jueves, 1 de agosto de 2013

OSKO: RABÍNICAS COINCIDENCIAS

Un judío TALMÚDICO se expresa…
“Debemos estar llegando a la Era Mesiánica”
BenedictoXVIJudos6 
Rabínicas coincidencias
Ya ha terminado el “baño de multitudes” de la JMJ. Pudimos recabar en cientos de imágenes fotográficas y videos una cantidad importante de datos acerca de la marcha de la Iglesia Conciliar y leer en muchos artículos periodísticos el pensamiento, las expectativas, los reclamos o pedidos que se hacen desde las masas esperanzadas en una “renovación” de la Iglesia surgida en el Concilio Vaticano II.
Algunos piden una Revolución, esperan que Bergoglio sea capaz de provocarla. En realidad, la Revolución que esperan ya está en marcha desde hace mucho tiempo y la que estamos viendo es solo una etapa más.
Las etapas se han ido sucediendo y se suceden y continuarán haciéndolo de un modo dialéctico hasta que llegue un determinado momento. Porque la dialéctica no es otra cosa que un instrumento de la Revolución y no un mecanismo cierto que determina histórica. La historia, muy por el contrario es aquello que transcurre en medio de DOS TENSIONES, una de ellas procura la difusión del Reino de Jesucristo y la otra procura impedirlo. En definitiva, las DOS CIUDADES de San Agustín. La Doctrina de las DOS BANDERAS de que hablaba San Ignacio. Dos ejércitos, UNO EL DE CRISTO; el OTRO… VA A LA PERDICIÓN ETERNA, como dice un conocido (por nosotros) spot radial.
Y San Pablo que advierte que por allí anda haciendo de las suyas el MISTERIO DE INIQUIDAD.
Como puede verse, es bastante sencillo.
En ese contexto, nosotros esperamos el regreso del Capitán y otros también esperan la llegada del suyo.
Sin embargo su espera no es pasiva; por el contrario ELLOS son muy activos; nos referimos a que los hechos REVOLUCIONARIOS de los que la humanidad ha sido testigo y víctima, tienen un origen perfectamente identificable y casi siempre detrás están… ELLOS.
Pero veamos lo que decía hace bastante tiempo el Padre Leonardo Castellani, que ya entonces hablaba de “payasadas” y de “carnaval”… y eso que ni siquiera pudo vislumbrar algo como lo que acaba de acontecer en Brasil:
El democratismo liberal, en el cual somos nacidos, uno puede considerarlo como una herejía, pero también por suerte como un carnaval o payasada: con eso uno se libra de llorar demasiado, aunque tampoco le es lícito reír mucho. Mas eso no será sino respaldado por una religión, sacado a la luz el fermento religioso que encierra en sí, y que lo hace estrictamente una herejía cristiana: la última herejía quizás, preñada del Anticristo y una especie de gozo maligno es la tentación del pensador, que ve cumplirse todas sus predicciones, y desenvolverse por orden casi automático todos los preanuncios de los profetas y sabios antiguos que, empezando por Aristóteles, lo vieron venir y lo miraron acabar… como está acabando entre nosotros. De suyo debería morir, si la humanidad debe seguir viviendo; pero no se excluye la posibilidad de que siga existiendo y aun se refuerce nefastamente, si es que la humanidad debiera morir pronto, conforme al dogma cristiano. Mas eso no será sino respaldado por una religión, sacado a la luz el fermento religioso que encierra en sí, y que lo hace estrictamente una herejía cristiana: la última herejía quizás, preñada del Anticristo (Padre Castellani: Una religión y una moral de repuesto. (“Dinámica Social”, noviembre-diciembre de 1957. También en “Cristo, ¿vuelve o no vuelve?”)
Ahora si, ya podemos leer el siguiente artículo. Préstese atención y obsérvese cuidadosamente lo que cuenta el rabino NAFTALI SILBERBERG, en sus “iluminadas” y bergoglianas expresiones, con las cuales explica muy bien sus expectativas mesiánicas:

(Los resaltados en negrita son nuestros)
Mashiaj: ¿Un Retorno a la Monarquía?
FUENTE:


http://www.es.chabad.org/library/article_cdo/aid/1201402/jewish/Mashiaj-Un-Retorno-a-la-Monarqua.htm


POR NAFTALI SILBERBERG

(El rabino Naftali Silberberg, nacido en Detroit. Conocido por su agudo ingenio y extenso conocimiento del Talmud. Él reside en Brooklyn, NY, con su esposa Jaia Mushka y sus tres hijos.)
El siglo 20 vio la expansión de los ideales democráticos a una escala global. Decenas de naciones, previamente gobernadas unilateralmente por reyes y dictadores, o cuyos gobiernos eran elegidos por pocos miembros selectos de la clase superior, han adoptado constituciones que reconocen el derecho intrínseco de todo ciudadano de participar en el proceso de gobierno. Nuevas naciones se están uniendo constantemente a las filas de las iluminadas naciones democráticas, mientras que pocas, en la historia reciente, si es que alguna, han retornado al totalitarismo.
Los últimos miembros que han ocupado su lugar en la familia de las naciones democráticas son Afganistán e Irak. Mientras que fue necesaria una intervención externa para asegurar los derechos individuales de los ciudadanos de esos países, y hay facciones en el interior de esos países que están determinadas a minar esas libertades recién descubiertas, la vasta mayoría de las poblaciones de esos países han aprobado ansiosamente la destitución de sus regímenes tiránicos y opresores de sus tierras.
La tendencia comenzó con el Estados Unidos de América en 1776, y luego reforzado en los años subsecuentes con el reconocimiento de que todos los ciudadanos tienen iguales derechos, y luego se extendió a todos los continentes. El mundo está comenzando a reconocer que cada hombre es creado a imagen de Dios y por lo tanto tiene derechos intrínsecos.
Debemos estar llegando a la Era Mesiánica.
¿O estamos?
¡¿Cómo puede ser la expansión de los principios democráticos un portento de la venida del Mesías cuando el Mesías mismo será un monarca que gobernará en una teocracia?! No sería más apropiado que los años que preceden a la Redención estén caracterizados por un incrementado número de naciones gobernadas por monarcas —monarcas buenos, benevolentes, para estar seguros, pero no obstante monarcas.
¿Estamos progresando o retrocediendo?
Quizás una comprensión de la monarquía del Mesías explicará por qué la proliferación de la democracia es la preparación apropiada para su arribo. Pero primero analicemos la diferencia entre nuestra primera redención de Egipto, y la redención final que será anunciada por el Mesías.
Los israelitas dejaron detrás una nación que estaba profundamente diezmada por diez plagas. Los egipcios, que tan arrogantemente se burlaron ante el Dios de los hebreos, finalmente reconocieron Su omnipotencia: “Y los egipcios dijeron ‘Huyamos de los israelitas porque el Señor está luchando por ellos contra los egipcios’”. Provocar este reconocimiento fue una de las metas primarias de las plagas, como dijo repetidamente Dios “¡Y Egipto sabrá que Yo soy el Señor!”
Pero su aceptación de Dios no puede ser considerado un producto de su libre elección; fueron golpeados hasta la sumisión. Los egipcios eran aun intrínsecamente malvados, pero fueron obligados a aceptar la soberanía de Dios a causa de Sus acciones unilaterales “dictatoriales”.
Fue un comienzo muy hermoso… fue suficiente para servir como base de la primera redención, pero la dictadura no es el objetivo final. Dios no dotó a los seres humanos con libre albedrío para manipularlos como desea — ¡Para ello tiene hordas de ángeles! Nos dio libre albedrío porque quiso que Lo reconocieran. En las palabras de la santa Torá: “Puse ante ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. ¡Elige la vida!”
La Redención Mesiánica, denominada la “verdadera y completa” redención, llegará cuando el mundo esté listo para “elegir” a Dios por su propia voluntad. El profeta Hosea dijo “Los hijos de Israel retornarán, y buscarán al Señor, su Dios y a David, su rey”.
Lo mismo es cierto con el Mesías mismo. En la tradición judía el rey —debido a su obvia grandeza y capacidad de liderazgo —es elegido y coronado por el pueblo, al contrario del dictador que impone su dominio a una nación que no está dispuesta.
En verdad, a medida que avanzamos hacia la Era Mesiánica, percibimos un mundo que en conjunto acepta los conceptos básicos de libertad, igualdad de derechos y libertad religiosa; un mundo que está eligiendo vivir bajo ideales morales y Divinos.
Cuando proclamamos “Queremos al Mashiaj ahora” en efecto estamos tomando parte en un proceso democrático. Estamos votando por Dios, expresando nuestro anhelo por el día en que “El Señor será Rey sobre toda la tierra; en ese día el Señor será uno y Su nombre uno”.
Hasta aquí, el rabino…
Pues bien; cuantas coincidencias con el IDEARIO de los “Papas” de la Iglesia Conciliar y con el SUSTRATO IDEOLÓGICO de la misma.. . Coincidencias profundas, en las POSTURAS, para utilizar un término que tanto le gusta a BERGOGLIO.
Por eso es tan actual el P. Castellani (Un señor CURA que se encuentra en las antípodas del detestable lobo vestido de Papa que funge como jefe de la Iglesia Romana Apóstata).
Lo podemos ver muy claramente porque ese democratismo liberal que muchos antes que nosotros vieron venir, está cuajando una sociedad GLOBAL ANTICRISTIANA que de a poco va llegando a su plenitud.
“Mas eso no será sino respaldado por una religión, sacado a la luz el fermento religioso que encierra en sí, y que lo hace estrictamente una herejía cristiana: la última herejía quizás, preñada del Anticristo “
MÁS CLARO, AGUA, pero…
Como se trata de cuestiones rabínicas mezcladas con otras que provienen de la falsa Iglesia, de lo que esperan ambos estamentos y de las conclusiones tenebrosas que debemos sacar, dada la perfecta concordancia de HECHOS, ANUNCIOS PROFÉTICOS, ELOCUENTES CALAMIDADES y DECLARACIONES COINCIDENTES (rabínicas y bergoglianas) nos queda por reclamar,
…QUE SEA AGUA BENDITA, por favor