jueves, 20 de diciembre de 2012

EL CHACO:NARCOPOLITICA Y VALE TODO


Chaco: entre la narcopolítica y el vale todo
OTROS SENDEROS SE BIFURCAN
 
Chaco: entre la narcopolítica y el vale todo
 “El hombre más rico es el que tiene los amigos más poderosos”. Michael Corleone en El Padrino III, de Francis Ford Coppola.
“Este es un gobierno resentido, en la provincia sigue gobernando el mismo que facilitó el ingreso de la parafernalia de Madres y sigo trabajando en obras financiadas por ellos. Tengo miedo”. Ex capataz de Sueños Compartidos en El Chaco y fuente del libro “El negocio de los derechos humanos”.
A pesar del silencio oficial, los involucrados estallan cuando algún periodista se acerca a preguntarles sobre sus apariciones estelares en el libro “El negocio de los Derechos humanos”. Dos nuevos hechos sacuden a la provincia del Chaco y a dos de sus diputados nacionales por el Frente Para la Victoria. Chaco: entre la narcopolítica y el vale todo.
Cinco años después de las elecciones presidenciales de 2007, que consagraron la fórmula de Cristina Fernández de Kirchner y Julio Cobos para gobernar el país por cuatro años, aún se sigue investigando el financiamiento de los gastos efectuados por el Frente para la Victoria para esa campaña.
En abril del 2011, tras la aparición del libro “El cártel Incómodo” del periodista mexicano José Reveles, los diputados chaqueños del Interbloque Alianza Frente para Todos, presentaron un proyecto de Resolución 731 y 732/11 expresando su preocupación por los hechos mencionados en la obra. Reveles denunciaba que el ex subsecretario de Culto del Chaco, José Mongeló, había canalizado subsidios millonarios a la iglesia como pretexto para que el pastor mexicano Jerónimo López Valdez se hiciera cargo del templo La Roca, utilizando a la iglesia Evangélica del Nuevo Milenio de Resistencia como pantalla para lavar dinero del narcotráfico. El 10 de diciembre del 2011, Mongeló asumió como diputado nacional luego de encabezar la lista del FPV colocado por su cercanía con la Presidenta Cristina Fernández. “Era kirchnerista antes que Néstor” dicen en la provincia. Junto con su compañera de bancada, Gladys Soto, “son los únicos levanta mano que garantiza el Chaco” agrega el periodista local, Gustavo Parodi.
Según otro periodista, Fabricio Glibota, “la prensa y asesores de Mongeló están preguntando sobre el contenido de tu libro pues, políticamente, aquí, impactó”. Miguel Chamorro, luchador empedernido contra el negocio del narcotráfico, afirma que el diputado nacional sería “como la línea de flotación con otros negocios”. En medio de abogados preocupados, uniformados que entraban y salía de los domicilios de los pocos chaqueños que pudieron conseguir el libro, algunas causas judiciales comenzaron a salir de un prolongado letargo, el diputado Mongeló publicó una extraña denuncia pública en su página de Facebook, el pasado lunes 17 pasadas las 18 horas.
Titulada “Alerta, operación política del duhaldismo en mi contra”, el diputado nacional cree que las supuestas operaciones políticas serían pergeñadas por “personajes oscuros, esbirros, mercenarios, de los que nunca se sabe de qué viven, pero sí se sospecha fuertemente que son mano desocupada de los servicios de inteligencia de la dictadura”.
Ni a Kafka se le hubiese ocurrido escribir un oxímoron de tal naturaleza: ¿Desocupados o trabajadores de la dictadura? Es un gran pretexto, con la excusa de la dictadura que ocurrió hace ¡36 años! se denuncia todo aquel que… denuncia.
Sin embargo, varias de las fuentes mencionadas en “El negocio de los Derechos humanos” han sufrido represalias y persecuciones. Es el caso de un empresario de la construcción que denunció “competencia desleal” desde el año 2009 cuando desembarcó la Fundación Madres de Plaza de Mayo en el Chaco. Hoy su pequeña empresa está en concurso de acreedores. Otra fuente quiere conservar su emplea en una contratista del Estado y pide no ser mencionado jamás pues “ya me hicieron algunas preguntas extrañas y he visto como echan profesionales por la lógica amigo/enemigo”.
El sistema no es tan eficiente ni prolijo como en “La vida de los otros”, film referido a los servicios de inteligencia de la Alemania Oriental circa 1984 pero la purga y el amedrentamiento, continúan como si nada. Increíble parábola mundana en que los denunciados de ser perseguidos, ejercen la caza cotidiana.
Dos diputados en problemas
¿Casualidad permanente? Una máxima del pensamiento menemista aflora, como el ave fenix, en los acérrimos kirchneristas. Esta semana, un pastor evangélico, de apellido “González” fue detenido en una villa de la ciudad de Buenos Aires con 20 kilos de pasta base en su poder. Entre sus pertenencias se le habría encontrado una tarjeta personal del diputado Mongeló. Es más, afirman fuentes policiales que el “religioso” apeló a sus contactos políticos para ser tratado con “mejor trato”. Mongeló les otorgó personería jurídica a iglesias evangélicas a pesar de estar flojos de papeles. Así conoció a María López Madrid, casualmente también dice ser una perseguida política, quien fue señalada como cabecilla del cartel mexicano de Sinaloa y que lavaba plata a través de la instalación de fastuosas iglesias. Gilberto Monzón, encargado del templo evangélico La Roca, la denunció en su momento. Para la investigación del libro, Monzón, primero dijo conocerla y luego se desdijo ya que explicó que “fue todo un cuento”.
A su vez, Monzón volvió a contradecirse: “No hablemos esto por teléfono”. Una de las personas que hizo correr el rumor de los vínculos de Mongeló con el narcotráfico fue su propia compañera de bancada, Gladys Soto quien, por internas políticas, se peleó a muerte con él hace 3 años. Cuentan en la provincia, que Soto le habría pedido “tapar a la prensa” y “lavar la imagen” de uno de sus hijos quien solía caer detenido por problemas de vandalismo y hurtos en vía pública. “Es un drogadicto”, habría sido la respuesta de un allegado al diputado por lo que Soto no habría tenido más remedio que ir contra su compañero de militancia.
El 28 de diciembre del 2010, el hijo de Egidio García, diputado provincial del Bloque Justicialista Indígena y Popular, fue detenido en un procedimiento conjunto de la Policía Provincial y la Gendarmería Nacional. En el auto oficial, un Nissan de la Gobernación, le encontraron 9 kilos de marihuana. Se justificó diciendo que un asesor de Mongeló le había pedido que transportara el vehículo desde Las Palmas a Resistencia. El hecho puso a la gestión de Capitanich bajo la lupa de los organismos de inteligencia internacionales. El hijo del diputado provincial afirmó que “los narcos están en el cuarto piso de la gobernación” cuenta el periodista Parodi. Casualmente, en ese piso funcionaba la secretaria de Culto dirigida, en aquel momento, por el propio Mongeló.
Hace 48 horas, el empleado del Poder Legislativo, Facundo Eduardo Campos fue detenido tras un intento de robarle la cartera a Analía Moreno, una docente a quien el “motochorro” le pegó una trompada y la arrastró varios metros por la acera de una de las calles céntricas de Resistencia. Facundo Eduardo Campos no pudo cometer el delito pues los vecinos lo tiraron de su moto y lo golpearon salvajemente. El joven de 22 años escapó de la golpiza gritando que era el hijo de la diputada. Su padre era un viejo amigo de militancia de Néstor Kirchner. Su madre es la actual diputada nacional Gladys Soto, la amiga/enemiga de Mongeló.
En una entrevista histórica con el periodista correntino Natalio Aides, la diputada también habla de casualidades permanentes y de persecuciones políticas. Antes de asumir como diputada, Soto era asesora del Ministerio del Interior cuando lo presidía Aníbal Fernández. En su Factbook personal, los amigos de Campos le realizan chistes por su cercanía con Carlotto. La denunciante, Analía Moreno, aún no sale del estupor que le provocó encontrar en la comisaría a la diputada intentando impedir la radicación de la denuncia. Hoy, Campos, fue trasladado a la localidad de “La Escondida” para su “protección”.
La crónica de los hechos publicada en Solo Chaco estremece. Mientras tanto, en la provincia, algunos investigadores no descubren cómo han desaparecido aviones CESNA de la noche a la mañana. Sin embargo, Baltazar Garzón visitó la provincia, invitado por la secretaria de derechos humanos del Chaco, y se reunió con varios protagonistas del libro. Eso sí, no con las víctimas.

Luis Gasulla