Primavera árabe: un interesado mega
relato
Alberto Buela
(*)
Si observamos
en forma detenida vemos como los grandes mass
media en forma regular y de tanto en tanto lanzan al mercado del
pensamiento, constituido por los intelectuales del establishment, periodistas y locutores radiales y televisivos, los analfabetos locuaces de los que nos
habla Paul Feyerabend (1924-1994), grandes categorías de análisis para la
interpretación política: political
correctness, multiculturalismo, one
world, consenso, human rights,
mundo light, et alii.
Estas mega
categorías son estudiadas por la metapolítica como una inter disciplina (filosofía,
historia, sociología, política, economía, etc.) que se encarga de desmitificar,
desentrañar y descubrir el sentido último que poseen. Esta tarea está dirigida
en dos sentidos: liberar a la política de la criptopolítica o política de los
lobbies[i] para transformarla en
política pública y convertir la diversidad ideológica en un concepto de
comprensión política.
Desde el 2010
se lanzó al mercado mediático la gran categoría de primavera árabe concepto en el que se engloban todas las revueltas
ocurridas en el mundo árabe: Túnez, Egipto, Libia y Siria. Que son presentadas
como alzamientos populares con un reclamo democrático. En medio de las cuales
se mezclan las exigencias del terrorismo
islámico (Hezbollah, Hermanos musulmanes, etc.) con las del liberalismo
económico. En Túnez y Egipto las revueltas derrocaron a los gobiernos, mientras
que en Libia los bombardeos de la Otan terminaron con Kadaffi. Hoy es el turno
de Siria a la que se apresta a bombardear el sheriff planetario.
Hoy como ayer
los argumentos y las excusas son las mismas: el auto atentado yanqui al
acorazado Maine en las costas de Cuba para declarar la guerra a España en 1898;
el auto bombardeo de Pearl Harbor a su propia flota para declarar la guerra al
Japón en 1941; la existencia de armas químicas, que nunca existieron, para
declarar la guerra a Irak en 2003, y hoy, el uso de armas químicas por parte
del gobierno de Siria para comenzar “el bombardeo humanitario”.
Cuando, por
el contrario, el reconocido investigador periodístico Michel Collon acaba de
afirmar que: “ Il y a que repérer dans désinformation, les intérêts cachés, la
diabolisation de l’adversaire et le refus du débat public. Pourquoi, informés
par les satellites russes qui montreraient que ce sont les rebelles qui ont
employé ces armes, les Etats-Unis et
leurs alliés tirent leurs conclusions avant même tout enquête” (hay que reparar en la desinformación, en los intereses
escondidos, la demonización del adversario y el rechazo del debate público.
¿por qué informados por los satélites
rusos que mostraron que son los rebeldes quienes han empleado las
armas(químicas) los Estados Unidos y sus aliados sacan sus conclusiones
antes, incluso, de toda investigación?.
El uso de la
mega categoría primavera árabe encierra
un mecanismo de justificación para reemplazar a los incipientes Estados
nacionales árabes, transformándolos en Estados
tribales para su mejor y mayor dominación y explotación por parte del
imperialismo internacional del dinero.
Hoy los
Estado nacionales de Túnez, Egipto y Libia están partidos en mutiplicidad de
clanes, grupos y tribus, como cuantos son los hombres que tienen poder de lobby
allí.
Es necesario
observar que uno de los creadores de esta mega categoría, la de primavera
árabe, es un intelectual como Noam Chomsky, introducido en el mundo mass
mediático como un académico lingüista, devenido luego en pensador contestatario,
que termina toda su tarea en la justificación del Estado de Israel. Y así,
cuando los profesores Mearsheimer y Waslt en su informe de 2004, prueban con
lujo de detalles la existencia de un lobby judío en el corazón del gobierno norteamericano,
sale afirmando que: no existe tal lobby
pues los intereses de los Estados Unidos son iguales a los intereses de Israel.
Que cada uno,
si puede, saque sus propias conclusiones.
Para nosotros,
en el caso de Suramérica, la gran categoría de dominación ha sido la de multiculturalismo entendido como el
rescate y defensa de las minorías étnicas y culturales cuando en realidad ha
sido y es: la exaltación de la minorías
por el solo hecho de ser minorías y no por los valores que pudieran ejercer. El
multiculturalismo va en desmedro de la voluntad de las mayorías populares y
busca el quiebre de las comunidades nacionales, con lo cual se obtiene un más
fácil manejo del Estado.nación”[ii]
Un caso
emblemático es el de la actual Bolivia, tansformada de Estado Nacional Unitario
en Estado Plurinacional compuesto por
36 naciones, un disparate jurídico y político en donde, paradójicamente, han
quedado afuera los criollos que constituyen la mayoría del pueblo boliviano.
Estos criollos que son como en toda Nuestra América el genuino pueblo
originario, pues no es ni tan europeo ni tan indio, sino el producto más propio
que dio América al mundo, han sido obligados a renunciar a sus tradiciones e
incorporarse a una de las 36 naciones o quedarse afuera. Ahora bien, el hecho
bruto, el hecho cierto, es que Bolivia está siendo hoy explotada como nunca por
los grandes intereses internacionales, incluso mucho más que en el tiempo de la rosca denunciada por esos grandes
patriotas que fueron Céspedes, Almaráz Paz, Montenegro y tantos otros.
Si antes se
decía de Méjico: pobre, tan lejos de Dios
(por la masonería) y tan cerca de los Estados Unidos, hoy se puede afirmar
de Bolivia: pobre, tan lejos del mundo
criollo (por el indigenismo) y tan cerca del multiculturalismo norteamericano. Hay
que repetirlo una vez más, nosotros en América somos una intercultura, pues al
ser una cultura de síntesis son varias las culturas que confluyen en la conformación
de nuestra cultura y de nosotros mismos.
Hoy Argentina
y Brasil gozan de los beneficios energéticos como gas y petróleo merced al
desmanejo de un gobierno que adoptó como propia la teoría del multiculturalismo
y perdió la centralidad de la decisión política.
Otro tanto,
aunque en menor medida, se está intentando en Chile con su multiculturalismo
mapuche con sede, paradójicamente, en Londres. Menos mal que el gobierno
chileno ya tomó nota y hay reacciones como la del indoblegable Pedro Godoy, el
más lúcido de sus pensadores en este tema.
Nosotros los
suramericanos mirando las consecuencias de la primavera árabe debemos poner las
barbas en remojo, no sea cosa que a los gringos se les ocurra mirar hacia su
patio interior o backyard, como le
llaman ellos y vean que sus negocios no prosperan. Aunque a fuer de sinceros,
hasta ahora y gracias a estos gobiernos progresistas y multiculturalistas que
tenemos, no les va tan mal. Brasil entregó la minera más grande del mundo Vale
do rio doce, y Argentina acaba de entregar a la petrolera Chevron, anteriormente
Texaco (la del catastrófico derrame de petróleo en Alaska) que antes se llamaba
Standard Oil California (una de las dos compañías de petróleo que provocó la
guerra del Chaco entre Bolivia y Paraguay en 1935). A esta impresentable
Chevron le acaba de ceder por migajas 38.500 km2 de pozos petrolíferos (un
territorio más grande que Bélgica) con una expectativa de extracción de cuatro
PBI argentinos (1.600.000 millones de dólares).
(*)
arkegueta, aprendiz constante, mejor que filósofo
[i] Sobre la
preversidad de los lobbies dijo el Papa Francisco: se debe distinguir
entre el hecho de ser gay y el hecho de hacer lobby, porque ningún lobby es
bueno.
[ii] Esto lo
venimos mostrando desde hace años en infinidad de trabajos. Ver: Disyuntivas de nuestro tiempo, Ed.
Docencia, Buenos Aires, 2012, p. 117