Publicista ofrece a EE.UU. solución para desmantelar el imperio americano
La política exterior de EE.UU.
es agresiva, temeraria e intervencionista y puede causar respuesta
similar por parte de otros países. Sin embargo, existe una salida: la
era de la hegemonía de EE.UU. debe terminar, según un publicista
estadounidense.
Célebre autor norteamericano Laurence M.
Vance, en su libro ‘War, Empire, and the Military’ (‘Guerra, Imperio y
el Ejército’), acusa a EE.UU. de sancionar la desestabilización y el
derrocamiento de los Gobiernos, asesinar a sus líderes, destruir sus
industrias e infraestructuras, respaldar los golpes militares,
escuadrones de la muerte, tráfico de drogas y el imperialismo con el
pretexto del humanitarismo, publica el portal Zerohedge.
Además, Vance afirma que la política
exterior norteamericana apoya a los Gobiernos corruptos y tiránicos y
las sanciones y embargos brutales, lo que provoca la discordia, el odio y
los ataques terroristas en contra de EE.UU.
El autor ofrece una vía de solución para
salir de este círculo vicioso: regresar a la política exterior de
Thomas Jefferson, uno de los Padres Fundadores de EE.UU., que se guiaba
por los siguientes postulados:
• “Ninguna nación tiene derecho a juzgar a otra”.
• “No queremos intervenir en los asuntos internos de ningún país, ni en los asuntos generales de Europa”.
• “Estoy por el libre comercio con todas las naciones, conexión política con ninguna y poco o ningún trato diplomático”.
• “Hemos dado pruebas, de los
más ilustrados y aprobados escritores sobre el tema, de que una nación
neutral debe, en todo lo relativo a la guerra, observar una exacta
imparcialidad hacia las partes”.
El imperio global norteamericano, con
sus 1.000 bases militares en el extranjero y medio millón de tropas y
mercenarios en tres cuartas partes del mundo, debe desmantelarse,
escribe el autor. Junto con los espías estadounidenses, las operaciones
clandestinas, colosales presupuestos militares, abuso y perjudicial uso
del Ejército, campos de prisioneros, torturas, secuestros, asesinatos,
propagación de la democracia a punta de pistola, patrioterismo, cambios
de régimen, alianzas militares, garantías de seguridad e injerencia en
los asuntos de otros Estados, asevera el escritor.
Vance pone un ejemplo: EE.UU. jamás
aceptaría que cualquier otro Estado desplegara una cadena de bases cerca
del territorio nacional, localizara sus tropas dentro del país,
estableciera una zona aérea sobre el Estado o mandara su Armada a
patrullar las costas norteamericanas. Después Vance plantea la pregunta:
¿Hasta cuándo otras naciones aguantarán estas acciones por parte de
EE.UU.?
El autor advierte que Norteamérica ya
experimentó el estallido de la ira del mundo musulmán, causada por la
política exterior estadounidense. Por ello, Vance opina que EE.UU. debe
dejar de ser policía, bombero, guardia de seguridad, trabajador social y
el metomentodo a escala mundial.