldad y la
devastación, y de los padres que sufren impotentes porque no pueden
defender a sus familias y darles un refugio seguro.
Amigos, asisto todos los días a imágenes de atrocidades como las que
os he contado, que quedan impresas en mi mente, y mi corazón está lleno
de angustia, les pido a ustedes que se unan a nosotros en la oración
ferviente y constante al Inmaculado Corazón de María, nuestro mediador
con Dios porque la semilla de la paz mora en cada corazón.
Así que vuelvo a preguntar por su apoyo, ya ha hecho mucho, pero me
pide que lo haga aún más, necesitamos que cada poco de ayuda que cada
uno de ustedes nos pueden dar, ayuda económica y asistencia material,
por favor, no dejes que mi desatendido llorar, que es la voz de miles de
gritos desgarradores de los que ahora vive sólo entre el dolor y las
lágrimas y todo perdido.
Que el Señor te bendiga y a ti y a tus familias. Su hermano en Cristo.
Padre Nader Jbeil
Director de Radio Sawt en Sama (Siria)
Para ver la nota sobre el asesinato de esta víctima inocente PRESIONE AQUÍ
Niña siria cristiana martirizada por las bestias islamicas |