Nuestra patria hoy, "DA PARA CUALQUIER COSA", lo que para nada significa que todos "SOMOS CUALQUIER COSA". Hay quienes estan dispuesto a revelar esta realidad y nosotros nos sumamos a difundir lo que alguién escribió con valentía. En especial para que aquel numeroso 54% del 2011, deje de componerse con una mayoría de "BOLUPIDOS" o "TARUPIDOS" que nos hace gobernar por "ALI BABA" y sus XXXXXX cantidad de ladrones mejorando al antecesor. De los comentarios de grupos de GOOGLE, copiamos un artículito que se gestó mediante el accionar de aquella "JUVENTUD MARAVILLOSA" fundando en nosotros tal vez demasiada duda: ¿Porqué motivo los "MONTOS" en CUBA crearon una guardería de niño?...Tendremos nuestras dudas, pero con sus pruebas fotográficas así lo demuestran.
Guardería en Cuba para los hijos de Montoneros… ¿alguna vez se preguntó para qué tenía Montoneros una guardería en Cuba?
Los “Pura Sangre”
El día de la Raza mutó de nombre por obra y
arte de los que reniegan de la Historia y del destino que nos trajo, mal
o bien, hasta el aquí y el ahora.
Josefina González, sus padres secuestraron, torturaron y ahorcaron a Larrabure
El 12 de octubre ya no se festeja el día de la Raza, como cuando
éramos nosotros niños y al mejor del grado le tocaba hacer de Cristóbal
Colón y a los demás nos tocaba hacer de indios, sino que conmemoramos
el Día del Respeto a la Diversidad Cultural.
El cambio en el nombre de la celebración pareciera carecer de
sentido en un país donde desde siempre hemos convivido en paz con los de
todas las razas y con los de todas las religiones. Donde los de acá o
los venidos desde algún allá, hemos sabido convivir en éstas tierras con
nuestros acervos culturales y religiosos intactos.
La izquierda rococó (esa que gusta hablar de lo popular y de lo
nacional y de lo público… mientras manejan autos alemanes vacacionan en
Miami y se atienden en los sanatorios más caros), bajo recomendaciones
del Foro de San Pablo, utiliza políticamente la cuestión de los “pueblos
originarios” para hacer política con el descubrimiento de América.
Crear heridas profundas, allí donde había cicatrices. El Modelo.
Ahora la estatua de Colón yace boca arriba en una plaza
esperando que la justicia decida lo que la imbecilidad requiere, y un
grupo de vivos han tomado una representación que no tienen, y hablan la
voz de los “pueblos originarios”, reclamando por una historia y un
destino forjados 500 años atrás.
Nuestra izquierda rococó hace política con la sangre de la
historia. Lo hizo ayer, lo hace hoy… y lo hará siempre hasta que
nosotros digamos Basta.
Cuentan que en el comienzo de las orgas terroristas en nuestra
América profunda, Regís Debray, El Francés, desgranaba una y otra vez
los cinco puntos básicos del manual del guerrillero que había redactado
en su oficia de París… El Ché Guevara lo miró y soltó sus reflexiones
como un chicotazo: “Cada vez somos menos y nos matan a los mejores. ¿Qué
campesinos…? Estos lampiños me miran la barba y empieza a desconfiar de
este blanco que habla de cosas que suenan raras. La forma de mirar como
si no lo hicieran saca de las casillas a cualquiera. Los arengo y ni
siquiera se imaginan quién les habla o quién podría ser; ¿qué reforma
agraria les puedo prometer si ya la tuvieron y siguen igual o peor…?
¿Darles un fusil para que enseguida lo cambien por cualquier cosa? Hasta
hubo uno que me hizo saber, así como al pasar, que son más antiguos que
los Incas y lo hizo con orgullo para decirme que el paso del tiempo
contribuye a formar algo así como un título de nobleza, algo jerárquico
que debe tenerse en cuenta para las decisiones de fondo y que por eso
nadie puede darles órdenes como hacemos entre nosotros. Te aseguro que
yo entiendo de éstas cosas. Ellos son los que establecen las
diferencias, hipócritas orgullosos en su humildad. Te repito Francés que
yo entiendo de éstas cosas y son más cerrados que los indígenas del
Perú… inteligencia no me pasó estos datos, y éstos datos son
fundamentales cuando tenés que tratar con gente primitiva, extranjera y
para colmo, en su propia tierra…”
Así hablaba de los campesinos y de los “pueblos originarios” el prototipo de los “pura sangre” de éstos lares.
Los “pura sangre” son esa raza “especial” que hace mucho tiempo
tomaron las armas para mentir y mentirse que cambiarían el mundo matando
por la espalda con fusiles y minas vietnamitas.
Los “pura sangre” se juraron hacer uno, dos y muchos Vietnam.
Matar o morir. Los pura sangre de Argentina se juramentaron tomar el
Poder por las buenas o por las malas… pero empezaron por las malas, y
por las malas no pudieron. Así que intentaron luego por las buenas. Y
por las buenas sí pudieron, porque nosotros los dejamos. Los pura sangre
se han jurado reivindicar como heroica la gesta setentista del horror
terrorista.
Guardería en Cuba para los hijos de Montoneros… ¿alguna vez se preguntó para qué tenía Montoneros una guardería en Cuba?
(Firmenich en el centro Jefe Montonero)
El pura sangre Juan Cabandié, reivindica con orgullo la lucha
armada de sus padres terroristas de la agrupación Montoneros hasta
cuando le piden el pago del seguro del auto. Al principio a Cabandié lo
deslumbraba el socialismo, hasta que “los Kirchner lo emborracharon de
poder”. Le metieron en la cabeza las ínfulas del “pura sangre”. Fue en
Cuba que Juan Cabandié “oyó el llamado”. En 2003 dice que se emocionó
con el discurso que Fidel Castro dio en las escalinatas de la Facultad
de Derecho, cuando el “pura sangre” cubano viajó para participar de la
asunción del exitoso militante inmobiliario Néstor Kirchner. Luego, en
2005, Juan Cabandié viajó a Cuba y se entrevistó con quien fue el
encargado de la guardería de los hijos de los integrantes de la
organización Montoneros en la década del ’70. En Cuba, Montoneros tenía
una guardería donde dejaban a sus hijos mientras ellos salían a matar
por América del Sur. Cabandié dijo que eran épocas de indagar no sólo
sobre su identidad biológica sino también política. A él lo inquietaba
el socialismo pero, contó que la conversación con el funcionario cubano
que operó como vínculo con las organizaciones armadas terroristas de
argentinas lo ayudó a convencerse de que lo suyo era el peronismo, donde
habían militado sus padres.
Los “pura sangre” son los Cabandié, pero también son los Dante
Gullo, los Kunkel, los Verbitsky, los Bonasso, los Obeid, las Hebe, la
Carlotto y toda esa clase de funcionarios y representantes que
reivindican directa o indirectamente al terrorismo setentista en
Argentina. Pertenecer tiene sus privilegios. Ellos sienten que tienen un
aura especial, dada en ese gusto por la sangre derramada de sus hijos,
de sus padres… o de ellos mismos. Y bajo la impunidad de ese linaje han
esquilmado el erario público y minado las instituciones con sobredosis
de soberbia.
Yo digo Josefina González y seguramente usted de encoja de
hombros. Ella es la candidata “pura sangre” que acompaña a otro “pura
sangre” de Santa Fe, Jorge Obeid. Josefina González es hija de dos
integrantes de la organización terrorista Ejército Revolucionario del
Pueblo (E.R.P.), y autores materiales a sangre y fuego, y en banda del
asalto a la fábrica Militar de Pólvora Villa María, provincia de
Córdoba, acaecido en agosto de 1974. Gobernaba el país Isabel Martínez
de Perón, y en ese ataque terrorista se llevaron secuestrado al Coronel
(post mortem) Argentino del Valle Larrabure. Lo mantuvieron en
cautiverio durante un año, en un pozo denominado por sus captores
“Cárcel del Pueblo” situado en Pasaje Bariloche 4220 de la ciudad de
Rosario. 372 días exactos estuvo secuestrado Larrabure, y sus últimos 9
meses en una vulgar excavación carente de luz natural y ventilación, un
lugar que se inundaba cuando llovía. Sí, quienes mantuvieron cautivos en
Rosario a Larrabure, Vicari y vaya a saber cuántos más, fueron los
papás de Josefina, y su abuela. Dardo Tosetto, Rut González y la madre
de Ruth, Amorosa Brunet de Gonzalez, que simulaban una mercería en una
casa de Rosario para ocultar sus actividades terroristas. Mientras
tanto, dos metros bajo tierra, mantenían secuestrados a militares y
empresarios… Josefina es candidata pura sangre en la lista del Frente
para la Victoria de Santa Fe: “Soy parte de las nuevas generaciones que
volvimos a creer en la política a partir del proyecto de Néstor y
Cristina, y el impulso al juicio y castigo a los represores…”
Los “pura sangre”, esta raza especial de argentinos, militando
en la mezquindad de profundizar heridas de venganza, allí donde antes
había cicatrices de perdones.