La puerta que abrimos el domingo pasado, en el primer
programa de PPT, daba a un sitio más grande de lo esperado: la ruta del dinero
K, trasladado con la asistencia de Leo Fariña y con la contención de la “cueva”
de Federico Elaskar – no en vano denominada “La Rosadita”–, comenzaba en
el “Yabrán” de Cristina, Lázaro Báez.
A medida que durante la semana avanzamos en la investigación aquí y en el exterior, algo fue quedando cada vez más claro: Lázaro era Néstor, y la sociedad era completa y distinta a la de Ferreyra (Electroingeniería) o Cristóbal López (grupo Indalo).
Mañana mostraremos pruebas documentales que exhiben ese vínculo.
Es eso lo que había debajo del iceberg y es eso lo que explica, a la vez, el posterior silencio oficial en el que el mutismo de los tuiteros cyberK fue sólo la expresión más grotesca de un grupo paralizado ante la sorpresa. Dos días después, al comenzar el Festival de los Arrepentidos, el Gobierno hizo su apuesta más audaz y equivocada: farandulizar a los protagonistas de la denuncia. Frivolizar todo lo volvió aún más popular.
El Gobierno –Zanini y la SIDE, para ser exactos– decidió centralizar la campaña oficial en América TV. El afán por los nuevos negocios petroleros de Daniel Vila y José Luis Manzano encontró una misión patriótica: parte de los conductores de la pantalla salieron a defender a Fariña y Elaskar como si fueran Robin Hood y Gandhi perjudicados por fuerzas ocultas del periodismo inescrupuloso. Es probable que el hilo, una vez más, se corte por lo más delgado: el dúo Maravilla podría quedar detenido, aunque por otras causas y no por lavado de dinero. Tarde pero seguro, el Estado recordó, después del domingo a la noche, que había varios Reportes de Operaciones Sospechosas recibidos por la Unidad dependiente del Ministerio de Justicia que investiga el lavado de dinero: Un reporte del Banco Santander Río de 2010 sobre una cuenta de Elaskar de 680.000 pesos.
Un reporte del Banco Supervielle de 2010 sobre una cuenta de Elaskar de 460.000 pesos.
Un reporte del Banco Central de la República Argentina sobre “SGI Argentina” de un período de 4 meses por la suma de 15.600.000 pesos.
Un reporte del Standard Bank de 2011 sobre Mario Acevedo Fernández, vinculado a Elaskar, por 90.000 dólares.
Un reporte de la compañía de seguros “La Holando Sudamericana” respecto de Elaskar por un intento de operación por 13.000 pesos y otro intento de otra firma vinculada al financista Vanquish Capital Group por 33.000 pesos, ambos de 2011.
Un reporte del Banco Hipotecario de 2011 sobre la financiera SGI y Gustavo César Fernández, vinculado a la empresa, por casi 4.000.000 de pesos.
Un reporte de 2012 del Banco Central sobre SGI, Don Francisco SRL, Agriganadera Los Toldos y otras sociedades vinculadas a la estructura de Elaskar por 4.600.000 pesos.
Un reporte generado por la AFIP de 2011 respecto de Fariña por la compra de un Audi y un BMW por la suma de 650.000 pesos.
Habría que decirle a Mauro Viale, Luis Ventura y Rolando Graña que están defendiendo a la gente equivocada.
“Analizando la primera y la segunda declaración de Federico Elaskar se puede hacer un festín que lo lleva directo a la cárcel ”, le dijo a Clarín Alicia López, ex presidente de la UIF y ex gerente del Banco Central. “Se ve que está nervioso y lleno de inconsistencias. Yo llamé al Central y SGI no está autorizada como financiera para funcionar. ¿Se puede investigar? Sí, si se quiere. Pero están dejando pasar el tiempo para que se borre todo”. “El organismo que más información maneja es la AFIP. Pero la usa para los perejiles”, concluye López.
Según un estudio de la organización independiente Tax Justice Network (TJN), millonarios de todo el mundo tienen entre 21 y 32 billones de dólares en paraísos fiscales. De esa suma, 399.000 millones de dólares corresponden a ricos argentinos, según se desprende del informe The Price of Offshore Revisted. Para decirlo de otro modo, un PBI.
Argentina es uno de los cuatro países latinoamericanos que más dinero enviaron a paraísos fiscales entre 1970 y 2010. También están Brasil, México y Venezuela.
La oficina pública que fracasa a la hora de controlar esta evasión es la denominada PROCELAC, Procuraduría Adjunta de Criminalidad Económica y Lavado de Activos, creada por la procuradora Alejandra Gils Carbó, quien puso a su cargo a Carlos Gonella, un fiscal cordobés especializado en causas vinculadas a derechos humanos y con nulos antecedentes en materia de delitos financieros. El único antecedente de Gonella es una causa en Córdoba de un almacén que lavaba dinero a través de la venta de drogas lo que, en temas de lavado, es una causa menor y excepcional. En los últimos diez años sólo se registraron en Argentina dos causas por lavado y esa, la del almacén, fue una. La otra fue contra una pareja de mexicanos que entró por Ezeiza con 647.000 dólares no declarados.
La UFILAVDIN (junto a PROCELAC, otro organismo con nombre de remedio), Unidad Fiscal para la Investigación de los Delitos de Lavado de Dinero, se creó en el 2006 con el objetivo de impulsar las denuncias de lavado presentadas por la UIF. El informe del Ministerio Público del año 2011 advierte que en cinco años sólo presentaron 59 denuncias penales y archivaron 192 casos. Dicho de otro modo: presentó denuncias penales por lavado sólo en el 9% de los casos.
En diciembre de 2010 se conoció uno de los cables de WikiLeaks en el que Vilma Martínez, la embajadora de Estados Unidos en Argentina, acusaba al Gobierno nacional de no colaborar en la lucha contra el lavado de dinero y advertía sobre operaciones financieras sospechosas del matrimonio Kirchner en Suiza, Liechtenstein y Luxemburgo.
A medida que durante la semana avanzamos en la investigación aquí y en el exterior, algo fue quedando cada vez más claro: Lázaro era Néstor, y la sociedad era completa y distinta a la de Ferreyra (Electroingeniería) o Cristóbal López (grupo Indalo).
Mañana mostraremos pruebas documentales que exhiben ese vínculo.
Es eso lo que había debajo del iceberg y es eso lo que explica, a la vez, el posterior silencio oficial en el que el mutismo de los tuiteros cyberK fue sólo la expresión más grotesca de un grupo paralizado ante la sorpresa. Dos días después, al comenzar el Festival de los Arrepentidos, el Gobierno hizo su apuesta más audaz y equivocada: farandulizar a los protagonistas de la denuncia. Frivolizar todo lo volvió aún más popular.
El Gobierno –Zanini y la SIDE, para ser exactos– decidió centralizar la campaña oficial en América TV. El afán por los nuevos negocios petroleros de Daniel Vila y José Luis Manzano encontró una misión patriótica: parte de los conductores de la pantalla salieron a defender a Fariña y Elaskar como si fueran Robin Hood y Gandhi perjudicados por fuerzas ocultas del periodismo inescrupuloso. Es probable que el hilo, una vez más, se corte por lo más delgado: el dúo Maravilla podría quedar detenido, aunque por otras causas y no por lavado de dinero. Tarde pero seguro, el Estado recordó, después del domingo a la noche, que había varios Reportes de Operaciones Sospechosas recibidos por la Unidad dependiente del Ministerio de Justicia que investiga el lavado de dinero: Un reporte del Banco Santander Río de 2010 sobre una cuenta de Elaskar de 680.000 pesos.
Un reporte del Banco Supervielle de 2010 sobre una cuenta de Elaskar de 460.000 pesos.
Un reporte del Banco Central de la República Argentina sobre “SGI Argentina” de un período de 4 meses por la suma de 15.600.000 pesos.
Un reporte del Standard Bank de 2011 sobre Mario Acevedo Fernández, vinculado a Elaskar, por 90.000 dólares.
Un reporte de la compañía de seguros “La Holando Sudamericana” respecto de Elaskar por un intento de operación por 13.000 pesos y otro intento de otra firma vinculada al financista Vanquish Capital Group por 33.000 pesos, ambos de 2011.
Un reporte del Banco Hipotecario de 2011 sobre la financiera SGI y Gustavo César Fernández, vinculado a la empresa, por casi 4.000.000 de pesos.
Un reporte de 2012 del Banco Central sobre SGI, Don Francisco SRL, Agriganadera Los Toldos y otras sociedades vinculadas a la estructura de Elaskar por 4.600.000 pesos.
Un reporte generado por la AFIP de 2011 respecto de Fariña por la compra de un Audi y un BMW por la suma de 650.000 pesos.
Habría que decirle a Mauro Viale, Luis Ventura y Rolando Graña que están defendiendo a la gente equivocada.
“Analizando la primera y la segunda declaración de Federico Elaskar se puede hacer un festín que lo lleva directo a la cárcel ”, le dijo a Clarín Alicia López, ex presidente de la UIF y ex gerente del Banco Central. “Se ve que está nervioso y lleno de inconsistencias. Yo llamé al Central y SGI no está autorizada como financiera para funcionar. ¿Se puede investigar? Sí, si se quiere. Pero están dejando pasar el tiempo para que se borre todo”. “El organismo que más información maneja es la AFIP. Pero la usa para los perejiles”, concluye López.
Según un estudio de la organización independiente Tax Justice Network (TJN), millonarios de todo el mundo tienen entre 21 y 32 billones de dólares en paraísos fiscales. De esa suma, 399.000 millones de dólares corresponden a ricos argentinos, según se desprende del informe The Price of Offshore Revisted. Para decirlo de otro modo, un PBI.
Argentina es uno de los cuatro países latinoamericanos que más dinero enviaron a paraísos fiscales entre 1970 y 2010. También están Brasil, México y Venezuela.
La oficina pública que fracasa a la hora de controlar esta evasión es la denominada PROCELAC, Procuraduría Adjunta de Criminalidad Económica y Lavado de Activos, creada por la procuradora Alejandra Gils Carbó, quien puso a su cargo a Carlos Gonella, un fiscal cordobés especializado en causas vinculadas a derechos humanos y con nulos antecedentes en materia de delitos financieros. El único antecedente de Gonella es una causa en Córdoba de un almacén que lavaba dinero a través de la venta de drogas lo que, en temas de lavado, es una causa menor y excepcional. En los últimos diez años sólo se registraron en Argentina dos causas por lavado y esa, la del almacén, fue una. La otra fue contra una pareja de mexicanos que entró por Ezeiza con 647.000 dólares no declarados.
La UFILAVDIN (junto a PROCELAC, otro organismo con nombre de remedio), Unidad Fiscal para la Investigación de los Delitos de Lavado de Dinero, se creó en el 2006 con el objetivo de impulsar las denuncias de lavado presentadas por la UIF. El informe del Ministerio Público del año 2011 advierte que en cinco años sólo presentaron 59 denuncias penales y archivaron 192 casos. Dicho de otro modo: presentó denuncias penales por lavado sólo en el 9% de los casos.
En diciembre de 2010 se conoció uno de los cables de WikiLeaks en el que Vilma Martínez, la embajadora de Estados Unidos en Argentina, acusaba al Gobierno nacional de no colaborar en la lucha contra el lavado de dinero y advertía sobre operaciones financieras sospechosas del matrimonio Kirchner en Suiza, Liechtenstein y Luxemburgo.