David Reimer, a los seis de meses de nacido, perdió su pene como
consecuencia de error quirúrgico. El psicólogo John Money, partidario
que la identidad de género es aprendida, dispuso la reasignación del
sexo de David a mujer (Brenda). El “tratamiento” se difundió como
exitoso pese a que David (Brenda) nunca se identificó con una mujer. A
los 15 años, confesándole sus padres que realmente era hombre, decidió
asumir su verdadera sexualidad.
David R. hizo público su caso para así evitar prácticas similares en el futuro. No obstante, nunca pudo superar lo vivido empujándolo a la depresión para finalmente suicidarse en el 2004.
David R. hizo público su caso para así evitar prácticas similares en el futuro. No obstante, nunca pudo superar lo vivido empujándolo a la depresión para finalmente suicidarse en el 2004.