Venezuela, Paraguay y la escandalosa doble vara de medir de Llamazares
El año pasado comenté aquí la destitución del presidente de Paraguay, Fernando Lugo, por el Senado de ese país, una medida que -como apunté entonces- era legal y acorde a lo que marca la Constitución paraguaya de 1992.
Ignorando estos elementos de juicio, los fans de dictadores como los
hermanos Castro tacharon esa destitución de “golpe de Estado”.
Paraguay: la destitución legal de Fernando Lugo y la histeria roja
Los terroristas de ETA, Hezbolá, Hamás y las FARC lloran a Chávez
El diputado de IU ve al narcotráfico tras la victoria de la derecha en Paraguay
Traigo a colación esa destitución y la grosera manipulación política que hizo de ella la izquierda a propósito de la victoria electoral ayer del Partido Colorado en los comicios presidenciales de Paraguay. Dicho partido forma parte de la Unión Internacional Demócrata
en la que también se encuadran el Partido Republicano de Estados
Unidos, el Partido Conservador del Reino Unido, la Unión Demócrata
Cristiana de Alemania (y su rama bávara, la Unión Social Cristiana) y el
Partido Popular de España, entre otros. Como podréis imaginar, esta
victoria electoral no ha sentado nada bien a la izquierda. A modo de
ejemplo, esta mañana el diputado de Izquierda Unida Gaspar Llamazares escribía lo siguiente en su Twitter:
Como ya he dicho, lo de llamar “golpe de Estado” a una destitución
legal y constitucional es un disparate. Uno más, en todo caso, de los
lanzados por un diputado que ensalza la dictadura comunista de Cuba mientras se refiere a la democracia en España tachándola de “dictadura de los mercados”, o que se limita a definir como “disidencia” las descaradas manifestaciones de apología del terrorismo de un rapero comunista.
Chávez un sangriento golpista, aunque no lo recuerde Llamazares
Pero en este caso el tuiteo de Llamazares resulta especialmente paradójico. Y es que quien sí hizo un golpe de Estado en 1992 -dejando 14 muertos y unos 130 heridos entre civiles y militares- fue Hugo Chávez.
Nunca he visto a Llamazares cuestionando las victorias electorales del
fallecido mandatario venezolano ya no en base a las numerosas
irregularidades que se producían en ellas, o en base a las amenazas de Chávez de sacar los tanques si los venezolanos no le votaban,
sino al hecho de que el vencedor fuese un golpista con las manos
manchadas de sangre. Teniendo en cuenta una diferencia sustancial -en el
23F no hubo muertos-, ¿habría callado Llamazares si Tejero se presentase a las elecciones en España?
Chávez, los narcoterroristas de las FARC y la actitud del diputado de IU
El caso es que el desafortunado tuiteo de Llamazares no sólo es un tiro por la culata en lo relativo al golpismo. Y es que con Hugo Chávez Venezuela se convirtió en uno de los principales nidos del narcotráfico en Hispanoamérica,
una actividad ilegal que frecuentan numerosos miembros de la Guardia
Nacional chavista y el Ejército de ese país. Sonadas fuero las amenazas de Chávez contra Colombia
por los acuerdos de Uribe con EEUU para establecer bases conjuntas de
lucha contra el terrorismo y el narcotráfico. Ya no sonado, sino
escandaloso fue el apoyo de Chávez a los narcoterroristas de las FARC,
a los que acogió en Venezuela, convirtiéndola en santuario de esa banda
de criminales. Lejos de criticar esa alianza entre el fallecido
mandatario venezolano y la mafia revolucionaria colombiana, Llamazares negó la relación entre Chávez y las FARC e incluso dijo que Venezuela no tenía que dar explicaciones al respecto. Dicho sea de paso, no deja de ser preocupante esa actitud en un diputado que desde el año pasado es presidente de la Comisión Mixta Congreso-Senado para el Estudio del Problema de las Drogas.