CAPITÁN DE CORBETA PABLO GARCÍA VELASCO... ESTÁ GRAVE EL ÚNICO PRESO POLÍTICO DE ARGENTINA EN HUELGA DE HAMBRE
El señor Capitán de Corbeta (R.E.) Don Pablo Eduardo García Velasco se
encuentra detenido desde hace más de 9 años, a pesar de haber sido
absuelto en la sentencia pronunciada el 26 de octubre de 2011 por el TOF
5 en la Megacausa ESMA.
El citado Oficial Jefe cuando se
dispuso su traslado desde el Penal Militar de Campo de Mayo a una cárcel común,
inició una prolongada huelga de hambre. A ser
evidentes los síntomas de degradación física y de salud, la justicia
dispuso su internación en el Hospital Naval.
Cap. de Corbeta Pablo García Velasco, Preso Político de Argentina en huelga de hambre
Desde entonces ha permanecido
internado y se mantuvo vivo con un mantenimiento mínimo. Siempre mantuvo su
decisión que en caso de ser trasladado a una cárcel común, reinicia su estricta
huelga de hambre sin ingerir líquidos… aunque en ello le vaya la vida.
Desde el hospital siempre se
prestó a los requerimientos de la justicia y a pesar de no estar en las mejores
condiciones de salud concurrió a las audiencias de la Megacausa ESMA. El día 15
de junio de 2011 la audiencia en el TOF 5, fue suspendida a 11:45 hrs. porque
debió ser derivado al Hospital Naval Dr. Pedro Mallo el señor Capitán de Corbeta (R.E.) Don Pablo Eduardo García Velasco
(Promoción Nº 99 de la ENM) luego de recibir atención de emergencia tras
sufrir desmayo y fuerte descompensación.
La ambulancia llegó, por pedido, aproximadamente veinticinco minutos después de
producida la caída al piso de García Velasco. Un compañero de él, también en
banquillo de los acusados, se levantó y le salvó la vida dándole un fuerte
golpe en el pecho... Pablo reaccionó así de su síncope.
El miércoles 26 de Octubre del
2011 y tras casi dos años de un largo juicio oral y público, el Tribunal Oral Federal 5 (TOF5),
integrado por los jueces Ricardo Farías,
Daniel Obligado y Germán Castelli, leyó la sentencia de ese proceso que
arrancó el 11 de diciembre de 2009 y por el que desfilaron 250 testigos.
En esa sentencia el señor Capitán de Corbeta (R.E.) Don Pablo
Eduardo García Velasco y el señor
Capitán de Fragata (R.E.) Don Juan Carlos Rolón fueron los únicos acusados
que fueron absueltos de todos los cargos que se le imputaban, pero en vez de
obtener la justa libertad, el mismo tribunal dispuso que continuaran detenidos porque están imputados en otras
causas.
Desde entonces Pablo García Velazco permaneció detenido como Preso Político en el Hospital Naval Pedro Mallo, con un estado de
mantenimiento mínimo en la ingesta de alimentos, a los efectos de no empeorar
su precario estado de salud, a la espera que la justicia se pronunciara sobre
un acto humanitario que había solicitado. El citado oficial jefe había
solicitado el beneficio de la prisión domiciliaria al solo efecto de poder
asistir personalmente a su anciana y enferma madre viuda y sin ningún familiar
que esté a su lado. Ya en otras ocasiones nos hemos referido a la señora Hortensia García Velasco, tiene 94 años de edad, es viuda,
discapacitada visual, se está recuperando de una fractura de cadera y el único
hijo que le proporciona ayuda económica es Pablo
Eduardo. Este último ha visto reducido sensiblemente sus ingresos –como
agente de seguros– a consecuencias de su detención y ya se le hace imposible
sostener a su anciana madre desde prisión. Su hermano mellizo, Miguel Ángel, se
ha alejado de su familia y no contribuye con nada en el sostén de su madre.
Hortensia. Madre de los García Velasco
A fines de Diciembre el Tribunal
Oral Federal N° 5 dispone el traslado de Pablo
Eduardo García Velasco, al Complejo Penitenciario Federal I – Ezeiza, donde
permanece en espera del fin de la feria judicial y el inicio de la que se ha
dado en llamar Megacausa ESMA unificada. Pablo
Eduardo García Velasco durante todo ese tiempo mantuvo la esperanza que el
tribunal comprendiera la desesperada situación de su madre y le otorgara el
beneficio solicitado de la prisión domiciliaria.
Una vez iniciadas las audiencias
de la nueva causa, el tribunal le comunica la denegación del beneficio
solicitado, aduciendo que si su hermano mellizo aportara Una determinada suma
de dinero… su madre podría ser sostenida económicamente. La cuestión es que
Miguel Ángel no aporta suma alguna y ni siquiera da nuestras que lo vaya a
hacer, tampoco mantiene comunicación alguna con su madre o hermano.
Pablo y Miguel. Los García Velasco que los testigos de la Esma confunden
Ante esta reiterada injusticia el
señor Capitán de Corbeta (R.E.) Don
Pablo Eduardo García Velasco, decide abandonar la ingesta mínima de
alimentos, reiniciar la huelga de hambre y no ingerir alimentos sólidos y/o
líquidos. Permanece detenido e internado en la enfermería del Complejo
Penitenciario Federal I – Ezeiza. Como era de prever, ante el agravamiento de
su estado de salud (léase riesgo de
muerte), nuevamente es derivado
al Hospital Naval Pedro Mallo y para poder ayudar a su madre se mantiene con
una ingesta mínima de alimentos líquidos.
Sorpresivamente el 8 de abril del
corriente año, el TOF5 resuelve el
traslado inmediato Pablo Eduardo García
Velasco al Complejo Penitenciario Federal I – Ezeiza. El imputado es
internado en la División Clínica Médica del citado penal, la misma que
anteriormente se vió en la obligación de aconsejar su internación en el
Hospital Naval por carecer de los medios necesarios para asegurar su integridad
física, el TOF5 además imparte las
siguientes instrucciones:
Que se evalúe e informe al
tribunal, cada 24 horas, el estado de salud de García Velasco.
Aconsejan se proceda a la
alimentación forzosa del interno.
Desde el día de su último traslado
el señor Capitán de Corbeta (R.E.) Don
Pablo Eduardo García Velasco se encuentra cumpliendo una nueva huelga de
hambre, ha perdido masa, peso corporal y su salud se deteriora día a día.
Pensamos que con su resolución el TOF5
ha incumplido lo establecido en la Constitución Nacional y varios tratados
internacionales, ya que las precarias condiciones de la División Clínica Médica
del Complejo Penitenciario Federal I – Ezeiza, no le permiten garantizar la
integridad física del interno, quién se
encuentra nuevamente en riesgo de vida.
En esta ocasión nos encontramos ante dos casos de muerte anunciadas: la
del imputado y la de su señora madre… es hora que los jueces se conmuevan y otorguen a Pablo Eduardo García Velasco el
beneficio de la prisión domiciliaria, sobran razones humanitarias para así
hacerlo.