Ambientes, Costumbres, Civilizaciones
Una explicación sobre la importancia de la sección Ambientes, Costumbres, Civilizaciones.
Plinio Corrêa de Oliveira escribe en Revolución y Contra-Revolución que “Dios
ha establecido misteriosas y admirables relaciones entre ciertas
formas, colores, sonidos, perfumes, sabores y ciertos estados de
espíritu; las artes pueden evidentemente influenciar de manera
intensa las mentalidades y formar en los individuos, las familias y los
pueblos un estado de espíritu profundamente revolucionario“(1)
Este pasaje es fundamental para comprender la singular contribución
de Plinio Corrêa de Oliveira a la Revista “Catolicismo” en la rúbrica Ambientes, Costumbres, Civilizaciones de la
cual muchos no han percibido su extraordinario alcance.
El ambiente es la armonía que resulta de los seres diversos reunidos
en un mismo lugar y que ejerce una profunda influencia sobre los
hombres. “Los hombres forman ambientes a su imagen donde las
costumbres y las civilizaciones se desarrollan. Pero a la inversa, es
también en general verdadero: los ambientes forman a su imagen a los
hombres, a las costumbres y a las civilizaciones“(2)
Una prueba de la importancia del ambiente para el desarrollo
equilibrado de la vida natural y sobrenatural, es suministrada por la
sabiduría con la que Dios ha ordenado el gran ambiente de lo creado en
el cual nosotros estamos inmersos, formado por los seres vivos que nos
rodean: plantas, animales y en la cumbre de la creación el hombre hecho a
imagen y semejanza de Dios.
La interpretación y los comentarios de las fisionomías de hombres excepcionales, de
santos
o de revolucionarios, fueron en este sentido una nota constante del
pensamiento de Plinio Corrêa de Oliveira. La manera de ser de un hombre
se expresa de hecho en la fisonomía, el porte, los rasgos, e incluso en
las vestimentas, cuyas mutaciones están ligadas en el curso de la
historia a aquellas de las personalidades y de los tipos humanos.(3) “La sociedad habla por así decir – afirma Pío XII – por
el traje que ella lleva; por la vestimenta ella revela sus aspiraciones
secretas y ella se sirve de los trajes, al menos en parte, para
edificar o destruir su porvenir“.(4)
“Puesto
que una vestimenta debe estar de acuerdo con la circunstancia y la
persona que la lleva – nota por su parte el pensador brasileño-
tratándose de un hombre eminente ella debe estar de acuerdo con su
distinción. Pero Dios no tiene por hijos sino hombres eminentes. Todo
hombre por modesto que él sea, tiene una dignidad propia, natural,
inalienable; pero la dignidad del último y del más apagado de los hijos
de la Iglesia es incomparablemente más grande que aquella, puesto que él
es cristiano, bautizado y por lo tanto miembro del Cuerpo Místico de
Nuestro Señor Jesucristo“(5)
De ese modo, es por el arte, por el urbanismo, por la arquitectura,
que se expresan un conjunto de ideas, de tendencias, de aspiraciones y
de actitudes psicológicas. (6) Al viejo orden medieval, que expresaba en
la arquitectura gótica la armonía de la filosofía escolástica (7), él
confronta la Babel moderna.
“Los
sonidos de las inmensas babeles modernas, el ruido de las máquinas, el
tropel y las voces de los hombres que se afanan en pos del oro y de los
placeres – de estos hombres que ya no saben andar sino correr; que no
saben trabajar sin extenuarse, que no consiguen dormir sin calmantes, ni
divertirse sin excitantes; cuya carcajada es un rictus frenético y
triste; que ya no saben apreciar las armonías de la verdadera música,
sino sólo las cacofonías del jazz; todo esto es la excitación en el
desorden de una sociedad que sólo encontrará la verdadera paz cuando
haya encontrado al verdadero Dios“.(8)
(Extraído de “Le Croisé du XXe. Siécle,
Plinio Corrêa de Oliveira” Roberto de Mattei, Editions L’Age d’Homme,
Lausanne, Suisse 1997)
(1) Plinio Corrêa de Oliveira – Révolution et Contre-Révolution - Société française pour la défense de la Tradition, Famille et Proprieté – TFP, Paris 1997 – pag. 73
(2) Plinio Corrêa de Oliveira, Sêde prudentes como as serpentes e simples como as pombas, en “Catolicismo” n°37 Enero 1954
(3) Plinio Corrêa de Oliveira,
Indumentaria, hierarquia e igualitarismo en “Catolicismo” n°133 Enero
1962; ID, O habito e o monge en “Catolicismo” n°62 Febrero 1956
(4) Pío XII Discurso De tout Coeur del 8 de Noviembre de 1957, en DP 1957 p. 664
(5) Plinio Corrêa de Oliveira, Dignidade e distinção para grandes e pequenos en “Catolicismo” n°33 Septiembre 1953
(6) Plinio Corrêa de Oliveira, O
espirito cristão e o espirito pagão manifestados pela arquitetura, en
“Catolicismo” n°7 Julio 1951
(7) Cf. Erwin Panofsky, Architecture gothique et pensée scolastique, tr. fr. Editions de Minuit, Paris 1967
(8) Plinio Corrêa de Oliveira, Tranquilidade da orden, excitação na desordem, en “Catolicismo” n°110, Febrero 196