martes, 18 de octubre de 2016

El secretario de Derechos Humanos quiere que los “genocidas” vuelvan a sus casas

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HERIBERTO J E ROMAN <heribertojeroman@gmail.com>

De: Carlos Marcelo Shäferstein <shaferstein@gmail.com> 

 El secretario de Derechos Humanos quiere que los “genocidas” vuelvan a sus casas
Así lo declaró en referencia a los policías y militares mayores de 70 años que se encuentran en prisión. La postura es compartida por el gobierno de Macri.


En una entrevista reciente con el diario La Nación, el actual secretario de Derechos Humanos Claudio Avruj consideró que tanto él como el Gobierno nacional entienden que los procesados o condenados por crímenes de lesa humanidad mayores de 70 años deben acceder al beneficio de la prisión domiciliaria de forma automática sin tener en cuenta la gravedad de las imputaciones ni la existencia de problemas de salud severos.
Falta poco para cumplirse 40 años del 24 de marzo de 1976, y desde hace algunos meses se han publicado declaraciones en el mismo sentido, pero esta vez tiene una implicancia aún mayor porque se trata de las afirmaciones de un funcionario macrista, y nada menos que quien maneja la cartera de “derechos humanos”, quien que se pronuncia categóricamente a favor de sostener y otorgar mayores privilegios a los miembros de las FFAA y FFSS encarcelados; para que a los ancianos imputados  se les permita continuar sus últimos años de vida rodeados de su familia y sus afectos.
En la actualidad, estos beneficios a los militares y fuerzas de seguridad no son una cuestión excepcional, el propio Estado reconoce que en “la década ganada” la justicia le ha otorgado a alrededor del 40 % de los represores procesados el beneficio del arresto domiciliario, sumado a que en muchas ocasiones salen de sus domicilios con simples acompañantes o fiadores sin custodia del Servicio Penitenciario y los que están cumpliendo condena en dependencias penitenciarias reciben todo tipo de privilegios.
Es más, esta feria judicial estuvo muy activa liberando a más de una decena de internos condenados en juicio oral. Mientras tanto las cárceles siguen superpobladas de personas procesadas por delitos comunes, en su mayoría jóvenes irrecuperables, sindicados y con posibilidad de estudiar y de un trabajo remunerado, derecho que no alcanza a los militares.
Días atrás el Ministerio de Defensa derogó la resolución por la cual los uniformados presos que requirieran atención médica debían hacerlo en su lugar de detención y no en hospitales castrenses, como sí pueden hacerlo ahora atendiendo a las deplorables condiciones en las que se hallan.

† Pater noster, qui es in caelis:sanctificetur Nomen Tuum; adveniat Regnum Tuum; fiat voluntas Tua, sicut in caelo, et in terra.  Panem nostrum cotidianum da nobis hodie; et dimitte nobis debita nostra, sicut et nos dimittimus debitoribus nostris; et ne nos inducas in tentationem;sed libera nos a Malo. Amen †
† Ave Maria Gratia plena, Dominus tecum, Benedicta tu in mulieribus, Et benedictus  Et benedictus fructus ventris Ventris tui Jesus Ave Maria. Sancte Maria Mater dei  Ora pro nobis pecatoribus, Nunc et in hora mortis nostrae. Amen †
​ † Per signum Sanctae   Crucis, de inimicis   nostris, libera nos,   Domine Deus noster.  In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen. †
† Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen †