lunes, 22 de junio de 2015

EL,GRAN FRAUDE DEL CALENTAMIENTO GLOBAL


EL,GRAN FRAUDE DEL CALENTAMIENTO GLOBAL

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Estamos en manos de demagogos y manipuladores que so capa de servir al hombre y a los pobres, pretenden una revolución contra Dios, contra el hombre, su criatura favorita llamada a una vocación sobrenatural, contra la familia y contra la moral individual impuesta por el Creador.
Utilizan conceptos pseudo religiosos contrarios al cristianismo y plagados de ideas panteistas, de un falso culto a la naturaleza, a la “Madre a Tierra”, para someter a los hombres a la esclavitud de un gobierno masónico mundial y antihumano..en cuya agenda esta el aborto, la homodexualidad, el control de nacimientos, la fiscalización total de la vida humana y la familia.

Los peores de estos corrompidos demagogos son los que se valen de un supuesto cargo y de una supuesta iglesia de Cristo para someter las conciencias y los poderes públicos, que se rendirán a estos desventurados por temor al veredicto de las masas ignaras y manipuladas, con erróneas consignas, anuncios de catástrofes, ideologías políticas de izquierda, demagogias de liberación de pobres y pueblos indígenas, etc…
El calentamiento global es un fraude. Existen variaciones climáticas como existieron en el pasado y mucho más graves que los actuales cambios.
Groenlandia fue un continente “verde” ” green” en cuyas campiñas se levantaron iglesias y villas antes de la pequeña glaciacion del siglo 16 y 17 que llegó más tarde a la costa española del Sur donde se cultivaba la caña de azúcar de Motril que llegó hasta  América. La voz árabe “azúcar” llegó a las lenguas europeas por los panes  de azúcar que salían  desde Motril en embarcaciones que llegaban a toda Europa y por  tierra hasta el centro de Africa. Pero este cultivo desapareció de las costas españolas del Sur debido a la onda de la “pequeña” glaciación. Afortunadamente el clima volvió a su calentamiento tradicional. Todo esto para significar que ha habido en la historia calentamientos y enfriamientos perfectamente naturales. Lo que no ha habido es desaprensivos demagogos que valiéndose de su encumbramiento “profético” que les da “patente de corso” de “falsos profetas” intentan pervertir a la humanidad y a los “católicos” de común acuerdo con una ONU masónica. ¡Que Dios nos ayude!